¿QUÉ HACER? - PARTE 1

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VIII

- ¡Slytherin gana!

El segundo partido se había llevado acabo al final, y a pesar de las expectativas que le tenían a Gryffindor, al final no habían ganado.

Molestos, pero emocionados todos se dirigieron al castillo a terminar de hacer sus maletas, ya que al día siguiente la gran mayoría se iban a sus casas por las vacaciones de navidad.

Hermione caminaba de un lado a otro preparando su maleta, ya que iba a ver a sus padres. Se encontraba nerviosa y asustada, no sabía como sus padres se lo iban a tomar, pero sabía que no tan mal como cuando ella les dijo que había modificado sus recuerdos, pero aun así, no sabía que hacer.

Su vientre estaba en aumento, en una semana aumento varios kilos, y sumando las dos semanas anteriores más tres días más, en total sentía que había aumentado 30 kilos de golpe, hasta incluso más, pero gracias a la ropa grande se confundía entre si era ropa o panza. Contaba con la ropa, pero no por mucho tiempo.

Se sentó en la cama y miró su mano, pensativa. No sabía que hacer en realidad. Lágrimas cayeron de sus ojos y rodaron sobre sus mejillas. Se abrazó a sí misma, deseando que las cosas fueran distintas o regresar el tiempo atrás... es cierto, el reloj giratiempos.

Con él podría regresar el tiempo atrás y borrar todo lo hecho... pero no. No podía hacerlo, su bebé estaba creciendo dentro de su vientre y ahora no podía permitirse ser egoísta y olvidarse de lo más importante.

Se levantó de la cama y terminó de hacer sus malestar. Y se dirigió al comedor para comer algo, y luego se iría al tren que los esperaba.

* * *

Sus compañeros de casa se encontraban haciendo sus maletas, y corrían de una lado a otro para no olvidarse de nada, mientras que él, sentado en su sillón de cuero favorito los observaba.

- Cariño -. le dijo Pansy con vos melosa y chillona sentándose en su regazo. - Mamá quiere verte, y quiere hacerlo ahora.

Draco se la sacó de encima y se levantó de su posición cómoda.

- Creo que ya habíamos hablado de eso, no puedo hacerlo. Debo quedarme para las rondas y hacer tareas y esas cosas...

- Pero puedes dejarlas aun lado, después de todo eres un Malfoy -. Contraatacó Pansy cruzándose de brazos desafiante.

- Pero no lo haré. Ve sola a tu casa y diviértete.

Ella lo miró y odiándolo más que nada salí de la casa.

- Amigo, creo que deberías terminar con ese compromiso, que sólo te traerá dolores de cabeza -. Le dijo Astoria acercándose a él.

- Es lo más sensato -. Dijo theodore sumándose a ella.

- Vamos a comer algo -. Contestó Draco esquivándolos.

No podía terminar con pansy, ya que ella era su escapatoria. El muro que lo mantenía alejado de aquella castaña de rulos rebeldes, a la que secretamente quería.

- Cómo sea, el otro día vi a Granger y la vi muy mona -. le provocó Blaise caminando adelante de Draco y al lado de Theodore.

- Si, tienes razón. Sonrió y cuando lo hizo, fue como si viera el sol brillar... creo que hizo latir a mi corazón.

Draco se estaba consumiendo de celos, porque él se lo había perdido. Los apartó de su camino de un empujó y entró dentro del comedor. Y su corazón se aceleró al verla sentada al lado de la comadreja. Por un momento se quedó perdido viéndola, si no fuera por Theodore, quien lo empujó se hubiera quedado como un bobo parado ahí no más.

Apartando la mirada avanzó hacia su mesa y se sentó de espaldas a ella, para evitar que sus ojos se posaran en ella involuntariamente.

Se sirvió su desayuno habitual y prestó atención a todas las conversaciones para mantener alejado sus pensamientos de ella. Pero algo captó su atención.

