Entre Fantasia y Realidad

Vestuario

Wow -suspiro Heather que estaba arrecostada en el marco de la puerta con su bata puesta- y donde está el collar?

-Ni idea lo tienen en una caja fuerte o algo así pero mi mama dice que sólo es una leyenda y que no existe tal collar, pero es un poco obvio que si.

- Cuantos años dijiste que tenías? -me pregunto Susan.

- Catorce -le respondí- cambiando de tema, quién sigue bañándose.

- Esa sería yo -dijo Kate levantándose de su asiento, mientras yo cojo un paño y otra bata.

Ella entra al baño y yo me vuelvo hacia el Armario buscando un vestido que le quede a Heather. Al final elijo uno rojo con bordado dorado alrededor y se lo entrego diciendo:

-Prueba te este.

-Gracias

-Oye -me dice Jean- No crees que podrías ser tu la persona de la leyenda?

-No, no lo soy

-Como puedes estar tan segura?

-Porque yo no soy descendiente de Arzenia.-digo sinceramente. Heather, Jean y Susan me miran confundidas.

-Y como eres princesa?

-Mi padrastro Robert es descendiente de Arzenia, mi verdadero padre murió o escapo o algo así no hablo mucho de el. Mi madre se casó con el y tuvo a mis dos hermanos ellos dos pueden ser los de la profecía pero yo no lo soy.

-Vaya... es una pena

-No para nada.-le digo a Heather.

De repente Kate sale del baño y dice:

-Jean sigues tu.

Yo me levanto y le entrego un vestido morado con las mangas plateadas ella lo recibe y se va a ponérselo.

-Porque dices eso?- me pregunta Susan

-Bueno, si en serio fuera descendiente de Arzenia no estuviera aquí, estaría forzada en una de esas clases de como ser Reina y tendría que aprender miles de cosas, no me dejarían hacer nada y tendría que preocupare de la profecía, pero no lo soy así que soy libre y eso me encanta. En cambio mi hermano es el verdadero heredero así que cuando cumpla airé años lo forzarán a recibir clases y tareas aburridas.

-Bueno tienes razón.

Esta vez fue Jean la que salió del baño y yo le di un paño y una bata a Susan para que se metiera. Mientras Heather le contaba a Kate lo que había contado en su ausencia y viceversa yo le pasaba un hermoso vestido azul con estampado de palomas blancas.

-Oye Sam tu vestido me queda perfecto -me dijo Heather.

-Y a mi -le siguió Kate

-Y al parecer a mi también -decía Jean mientras terminaba de introducirse dentro del vestido.

Inesperadamente Susan sale del baño.

-Wow, eso fue sorprendente mente rápido- le digo mientras le doy un vestido café con bordes dorados.

-Lo se -responde ella- tengo mis cualidades. Crees que me valla a quedar? -pregunta refiriéndose al vestido.

-Sólo pruebatelo.

Ella se desliza cómoda mente dentro del vestido y me dice:

-Vaya, me sorprendes.

-Lose, tengo mis cualidades.-le respondo con un poco de humor- vamos ustedes me prometieron a mi y a Robert una historia.

Bajamos al pasillo y envés de doblar hacia la sala sigo directo a la biblioteca.

Ahí nos encontramos con Robert y Alex, Alex lleva puesto una camisa informal y unos pantalones de soldado.

-Veo que le encontraste algo a Alex -le digo entrando a la habitación.

-hice lo que pude.-me respondió con descaro y volvió a ver a las demás- siéntense, creo que tienen un historia que contar.

La biblioteca es un lugar rodeado de estanterías con libros y lo único que hay para sentarse son dos largos sillones rojos con una mesa de te entre ellos.

Nos sentamos sin discutir y Susan dice:

-Quien cuenta la historia?

-Yo lo haré -dice Kate.

