Capitulo 31

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  -Tú me dijiste que me amabas- Una lágrima se deslizo por su mejilla.
-Matias yo sí te a...- Me callé al sentir un pequeño dolor en el abdomen.
-Ella no te ama, jamás lo hizo Cordaro- Dijo el calvo viendo como a Matias le caían sin cesar las lágrimas- ¿Por qué mejor no te vas a llorar a otro lado?- Me tomó por la cara y me dio un beso a la fuerza.
-¡Suéltame!- Me separé con las pocas fuerzas que me quedaban. Giré mi vista al asiento de adelante, estaba vació. Tras la ventana podía ver como Matias corría a su casa.
-Ya está la primera parte del plan- Se bajó del auto para ir al asiento del piloto.
-¿Ahora qué?- Preguntó el tal Michael.
-Nos dividimos y hacemos la segunda parte del plan.
-Toma- Susurró Sandy pasándome un teléfono de color rosa.
-¿Para...
-Tú te vas- El tipo sacó a Sandy del auto.

Por el espejo pude ver como ella me hacía una seña, hice caso a su mensaje y rápidamente metí el celular en mi sujetador.

-Ve con ellos- Le dijo al otro chico, de modo que tan solo quedamos el rapado y yo.
-¿Qué vas a hacer conmigo?
-Llevarte a un lugar- Sonrió mientras le ponía seguro a las puertas.
-¿Qué quieres de mí? Ya tu venganza está hecha.
-No aun- Le dio marcha al vehículo.
-No entiendo tu mente retorcida.
-Fácil, si te dejo ir lo primero que harás es ir donde tu noviecito, le dirás todo y él te creerá.
-¿Pretendes mantenerme lejos para siempre?- Reí sarcásticamente.
-No, solo hasta que Matias se olvide de ti y te cambie por otra.
-Matias no me cambiará.
-No creas tanto linda, por lo que se hay muchas chicas a las que les gustaría estar en tu lugar.

Maldito hijo de... ¡Ah! Lo odio como jamás he odiado a alguien, me hizo lastimar a Matias ¿Qué estará haciendo él ahora? ¿Lo estará pasando tan mal como yo? Muchas preguntas pero sin duda lo que más me preocupa es si ¿A pesar de todo él aún me ama?

-Llegamos- Se bajó del auto.
-No me bajaré- Me crucé de brazos.
-Lo harás- Abrió la puerta. Y me subió a su espalda.
-¡Bájame!- Comencé a patalear.
-Todavía no- Entro conmigo a una especie de bodega.
-¿Qué esto?- Comenzó a subir una escaleras.
-Tu nuevo hogar- Me lanzó a una cama- Y esta será tu habitación- Abrió unas cortinas.

Las paredes eran de lata, había mucho polvo y tenía millones de afiches decorando las paredes. Más que parecerme feo y antihigiénico me pareció... interesante.

-Oye ¿¡Qué haces!?- Dije al sentir sus manos en los bolsillos de mi pantalón.
-No necesitaras esto- Me quitó el teléfono- ¿Tienes hambre?
-No- Lo miré seria y me senté en la cama mirando a la ventana.
-Vamos- Se sentó a mi lado- No pretendo que te mueras- Lo ignoré- Ok. De todos modos iré a prepárate algo- Se fue y cerró la puerta.

Seguí con mi vista en la ventana, de ahí a la calle que había allí abajo habían aproximadamente unos cuatro metros de distancia. Imposible escapar por la ventana.

-Matias...- Murmuré pasándome la mano por el cuello- ¡Sandy!

Recordé que aún tenía su teléfono en mi sujetador, lo saqué y busqué entre los contactos a Matias. Lo hallé y torpemente marqué su número... nada ¡Maldita señal!

El calvo me entregó un sándwich y una lata de gaseosa de naranja y después se fue. Tenía demasiada hambre como para hacer valer mi orgullo así que me comí todo sin dejar ni las migas. Estuve la tarde pensando en lo que Matias pudiese estar haciendo ¿Será que me cambiará por otra?

-¿Por qué no te duermes?- A pareció el sujeto sin cabello.
-¿Qué hora es?
-Son las ocho- Miró el reloj.
-Ok- Me recosté en la cama.
-Adiós- Apagó la luz y se marchó.

Intenté dormir recostada sobre las sabanas pero no podía, mi cuerpo estaba aquí pero mi mente estaba con Matias. En un último intento cerré los ojos pero algo molestaba, abrí los ojos y vi como en la pared se refregaba una luz resplandeciente. Me senté en la cama y miré por la ventana y lo único que hallé fue a un auto blanco apuntando con sus luces hacia acá.

Electric Shock (Matias Cordaro) - Primera Temporada TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora