Pezuña de caballo...

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Murió un Señor, al que nunca se le conoció pariente alguno...
Estaban algunas de sus pocas amistades en el velatorio..
y cuentan que al poco rato llegó un misterioso hombre al que nunca habían visto. 
Muy triste, se paró junto al ataud y ahí estuvo un buen rato llorando y platicando muy suavemente con el difunto...
hasta que después se fue a sentar a un rincón y no paraba de llorar. 
A la mañana siguiente fueron a enterrar al difunto...
Y el hombre se volvió a presentar...
y uno de los conocidos algo intrigado se acercó a este hombre misterioso y le preguntó: 
- ¿Usted era pariente del difunto? es que se ve que lo quiso mucho.

A lo que el hombre respondió: 
- No, él sólo era mi amigo.. sí, era mi amigo, pero él no me conocía.

Después de escuchar esto el otro hombre se extrañó mucho y le preguntó que cómo era eso de que era su amigo pero que nunca lo conoció?
el hombre misterioso respondió con estas palabras: 
- Sí, él era mi amigo, lo que pasa es que él siempre prendía una veladora al alma más solitaria del mundo, y esa alma.. 
soy yo.

La persona se retiro muy confundida y algo temerosa...
Pero cuentan que después vieron al hombre que nadie conocía que se estaba quitando un zapato y que claramente vieron que tenía una pezuña de caballo.

Y se supone que el único que tiene la pezuña de caballo y que es el alma más perdida y solitaria del mundo es... 
el Diablo.

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