- Entonces entré y la volví a ver vomitando -. Dijo una sus compañeras. - Esa Granger de seguro tiene una enfermedad o está embarazada. Siempre que voy al baño la encuentro vomitando, es un asco.

¿Enferma? Se empezó a preocupar por ella. De seguro que comió algo que le hizo mal. Se volteó a verla y si, parecía que era eso, porque su plato se veía repleto de comida sin tocar. Se iba a levantar a recriminarle por no comer nada, pero justo ella se levantó de su lugar y se iba del comedor. Y viento esto, se dio cuenta de que se estaba por comportar como un idiota.

Volvió a acomodarse en su asiento y a alejar las garras de Pansy lejos de él, parecía que sus enojos no duraban mucho, y eso era una lástima.

* * *

Subió al tren después de sus amigos, una ves que pudo controlar a su vientre.

Sonrió y habló con normalidad, hasta que llegó a la estación y se despidió de sus amigos.

Caminó hasta afuera y llamó a su taxi que la llevó hasta su casa. Sus padres no la estaban esperando, porque ella no les había dicho nada que iba, así que cuando su madre abrió la sonrisa que llevaba en sus labios se congeló para luego convertirse en una mueca.

- Oh... Hermione... no te esperábamos -. Dijo con nerviosismo, haciéndose aun lado para que su hija pasara.

- Bueno, lo sé. Lo que sucede es que tengo que decirles algo -. Dijo Hermione, dejando su cartera aun lado mientras se dirigían al living.

- Hermione -. La saludó su padre, contante.

Esperó hasta que ellos se sentaran en frente de ella y poniendo su cara dura y sin ninguna expresión, porque realmente no sabía si sonreír o parecer triste o algo por el estilo, y les miró directamente a los ojos.

- Estoy embarazada -. Dijo de golpe.

Listo ya está, lo había dicho. Y sí, al final no siguió sus planes como lo había planeado, prefirió sacarse todo de encima de una vez y listo.

- Disculpa, ¿qué has dicho? -. Preguntó su madre.

- Estoy embarazada, Madre -. Volvió a repetir, pero esta vez con más tranquilidad.

- Embarazada, ¿cómo es eso? -. Preguntó con brusquedad su padre.

- ¿Quiere que le explique como sucedió? -. Respondió Hermione de la misma forma en que le habló su padre.

- No hace falta Hermione Jean Granger -. Dijo su padre mostrando su enojo. - Primero el cambio de memoria, la Guerra en la que por poco mueres, y ahora el embarazo... ¿qué significa todo esto? Nosotros no te hemos criado de esta forma. Tu no eras así, nos mentiste y engañaste, y ahora el embarazo. ¿Acaso la vida para vos es un juego? Si piensas de esa forma lo siento, pero estás muy equivocada...

- ¡¡¡Ya basta!!! -. Gritó Hermione levantándose del sillón. - Borrarles la memoria, alejarlos de aquí fue por su propia protección, no quería que les pasara nada. Sé que obré mal y sin su consentimiento, pero, ¿qué otra cosa podía hacer? No quería perderos, no quería que sufrieran... sólo quería que estuvieran bien, que se sintieran a salvo, ¿por qué no lo entienden? ¿Por qué siempre se comportan de esta manera?

- Porque no entendemos, podías haber confiando en nosotros... -. Volvió a protestar su padre.

- No se trataba de confianza, se trataba de seguir con vida, ustedes no conocen mi mundo, no conoc...

- Exacto, no conocemos tu mundo, el mundo que aceptamos con orgullo como parte de ti, niña, pero que a través de los años nos dimos cuenta de que realmente no aceptamos, no queremos aceptarlo más -. Habló su madre, haciendo una mueca de desagrado y repugnancia.

- ¿Entonces? ¿Qué se supone que haga? ¿Qué lo deje todo? -. Preguntó, temiendo lo peor.

- Sí, queremos que te alejes de ese mundo, de otra forma, no te queremos aquí, ni a ti, ni al feto que llevas dentro -.

Sentenció su padre señalando su vientre.

* * * 

Es Más Que Eso... [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora