Cap 19

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Me senté de nuevo y respiré profundo. En verdad salió mejor de lo que esperaba.

-Le mentiste- Jennie pronunció palabra sacándome de mi ensimismamiento.

-Tenía que…- Contesté, pero ella me miró molesta.

-Arreglas una mentira con otra mentira… ¿Qué clase de persona eres Tae Hyung?- Sus ojos me miraban con absoluta desconfianza.

-Yo…- Me sentí avergonzado de mi mismo:- No sé…-

-Vaya que sabes manipular a la gente-Me caló con la mirada. Pero tras unos segundos, se levantó, agarró su cartera y se marchó.

“Vaya… esto sí no me lo veía venir”

“Felicidades Tae Hyung… oficialmente te has hecho un hijo de puta”

Me dejé caer sobre el respaldar del asiento. Me quedé observando a la nada por lo menos durante dos horas. Transcurrido ese tiempo, y sin ninguna prisa, cancelé las bebidas y me fui a casa.

Supongo que lo de mudarme seguía en pie y esta vez, no por decisión propia. De todos modos ya me había hecho a la idea de que, de alguna forma tenía que pagar por todo el daño causado.

Al llegar a casa, Jennie ya estaba dormida, o por lo menos eso me pareció. De modo que me encerré en el cuarto. Y como si nada hubiese pasado, puse la alarma del celular para despertar y me dormí. Realmente estaba agotado.

Al día siguiente, como era costumbre, yo entraba más temprano que ella, por lo que no tuvimos ocasión de toparnos. Al salir del trabajo por la tarde fui a visitar a Nam Joon.

No obstante, me detuve en la puerta al ver que estaba con Alegría, ambos sentados en la camilla. Él se veía feliz, ambos se miraban en silencio como si nunca antes se hubiesen visto. Ella, portaba el anillo en su dedo. No pude evitar sonreír por tan conmovedora escena y para no ser un aguafiestas decidí irme.

Aún debía lidiar con el asunto del trabajo de mi amigo. Pero sé que no habría problema con eso. Nam Joon era el mejor abogado de su generación, cualquier otra firma lo querría aún si yo no lo ayudaba.

Mensaje entrante

De: Jennie
Topémonos en el parque de Gwanjan.

Suspiré antes de contestar.

De: Tae Hyung.
Voy para allá

De nuevo no tenía prisa por llegar. Ya sabía lo que me diría. Y por más que quisiera evitarlo, ya no había nada que hacer. Lo único que esperaba, era no ponerme a llorar como el poco hombre que soy. Debía aceptar lo que me dijera con la frente en alto.

El frío del invierno era implacable, y no era para más, estábamos a punto de entrar en diciembre. Aunque la nieve aún no caía. Al llegar al parque, éste estaba lleno de luces mágicas propias de las decoraciones de navidad.

Ella, estaba sentada en una banca. Lucía hermosa con su saco blanco ajustado como un vestido pero acampanado desde la cintura. Llevaba pantis negras y tacones muy altos y sexys.

-Hola- Ella levantó su cara para verme. Sus mejillas estaban rosadas, seguro de esperarme en el frío.

-Hola- Yo me senté a su lado. Su maquillaje estaba impecable y su cabello ondulado en una cola alta la hacía lucir hermosa.

De pronto recordé la escena de mi mejor amigo con su novia. Me di cuenta que miraba a Jennie de la misma forma que Nam Joon a Alegría, pero Jennie no me miraba del mismo modo.

-¿De qué querías hablar?- Rompí el silencio.

-Ayer…- Murmuró:- Ayer- Levantó un poco más la voz, segura de lo que iba a pronunciar:-Vi una faceta de ti que no conocía, y ciertamente fue muy desagradable-

Dirty LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora