Capítulo 8

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- No puedo creerlo - dijo Amanda.

No pude dar reacción alguna. 

- ¿Como es posible eso?

- ¿Un fantasma?

Nunca creí en fantasmas, pero todo lo que estaba pasando no tenía otra explicación posible.

Un celular que me enviaba mensajes sin que nadie lo controlara. 

- Mándale un mensaje.

- ¿Qué dices? - pregunté alarmada.

- Quiero que le mandes un mensaje. Si ese celular te pudo responder si le mandas obviamente te responderá. ¿No crees?

- Entiendo perfectamente Amanda pero esto es demasiado. Debemos deshacernos de esta cosa. No es normal que el celular mande mensajes por si solos.

- ¿Te da miedo?

- Si y, ¿a ti no?

- La verdad es que estoy muerta de miedo. ¿Pero que podemos hacer? Piénsalo bien, una chica se suicidó hacer 3 semanas por algún motivo en específico que no conocemos. Y según veo si todo este asunto de que hay un espíritu aquí. Es obvio que el asunto no fue solo un simple suicidio.

- Pero eso no nos incumbe a nosotras.

- No quisieras ponerle un punto final a esta historia. Claramente ella nos está pidiendo ayuda.

- No entiendo que es lo que tenemos que ver en todo esto. Ni siquiera deberíamos estar hablando del tema. Simplemente debemos desaparecer ese celular. Además tu también tienes miedo.

- Ester tu sabes que yo soy más cobarde que tu. Lo sabes desde que empecé a gritar en la sala de cine cuando vinos nuestra primera película de terror.

- Hiciste que nos botaran del cine. - le regañé recordando lo que había sucedido hace años.

- Ese no es el punto. El punto es que nada nos detiene. Solo mándale un mensaje. Si todo este asunto se vuelve más ... 

- ¿Absurdo?

- ¡No! Si todo este asunto se vuelve mas terrorífico lo dejaremos. Pero hasta entonces creo que debemos ayudarla en lo que nos está pidiendo.

- ¿Descubrir quienes la mataron? ¿Amanda te estás oyendo? Los reportes señalan y afirman que esa chica se suicidó.

- ¿Que motivos tenía para hacerlo?

- Terminó con su novio y además estaba embarazada. 

- Eso no es creible.

- Las investigaciones no fueron suficientes. Nadie sabe nada de su novio y los padres callaron después de ese suceso.

- Porque seguro estaban dolidos.

- A mi parecer que el colegio no quería hacer un escándalo y los callaron.

- En serio te importa este tema, ¿cierto?

- No te imaginas cuanto.

- Si sigo siendo tu amiga voy a terminar loca.

- ¿Mas de lo que ya estás?

Sonreí.

- A ese extremo llegas - le devolví la sonrisa.

Mi celular empezó a vibrar.  

Amanda y nos miramos, cogí el celular.

  Mensaje nuevo.  

Era el mismo número. 


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