Mi chico de Virginia.© #ECDV2 |Pausada|

Capítulo 13

Recomiendo que escuchen la canción de arriba. Disfrútenlo.

Dormí apenas un par de horas. A las seis de la mañana ya estaba dándome una ducha y a las siete camino del aeropuerto con Matt y Jack J.

  —¿Segura qué quieres irte? —pregunta Matthew otra vez.

Asentí al mismo tiempo que dejaba escapar un suspiro. No me imaginaba que esto llegara a ser tan duro.

Me hacía gracia ver a los chicos con gorras y gafas de sol. Hacían esto para que supuestamente nadie los reconociese, pero yo creo que cualquiera con dos dedos de frente se daría cuenta de que eran ellos.

Bajamos del coche, Jack coge mi maleta y yo camino al lado de Matt. Entramos dentro del aeropuerto y buscamos unos bancos cercanos.

Antes de sentarme, cojo mi maleta y la agarro con fuerza. Tenía que liberar energía por algún lado.

  —Vuelvo a Virginia vayan pasando por la puerta de embarque 7 —se escucha por el megáfono diez minutos después.

Me levanto despacio y miro a Jack con una sonrisa. Me acerco a él y lo envuelvo en mis brazos.

  —Gracias por todo —le susurro.

Después miro a Matt, que parecía que iba a llorar, y le doy un corto y delicado beso en la mejilla.

  —Adiós —susurro.

Mi mano baja por toda su mejilla, recorriendo su brazo lentamente y llegando a la punta de sus dedos. Me da un pequeño tirón antes de soltarlo y girarme, dándole la espalda. Cojo aire y ando hacia la puerta de embarque limpiándome una lágrima.

No mires atrás, no mires atrás, no mires atrás.

  —Matt, ¿de verdad vas a dejar qué se vaya? —oigo la voz de Jack.

Por favor Matthew párame, por favor Matthew párame, por favor Ma...

  —¡Summer! —grita.

Me quedo parada, yo y mitad de la gente del aeropuerto.

  —Summer lo siento mucho —vuelve a decir Matt—. No puedo dejar que te vayas así, antes tengo que decirte una cosa.

Ahora sí me giro. A un par de metros de distancia estaba Matt mirándome, atrás de él Jack con una sonrisa y, a los lados, varias personas con la vista fija en nosotros.

  —Lo siento mucho —dice arrepentido—. Siento mucho haberme ido con Helen.

Yo sonrío con lágrimas en los ojos y me encojo de hombros.

—Parece buena chica —consigo decir—. Cuídala.

—¡Pero es que yo no quiero cuidarla a ella! —exclama rapidamente—. Me equivoqué, no sabía lo que hacía, pero créeme cuando te digo que si sé que ella no me gusta, es una buena amiga y le tengo cariño. Eso es todo.

Mi corazón iba a cien por hora, iba a explotar en cualquier minuto.

—Ella es mi pasado, pero tú... —vuelve a decir—. Tú eres mi presente y todo mi futuro.

Notaba como el pecho se me iba hinchada de la emoción poco a poco. Comencé a andar lentamente hacia él.

  —Me asusté, me asusté mucho por nuestra relación —confiesa—. Porque yo te quiero Summer.

No me podía creer lo que acaba de decir. De repente era como si todo se parase, como si el tiempo se parase. Como si la gravedad hubiera desaparecido.

—Te quiero mucho y nunca había querido a nadie así y estoy loco por ti y...

No lo dejé acabar. Mis manos agarraban su rostro fuertemente para que no se fuese nunca y su lengua se hacía paso por mis labios.

  —Te quiero —le digo yo—. Te quiero.

Apoya su frente en la mía y, aún con los ojos cerrados, sonríe. Le doy un corto beso y echo una suave carcajada. La gente, al igual que Jack, aplauden exhaustos.

  —Somos unos expertos en montar escenas así —dice haciendo que ría más—. Te quiero.

Enrollé mis brazos en él y cogí aire fuertemente asimilando la escena. Acababa de decirme que me quería por primera vez.