Capítulo 17

49 5 2
                                    

- Me sorprendió que me llamaras tan de repente

- Lo siento

- No te disculpes. Es solo que, después de lo que hablamos, me sorprendió un poco

Fue una grata sorpresa para Isabel recibir su llamada, ya que el resto del día no había podido concentrarse debido a la pequeña charla que tuvieron acerca de Valerie. Temía que pudiera estar molesto con ella.

- Olvidemos ese tema, ¿quieres? – no se veía muy bien.

- ¿Te sucede algo? No luces muy animado

- Isabel, mi ánimo se fue al caño cuando llegué a casa – bebió un vaso de sake.

- Yo-ka, dime...¿Qué ocurre? – se preocupó.

- ¿Recuerdas a Yuno?

- Sí, la mujer que está obsesionada contigo

- Esa mujer está loca, no ha parado de perseguirme. Creí que me había librado de ella pero hoy volví a verla. Estaba en mi casa, junto a mi padre. Isabel, ella lo sedujo para estar cerca de mi – volvió a servirse.

- Qué horror. Pensar en que una mujer sea capaz de hacer eso me provoca nauseas

- Quería celebrar su compromiso conmigo

- ¿Esta noche? – terminó su bebida de un solo trago.

- Sí. Pero, ¿cómo voy a aceptarla como mi madrastra? Esa mujer es un dolor de cabeza

- Ya lo creo

- Me siento realmente molesto. Es tan frustrante, sé que no conseguiré hacer que mi padre cancele su compromiso. En cuanto la lleve a vivir a la mansión yo saldré de ahí

- Creo que es lo mejor que puedes hacer

- Me hubiera gustado que mi madre se quedara con nosotros

- ¿Qué pasó con ella?

- Falleció luego de darme a luz

- Lo lamento - se sintió acongojada.

- Sucedió hace mucho, no importa. Pero, he imaginado de tantas maneras cómo hubiera sido nuestra vida si estuviese con nosotros. Cuando era un niño la echaba de menos, porque todos mis compañeros iban acompañados de sus madres al colegio. Yo también quería ganarme un beso de mamá cuando la profesora hablara sobre mi notable esfuerzo por sacar buenas notas, que me horneara galletas, que me compensara con algún premio, o que besara mis heridas y me hiciera sentir mejor con una sonrisa. Aun así, mi padre siempre estuvo conmigo, intentando llenar ese espacio. Siempre se aseguró de proveerme de lo que necesitara, incluso dedicaba tiempo para jugar conmigo o ayudarme con las tareas cuando llegaba temprano de la empresa. Papá y yo éramos cómplices en todo, cuando conocí a Kei, él se unió a nosotros, y era como si hubiera ganado un hermano, como si mi familia hubiera crecido un poco, como si la vida me compensara por algo

Se sintió conmovida por su relato. Yo-ka estaba siendo franco con respecto a cómo se sentía en ese instante debido a lo que pasaba con Yuno y su padre. Lo imaginó de pequeño, un niño solitario y vulnerable, deseando poder compartir sus aventuras con su madre. Un instinto se apoderó de ella; quiso abrazarle, protegerle, llenarlo de besos y hacerle saber que no está solo...deseó consolarlo.

- Con esa loca en casa, siento que todo pierde el sentido. Papá conservó cosas de mamá que no toleraría que ella tocara. Una extraña ocupará un lugar que no le corresponde solo por capricho, es algo tan frustrante

Isabel...My only vanillaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora