Capitulo 11: ¿Salimos?

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¿Estoy enferma? ¿Me voy a morir? ¿A qué se debe este dolor que siento en el pecho? Si sigo así voy tener que pedir un consejo a alguien y eso significa tener que contárselo a esa persona.

¿Qué me pasara? ¿Porque tengo esta clase de sueños? En mi cabeza sigue rondando la misma pregunta...  ¿Qué le quería decir?

Mejor salgo a despejarme un poco, a ver si así logro olvidarme de ese sueño, o almenos poder lograr tener mis pensamientos en orden. Justo cuando estoy por salir suena mi celular.

— Hola — contesto la llamada

— Hola Vero, quería saber si querías salir conmigo

— ¿Quién eres?

— ¿Acaso no te acuerdas del chico que besaste en la fiesta?

Así que es Alex es la persona que me ha llamado, pero eso no explica por qué quiere salir conmigo. Solo me queda aceptar para averiguar sus intenciones.

— Entonces ¿salimos?

— Claro

— Te paso a recoger dentro de una hora

— Te estaré esperando, hasta luego

— Hasta luego — colgué

Tengo una hora para cambiarme, nunca me ha interesado de verdad mi aspecto, pero, porque siento que para esta ocasión me debe importar.

Me dirigí a mi cuarto y una vez allí me cambie a un lindo vestido flor que me llegaba hasta las rodillas, mi cabello decidí dejarlo suelto y solo hacer una trenza que simulaba una corona. Baje y me senté en la sala a esperar.

Cuando mire la hora vi que Alex debió de llegar hace diez minutos.

Las horas siguen pasando y él sigue sin aparecerce, o siquiera enviar un mensaje para cancelar la cita, aunque ni yo misma me lo crea me siento algo ¿desilusionada?

Espera,  paren todo, acabo de decir que nuestra salida era una cita, aparte dije que me sentía desilusionada. Supongo que me siento desilusionada porque era mi primera cita con el chico que di mi primer beso.

Volví a decir cita, ahora que lo pienso mejor está bien dicho ya que cita significa encuentro planificado entre dos o más personas, entonces, ¿Por qué me hago tanto lio?

— ¿Qué haces sentada ahí tan arreglada?

Cuando levante la cabeza me encontré con mi hermano.

— Nada importante — me pare y me dirigí a mi cuarto

Mi hermano me jala del brazo logrando asi que me detenga.

— ¿Ibas a salir con Dake? Porque si es así no te doy permiso

¿Desde cuándo necesito pedirle permiso a él para salir con alguien?

— No iba a salir con él, y si así fuera no necesito de tu permiso o aprobación.

— ¿Entonces con quién ibas a salir, señorita?

— Con alguien que no conoces. Ahora suéltame

Supongo que mi hermono me debió de ver molesta para haberme soltado sin más. Cuando llegue a mi cuarto y me tire en la cama sentí húmedos mis ojos, estaba llorando.                             ¿Por qué lloro? ¿Acaso tan mal me siento porque no haya venido?

De tanto llorar me quede dormida. Después de dormir un rato me levante por el estrepitoso sonido de mi celular.

Maldito celular hasta ahora solo me ha traído problemas, primero esa chica que me llama para decirme que me aleje de Dake y por otro esta lo de Alex que me llama para salir y luego ni se presenta. Ahora que desgracia querrá darme este bendito celular.

Estoy dudando en ver el mensaje que me ha llegado ya que no quiero arruinarme el día por segunda vez pero puede que esto sea importante.

*conversación con el número desconocido*

— Hola Vero, soy Dake

— ¿Quién te dio mi número?

— ¿Ni siquiera saludas?

— Hola, ahora dime ¿Quién carajos te dio mi maldito número?

— ¿Por qué estas molesta?

— Por algo que no te incumbe

— Si tiene que ver contigo claro que me incumbe

— No estoy de humor Dake

*fin de la conversación*

Después de decirle eso ya no me escribió pero si me llamo, me estaba hartando yo solo quería dormir y descansar, y él no me la estaba dejando fácil.

Supongo que si contesto y hablo con el me dejara de fregar la vida.

*llamada con Dake*

— ¿Vero quieres salir a pasear?

— No

— ¿Por qué no?

— Eso no te incumbe

— Ya te dije, todo lo relacionado a ti es de mi incumbencia

— No, no lo es

— ¿Ya me vas a contar?

— Ah... Esta bien


Hubo un silencio hasta que volví a hablar.


— Pues iba a salir con alguien pero esa persona decidió no presentarse

— ¿Quien se atrevió a hacerte algo así? 

— Eso no te lo puedo decir

— Pero...

— Dake

— Esta bien. ¿Puedo pedirte algo?

— ¿Que cosa?

— Baja que estoy en tu puerta

*fin de llamada con Dake*

No sabía cómo, ni desde cuándo, pero tenía una sonrisa en mi cara. Está vez mi celular no me había mandado algo para arruinarme el día solo para hacerlo acabar bien. Para que este después de una desilucion terminara con su final feliz.

Me lave la cara para no ir con los ojos completamente rojos por estar llorando, también me cambie la ropa para no pasar frio ya que era de noche.

 Me cambie el vestido por unos legins y un polo manga larga con degradado, en vez de las sandalias de la mañana me puse unas zapatillas negras, y el cabello lo deje tan cual. Cuando llegue abajo, me encontré con mi hermano y este al verme me hablo.

— Aunque ese chico tenga mi aprobación, recuerda que para él yo soy tú novio

Rayos lo había olvidado.

— ¿Cuándo le vas a decir la verdad?

— No creo que sea tan tonto como para no darse cuenta el mismo — mi hermano se fue

Cuando abrí la puerta fue grande mi sorpresa al encontrarme...



Otro capítulo, esta vez no me demore tanto como la anterior ¡Yupi!

¿Existe el amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora