Gloreida

*Cinturon*

Cada beso que le daba, cada caricia que le hacía cada vez me prendía más y más, jamás había sentido tanta excitacion, ni siquiera con mi esposo, estaba tan mojada...
Gloria arqueaba su espalda y se retorcía mientras suspiraba, cerraba sus ojos y apretaba su entre pierna cada vez que le daba besos en ella.
-Bri-seida- decía entre suspiros y pequeños gemidos ahogados.
Gloria tomó mi cabeza con sus manos y comenzó a masajearme, después fue moviendo levemente mi cabeza hacia su entre pierna y yo sabía lo que quería porque, yo también lo quería...
-Ay Briseida, eh esperado tanto este momento- dijo jadeando y contoneándose en el escritorio.
-Yo también Gloria- conteste, pero en realidad lo había esperado? Era verdad o solo era un decir?... Fue entonces cuando caí en cuenta de que de verdad la deseaba, la necesitaba, necesitaba sentirla, ah...
*jadeos y suspiros*
Me adentré entre sus suaves piernas hasta que comencé a besar por encima de sus bragas color carmín, sin duda ese empezaría a ser mi color favorito de ahora en adelante.
Fui retirando su pantalón levemente, primero las hice de lado solo para poder pasar mi lengua por sus labios, de verdad que estaba exitada, estaba igual de mojada o más que yo. Adentré mi lengua un poco dentro de su "flor" (vamos a llamarle así pa que no suene tan feo eda :'v) era un sabor tan único y me encantaba, era cálido y sin duda era igual de dulce que sus labios... Sus otros labios... (Los de arriba pendejos)
Cada que metía mi lengua ella arqueaba su espalda y escuchaba como suspiraba de placer... Era tan hermosa...
Dejé de saborearla y opté por bajarle completamente las bragas.
Las bajé hasta sus pantorrillas y ella las quitó con unos cuantos movimientos.
Coloqué sus piernas alrededor de mi cuello y nuevamente  me adentré en su flor.
Metí mi lengua y comencé a hacer círculos en su clitoris, después comencé a lamerlo y mordisquearlo un poco. Fui bajando mi lengua cada vez más y disfrutaba de ese sabor, subí mis manos para poder juguetear con sus senos un poco más mientras que con mi lengua hacia pequeños círculos entre sus labios.
-Ah...- era Gloria, en verdad creo que le estaba gustando.