Sans x Frisk [+18] Mi Semana Con Sans

Diversión

Narra Frisk

Maldito Papyrus, me cae bien pero cuando me divierto con Sans no me gusta que me interrumpan. Fuimos corriendo a la mesa, obviamente me senté al lado de Sans y comenzamos a cenar. Papyrus nos miraba con cara de esperar nuestra aprobación de sus espaguetis. La verdad estaban buenos, desde que iba a las clases de Undyne ha mejorado mucho.

–Papyrus: ...

–Sans: Bro, así das miedo.

–Papyrus: Quiero saber que os parece.

–Frisk: Está muy bueno, en mi opinión.

–Sans: Opino lo mismo.

Papyrus empezó a correr por el salón en círculos de la alegría, Sans y yo nos reímos con fuerza. Me encantaba verlo así pero había interrumpido mi momento. Sans se me quedó mirando con cierta lujuria y bajé mi mano a sus pantalones, aprovechando que Papyrus había ido arriba a seguir corriendo. Me acerqué a su supuesta oreja y le susurré.

–Frisk: Está noche eres mío Sansy.

–Sans: ¿Estás segura? Puede que alguien te haga suyo antes.

–Frisk: Eso habrá que verlo.

Juntamos nuestras frentes y nos miramos fijamente mientras nos íbamos tocando, hasta que apareció Papyrus otra vez y nos tuvimos que separar. Dios si no fuera mi amigo os juro que lo mandaría a la mierda. Terminamos de cenar y me puse a fregar mientras Sans le leía un cuento a Papyrus. De repente noto algo detrás de mí.

–Sans: Papyrus ya se ha dormido.

–Frisk: Eso es bueno.

Empezó a morderme el cuello para dejar una marca suya, pero respondí con un lametón en su cuello y él mientras me besaba usaba uno de sus "atajos"  para llevarme a la cama y ponerse encima.

–Sans: ¿Ves? Te dije que te haría mía antes que tú.

Me dí la vuelta y me puse encima, le sujeté bien los brazos.

–Frisk: Vaya, vaya mira quién está debajo.

–Sans: Esta vez te dejaré quedarte arriba pero la próxima vez me toca a mí.

Comencé a subirme la camiseta cuando él me paró y lo hizo él. Supongo que estará super cachondo, eso me gusta. Yo le quité la chaqueta y la camiseta dejándolo con los pantalones, las costillas y su alma.  Cogí su alma con cuidado y la lamí con toda la lengua, no para de gemir mi nombre ~Frisk ~ que mono es cuando se lo propone.

Después de un rato nos quedamos sin ropa y él quería estar dentro de mí tanto como yo sentirle dentro. Él la introdujo con cierta brusquedad, me dolía bastante pero solo solté un grito pronunciando su nombre.

–Frisk: S-sans ~ dios.

–Sans: ¿Te he hecho daño?

–Frisk: Tú no pares.

Empezó con embestidas flojas pero a medida que iba gimiendo más alto él se excitaba y embestida más deprisa. Hasta que me lleno con su amor, ambos nos vinimos a la vez. Fue el momento más maravilloso de mi vida.
Me acosté abrazándolo, poniendo la cabeza en su pecho y él me tapaba con las sábanas que mañana tendría que lavar. Que ganas de repetir.