Cap 14

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Con el pasar de los días, Nam Joon en un estado mental de locura, o de clarividencia, se había auto convencido –aunque era por mi culpa- de que no había cometido un engaño con Jennie. Por el contrario comenzó a creerse mi cuento de que era porque en verdad gustaba de ella y nunca lo había aceptado.

Pobre iluso. Si supiera que todo esto fue trama mía, no la visitaría cada tres días para follársela. Que lejos de ser un acto amoroso, estaba lleno de despecho y sufrimiento.

Aunque tal vez muy en el fondo, sabía de mis artimañas, puesto que siempre llegaba muy tomado y su mirada llena de odio hacia mí era tan evidente, que no volvimos a hablarnos durante dos semanas.

-Creo que van a despedir a Nam Joon de su trabajo- Me comentó ella mientras se miraba en el espejo de cuerpo entero en el baño que usaba para probarse un vestido mientras yo me cepillaba los dientes.

-¿Ah sí?- Quise sonar desinteresado.

-Ah estado bebiendo mucho y eso afecta su desempeño laboral-

-Dile que no tome- Escupí y me enjuagué.

-Hoy por primera vez vamos a tener una cita- Me informó antes de que me fuera.

-Bien por ti- Quise ignorarla, pero ella se sentó sobre el retrete y a pesar de que ya me había vuelto, tuve que girarme:-¿Qué pasa?-

-Sé que él está en un período de transición… pero no es como yo lo imaginaba-

-¿Por qué?-

-Hace las cosas de forma tan… fría. Como sino lo sintiera o como si estuviese obligado a hacerlo-

-Tú misma lo dijiste…- Le recordé:- Está en un período de transición- Ella se levantó y se acercó a mí.

-Lo sé… pero cuando me toca, no siento nada…- No supe que contestar a eso. Pero quedé conmocionado cuando ella apoyó su frente a mi pecho:- Esto es lo que yo quería, pero no se siente bien…-

-Dale tiempo-

-Es que no se siente como cuando estoy contigo- Alzó su mirada. Sus largas pestañas parpadeaban frente a mí y se ondulaban de una forma muy delicada. Sus ojos brillantes y sus labios entre abiertos.

-Jennie- Murmuré.

-Tae Hyung- Pronunció con tanto deseo como el que yo sentía por ella.

La tomé del cuello y acerqué su boca a la mía con fuerza. Los dos sabíamos que estaba mal. Pero la ansiedad nos corrompía.

Ella pasó sus brazos por mi cuello y yo la hice levantada para que ella pudiera aferrarse con sus piernas a mí cintura.

El frenesí era tal que nos necesitábamos ahí mismo, por lo que en lugar de llevarla a la cama la pegué contra la pared.

Sabía muy bien que esto no implicaba absolutamente nada. Ella estaba dolida por la frialdad de Nam Joon y solo buscaba un remplazo momentáneo. Pero justo en ese instante no me importó.

Ella soltó el cordón de mi pantaloneta, y aun sin querer soltarla, entre ambos nos las arreglamos para bajar mi bóxer. Ante la desesperación del momento, y aunque agradecía la ausencia de un pantalón, terminé rompiendo sus delicadas bragas de encaje para penetrarla con fuerza.

-¡Ah!- Exclamó ella tirando su cabeza para atrás.

-Jennie…- Murmuré en su cuello mientras le daba besos.

-Tae…- Me rogó ella para que empezara a moverme y así se lo concedí.

Con una mano aprisionaba su seno por encima de su ropa y con la otra agarraba su culo, para que mis estocadas fuesen certeras y profundas.

-Tae…- Gemía mi nombre poniéndome más intenso.
Varias veces intentamos darnos un beso, pero mis estocadas eran tan violentas que el vaivén de nuestros cuerpos lo impedían. Así que ambos optamos por concentrarnos en nuestra parte inferior.

Al irnos acercando al clímax, agarré sus muñecas y las pegué a la pared. Ella se vio obligada a aferrarse más con sus piernas y eso hizo que mi pene profundizara más.

Ella era tan exquisita para mí que hasta el olor de su sudor me volvía loco. No tardamos mucho en llegar al momento más delicioso, acompañado de nuestros gemidos. Mis temblores, combinados con sus espasmos fueron sencillamente perfectos.

Yo terminé arrodillado, y ella sentada sobre mis regazos respirando agitadamente. Ambos, que recostábamos nuestras frentes en el hombro del otro, al cabo de unos segundos nos separamos y al fin pudimos unir nuestros labios de nuevo. Un beso, lento y muy húmedo. Perfecto para culminar un exquisito sexo.

Toc Toc- Se escuchó en la puerta de la sala.

-Nam Joon- Murmuró ella.

-Aquí no ha pasado nada- Le arranqué el resto de su braga y la tiré al basurero, para luego obligarnos a ambos a levantarnos:- Respira profundo- Le aconsejé mientras nos acomodamos la ropa, pues aún seguía agitada.

-Yo…- Dijo dudosa.

-Jennie- La interrumpí:- Ve-

Ella me miró por un par de segundos y luego salió del baño. Yo la seguí, pero en lugar de seguir a la sala, fui a la cocina. Al mismo tiempo que ella abrió la puerta, yo abrí la refri para sacar una agua embotellada.

Buscaba una excusa para mirar a la cara a Nam Joon, no podía decirle que me había follado a su novia, pero podía sonreírle por satisfacción propia como si él se lo mereciese. Cosa que no.

-¿Estás bien?- Le preguntó al pasar.

-Sí. Solo estoy ansiosa- Le mintió. Nam Joon la observó con detalle, luego me observó a mí y posteriormente volvió su mirada hacia ella.

-O.K.- Dijo sin darle mayor importancia.

De alguna forma pensé que me sentiría ganador si le sonreía a pesar que fuese él quien se la llevaba, pero no pude. No pude sonreír. Él estaba pálido, estaba más delgado y lucía muy demacrado. Casi como si estuviese enfermo.

¿Entonces para que había hecho todo lo que hice si al final me iba a acostar con ella?

Le arruiné su vida.

Él no la ama. Pero se está auto convenciendo de que sí lo hace porque yo así lo manipule.

¿Se habrá dado cuenta de que lo hicimos? Su mirada parecía indicar que sí, pero sus acciones no.

¿En qué clase de persona me estaba convirtiendo?
Y a pesar de saber que había hecho mal… ella y yo, volvimos a hacerlo por lo menos 7 veces más durante el mes.

Comencé a sentir odio hacia ella, no lo soltaba, pero tampoco me dejaba ir. Y yo caía cada que me lo pedía.
Aunque si la odiaba a ella, con mucho más razón me odiaba a mí mismo.

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Creen que Jannie bebe es mala o Tae??😢

Dirty LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora