Last Heartbeat

22.

Jeon Jungkook.

Observé el reloj en mi muñeca notando que aún era muy temprano, todavía me quedaría más tiempo de apreciar a Tae dormido. Esto se había vuelto un pasatiempo para mi, todas las veces que yo era el primero en abrir los ojos.

Hoy asistiría solo a clases porqué mi novio se antojó de enfermarse un lunes. Suspiré un poco cansado y me acerqué a él para cubrirlo mejor con las sabanas, deposité un beso en su cabeza y decidí irme temprano, tendría muchas cosas de las cuales pensar en el camino.

Acomodé mi mochila y comencé con mi pequeño viaje, simplemente mirando al cielo mientras pateaba una que otra hoja.

-¡Jeon!-Escuché detrás de mi y unas manos me dieron vuelta encontrándome con los ojos de mi fastidio diario en el culo gracias a que Taehyung nunca se iba conmigo a clases.

-Jin.-Dije sin ánimos.

-Qué manera de recibirme.-Hizo un pequeño puchero.-¿Donde esta tu noviecito?-Dijo mirando hacía todas partes y fruncí el ceño.- Odiaba cuando él hacía eso.

-Él esta enfermo hoy.

-¿Enfermo? -Sonrió.-Eso significa que hoy te tengo para mi solo.-Pasó su brazo por encima de mi hombro y lo aparté de inmediato.

-Ni lo pienses.-Él bufó y comencé a caminar de nuevo. Sabía que él empezaría a seguirme, sabía que no tardaría, ya incluso escuchaba sus pasos a la par.

-¿Cuándo aceptarás salir conmigo? Realmente he cambiado.-Dijo colocándose a mi lado.

-Las personas no cambian y menos de un tiempo tan corto a otro.-Cité mientras volvía mi mirada al cielo.

-Eso es muy hipócrita de tu parte.

-¿Porqué lo sería? Eso es cierto.

-Si las personas no cambian en poco tiempo, no deberías tener fe en que Taehyung lo hará cuando ya han transcurrido meses.-Me detuve en seco midiendo mis palabras y las de él. Eso había sido un golpe bajo.- ¿Ves? Tengo razón. -Dijo deteniéndose a mi lado y negué con mi cabeza. Quizás tendría razón, pero estaba seguro de que Tae daría lo mejor de si, además son situaciones distintas ¿No?

-Deja de meter a Taehyung en todo lo que hablamos.-Dije seco y caminé rápidamente dejándolo atrás.

Las clases no fueron más que un blanco espacio en el que solo pensaba en mi chico, este hombre me desconcentraba incluso cuándo él no estaba, pero hubo una buena noticia en la escuela. Tendríamos una semana sin tener que asistir a clases. ¿Porqué? supuestas remodelaciones que quieren hacer, no sabíamos porqué se tomarían tanto tiempo y porqué las harían en el transcurso del tiempo escolar.

¿La verdad? Daba igual, todos queríamos nuestras pequeñas vacaciones.

Lo primero que había hecho era llamar directamente a mi madre para contarle la sorpresa, casi nunca la veía desde que me había ido a vivir con mi novio, era bastante irónico porque no vive tan lejos de nosotros, pero estábamos muy ocupados. Ya podrían imaginarse en que.

Obtuve una segunda noticia de parte de ella, mi querido amigo Hoseok vendría junto a su madre a visitarnos. Ya lo había extrañado desde aquél viaje, estaba más que decidido que me quedaría esta semana allí y esperaba que junto a Tae también.

-¡Tete!-Grité mientras caminaba por los pasillos y vi su hermosa figura salir de la cocina.

-Hasta que al fin vuelves.-Sonrió.- ¿Porqué tan feliz?

-No tendremos clases por una semana. -Reí e hice un pequeño baile, contagiandolo a él de una carcajada.

-Oh, me lo han dicho.-Dijo risueño mientras pasaba su brazo por mi hombro.

-¿Quién?-Mi sonrisa se borró instantáneamente.

-Mis amigos me han llamado para avisarme.- Claro, esos idiotas. Pensé.

-Seguro te han invitado a alguna fiesta o algo toda esta semana. -Suspiré algo decepcionado.

-Sí, pero les he dicho que estaría ocupado.

-¿Sí? ¿Con qué? -Le miré con curiosidad.

-Contigo, idiota. -Besó mi frente y sentí como la paz llenaba mi corazón.

-Mi madre nos ha invitado a pasarnos esta semana allá.-Me soltó de inmediato y pude notar la mueca en su rostro.

-Quiero un fin de semana tranquilos, solos tu y yo. Además ¿Como lo haremos en casa de tu madre?-Me sonrojé al escucharlo.

-Como si nunca lo hubiéramos hecho allí.-Murmuré apenas sintiéndome como un tomate y pude ver de reojo su gran sonrisa.

-Realmente no quiero ir, ve tu solo si quieres.-¿Realmente me había dicho eso? que imbécil.

-¿Entonces que harás tu?-Le lancé aquella pregunta y fijé mi mirada en la suya.

-Pasaré la semana con mis amigos. -Dijo como si nada y me di vuelta decidido a subir a la habitación pero me detuve a medio escalón.

-Lástima, tendré que quedarme solo con Hoseok.

-¿Hoseok?-Sentí su mano tomar mi brazo y me giró hacía él.

-Ellos irán a dormir esta semana allá y ya sabes, son como una familia para nosotros. Debo quedarme allí, como tu no vas, puedo compartir habitación con él.-Alcancé a notar lo enrojecidas que estaban sus orejas y levanté una ceja.

-Iré contigo, tu no te quedarás solo con ese mocoso.-Sonreí triunfante y pensé que al fin y al cabo esta semana no sería tan aburrida como pensé.