Simplemente se había ido.

184 12 0
                                    


-¿qué haces tú aquí?-

- yo soy la qué haces las preguntas aquí, es el día de mi boda y tú lo invades.
¿ sabes Rose?, ya me tienes harta, me voy a deshacer de ti.-

- ¿sabes Lily?, no me das miedo. Simplemente eres un niñata demasiado asustada de no encontrar alguien que la quiera que no sea parte de su familia.
Y no debo de gastar más tiempo hablando contigo, vine a buscar a Scorpius.-

- querida Rose Weasley, creo que va a ser un poco complicado que lo veas, pero tú y yo vamos a charlar-

La ojiazul fue impactada contra la pared, cayéndo inconsciente.

--0--0--0--0--0--0--0--0--0--0--0--0
-¡Rose! ¡Demonios! ¿Dónde estás Weasley?
El rubio saco su celular para dar con la persona que debería de saber dónde estaba Rose.
¿Albus? ¿Sabes dónde está Rose?-

- espera, te pasó con él-

-¿qué quieres Scorpius? Estoy ocupado-

- ¿dónde está Rose?-

- debe de estar contigo, pero si me estás marcando, no es así.
No lo sé Scorp, pero puedo rastrearla, espera un momento, en dos minutos te marco y te doy su ubicación -

- Albus, no tengo dos minutos, hazlo en treinta segundos-

- espera- se escuchaba entrecortada la voz de Potter, como si hubiera colocado su mano para tapar el teléfono- cariño, única el celular de Rose por favor, lo más rápido que puedas.
Scorp, lo tengo, ella está en... tu casa...-

- ¿en mi departamento?-

- no idiota, en la mansión Malfoy- solo hubo silencio después de la recepción de información- ¿Scorpius?-
Es mejor si voy para allá, ¿nos vemos después? -

- te acompaño-

-no, prefiero hacerlo solo. Te amo.

Así salió el menor Potter de su casa, tenía el presentimiento de que algo realmente malo iba a suceder.
Y si que tenía razón.

--0--0--0--0--0--0--0--0--0--0--0
El rubio entró a la mansión corriendo y gritando el nombre de su amada, pero no había respuesta alguna.

-¡ROSE! ¡MADRE!-

- Scorpius...-

- madre, ¿qué ha pasado?- Scorpius corrió hacia su madre, quien se encontraba en el suelo sumamente debilitada y mal-

- ve por ella, han ido al sótano, corre, yo estaré bien-

Sin esperar un segundo más Malfoy fue velozmente hacia dónde le indicó Astoria.
Bajó cautelosamente las escaleras para encontrar a dos mujeres pelirrojas, una realmente herida y la otra con su varita en mano, lista para atacar de nuevo.

- Lily...-

- Scorp... estás aquí, listo para casarte conmigo...-

- así es Lily, ven, vamos al jardín a casarnos-

- ¡no! ¡No!- la pelirroja al ver que Scorpius se acercaba a ella comenzó a gritar - ¡no te acerques! O ella se muere- Lily apuntó con su varita a su prima-

-de acuerdo, tranquila Lily, no me acerco, me quedo aquí, pero guarda la varita, no la necesitas ahorita-

Mientras Scorpius intentaba negociar, Albus llegaba a la mansión para ver a la señora Malfoy gravemente herida.

- señora, permítame, déjeme le ayudó- Albus había comenzado a sanarla con magia, mientras llamaba por ayuda-

- no Potter, ve con mi hijo, él te necesita, está con tu hermana y tu prima, corre-

--0--0--0--0--0--0--0--0--0--0--0--0-

-¿tú crees que soy tonta? -
No Scorpius, tú te vas a casar conmigo pero no me vas a amar hasta que Rose desaparezca, así que lo más fácil es quitarla del camino-

-¡no! Lily, no lo hagas, por favor, te lo suplico, déjala vivir. Nos iremos lejos y no estará en nuestras vidas-

Ambos se encontraban enfrascados en observar la varita en manos de Lily que no prestaron atención al chico que se acercaba al sótano y a Rose, que había recuperado la consciencia.

-ahora lo entiendo Malfoy, no importa si la mato, simplemente, tú no la vas a olvidar. Es más simple si te mato a ti...

- ¡AVADA KEDAVRA!-

-¡NO!-











Esa noches un rayo de luz verde salió de la varita de Lily Potter Weasley, impactando en un cuerpo y provocando que un par de ojos se cerrarán para siempre.
La menor Potter fue arrestada y llevada a San Mungo, ya que presentaba distintos problemas mentales que impedían que fuera transferida a Azkaban. Para algunos, una gran injusticia, para otros una solución práctica.
Lo que no quedó plasmado en el informe del Ministerio de Magia, es que esa muerte, en el sótano de la mansión Malfoy provocó más que varios corazones rotos.
Uno, un corazón en especial vió irse al amor de su vida, sabiendo que no volvería, no en esta ocasión.
Ya no habría un vaivén en su historia.
Simplemente se había ido.

VaivénDonde viven las historias. Descúbrelo ahora