-Todo empezó cuando Estábamos en nuestra aldea natal la aldea Ivy (ai-bi) es una pequeña aldea del otro lado del reino oscuro, fuimos a buscar leña, Bunny se había torcido un tobillo así que fuimos a paso de tortuga, cuando llegamos estaba todo destrozado, habían restos de casas quemadas y no había ni un rastro de vida estábamos solos, fuimos caminando por toda la aldea cuando escuchamos a dos hombres hablar, decían algo sobre que algunos aldeanos habían escapado y que los demás fueron encerrados. Cada uno estaba aterrado y cuando estábamos a punto de irnos un tercer guarda trajo un chico, no tendría más de seis años pero se nota que había luchado contra el guarda.

El guarda le gritaba a sus amigos

"Oigan, miren lo que me encontré, lo encontré huyendo con una niña ella escapo, pero estoy seguro de que el sabe donde esta mami y papi cierto?"

El Niño luchaba pero era muy pequeño para hacer daño y pataleaba mientras gritaba "no les voy a decir nada" y el guarda se enfureció y grito "lo quieres hacer por las buenas o por las malas" y algo se encendió en Jean no podio soportarlo más, ella corrió hacia el guarda y le pego en la cara y mientras los otros dos guardias corrían hacia ella le gritaba al niño "corre Anthony!" los dos guardas la agarraron y corrimos tras ella pero de repente aparecieron como diez guardas más, nos superaban el número así que no tuvimos más remedio que ir con ellos.

Al llegar ahí no vimos mucha gente conocida, por suerte no vimos a nuestras familias, pasábamos ahí cada noche en un calabozo grupal, todos los días al medio día nos sacaban a comer y si alguien hacia un movimiento repentino nos pegaban con varas con picos.

Un día escuchamos lo que querían hacer con nosotros "Estos jóvenes son muy útiles, la reina ordeno que el próximo sábado los entregáramos para que hagan trabajos forzados, sus familias han escapado y ellos tendrán que pagar por ello" fueron muy estúpidos al decirlo en frente nuestro, porque gracias a eso ya sabíamos que hacer.

El sábado a media tarda en vez de r al comedor con todos los demás nos dirigieron a la sala del trono pero antes de que pudieran encadenarnos salimos corriendo hacia la entrada, todo iba de maravilla eran demasiado estúpidos, demasiado... al llegar a la puerta algo nos detuvo había como una tropa de veinte hombres ahí, así que dimos media vuelta y empezamos a rodear el palacio . con guardas siguiendo nos por detrás decidimos separarnos todos hacía diferentes direcciones. Susan llego a una sala de armas así que ella agarró cuatro cuchillos un arco y flechas y empezó a disparar matando a los tres guardias que la perseguían.

Yo llegue a la cocina y cogí todo lo que pude: cuchillos, tenedores y un par de cucharas y lanzar cuchillos a mis oponentes dejándolos muertos.

Jean y Alex terminaron en un largo pasillo con armaduras de metal así que agarraron sus armas y las clavaron en las piernas de sus oponentes dejándolos des capacitados.

Bunny no tuvo tanta suerte ella acabo en el mismo lugar donde empezamos la salida.

No tenía nada con que protegerse y cuando estuvieron apunto de atraparla Susan le disparó una flecha a uno de los guardas. Los cinco nos encontramos en la salida y corrimos hacia la salida cuando ser repente uno de los guardas al parecer me experimentado bloqueaba la entrada. Susan le tiró flechas hasta que se acabaron todas dieron contra ud armadura de metal, yo le lance cuchillos pero no acerté y Alex y Jean dejaron sus armas clavadas en las piernas de los soldados de más atrás. No había salida así que todos fuimos reduciendo pasó excepto Bunny, ella siguió corriendo hacia al guarda y se le tiró encima. Nosotros salimos corriendo tras ella pero el guarda la tenía, todos habíamos cruzado las puertas excepto ella, cuando nos devolvimos por ellas alguien cerró las puertas, gritábamos su nombre y las pateábamos para entrar pero no cedía, no teníamos opción teníamos que salir de ahí en ese preciso segundo si no, nos atraparían así que corrimos hasta llegar a las fronteras y ahí fue cuando te encontramos.

-Jean quien era el chico por el que te sacrificaste-le pregunte yo y ella me miro tristemente y me dijo:

-Era mi hermano.