La muerte nunca hubiera sido tan fascinante. Pero al soportar este sufrimiento que nunca quise (¿Quién en su sano juicio quisiera eso?) me había aferrado a ser aquel ser que todos odiaban. No quitaba mis ojos ni por un momento de mi madre, ni siquiera cuando mirándome fijamente y sin un ápice de culpa o dolor en ellos, me decía: "nunca te quise tener" con una voz sin emoción. Después de ser víctima de una violación sus sueños se disolvieron como fósforo expuesto al aire, realmente yo ya sabia de esa tan delicada parte de la historia, pero si la primera en que ella me contaba toda la historia, ya que me enteré de ello cuando pasé me dirigía a su habitación luego de una de mis constantes pesadillas de niña, antes de tocar la puerta escuché el llanto de mi madre mientras le contaba a "mi padre" la traumática experiencia de la que fue víctima, fue en la época cuando los problemas habían resquebrajado tanto la relación que tenían que no había forma de repararse.
Pero lo que me dejó más pasmada fue saber más de la historia, pues aunque mi papá aun sabiendo de antemano lo que le pasó, se enteraba al mismo tiempo que yo, de las trágicas y horribles decisiones que tomó mi madre.
-Mi anhelo era tener un niño y cuando los doctores me mostraron en las ecografías que ese tendría, fui la mujer mas feliz del mundo. Esto cambio cuando un 29 de abril lo perdí, casi a las 8 pm aprox. Ellos realmente nunca me dieron detalles o quizás si pero en el estado en el que me encontraba mi cerebro no interpretaba las palabras que me dirigían, al final se resumía en que mi bebé había muerto. Lo había destrozado dentro de mío y nunca llegaría a ver la luz del sol. Ese día lloré amargamente sin descanso hasta el día siguiente en que no tenía más lágrimas en mi interior.
Mi alma se llenó de dolor y desprecio a mi misma, a los doctores, al hospital y al resto del mundo. Fui a la sala de cuidados y ahí fue cuando te vi, mi pequeño Alexander no había muerto, simplemente había nacido desde el vientre de otra persona. Tus cachetes de ternura y la sonrisa radiante que se dibujó en tu rostro fueron las pruebas, estaba destinada a ser tu madre, te tomé de brazos y salí de aquel sitio en dirección a casa, aproveché la precaria condición de la zona donde vivíamos y escapé del país como inmigrante ilegal. Me sentí tan despreciable cuando noté como te convertías en todo lo que no quería, una mujercita
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MUÑECA DE PAPEL
Novela JuvenilHe sido una maldita bomba de sentimientos encerrados sin detonador. Quise explotar pero nunca pude. Hoy me queda la más grande frustración junto a la inmensa montaña de quizás y recuerdos de un futuro inventado que aún imagino pero que no sé si lleg...