Remember me » harry styles [au]

»Dos

Clarisse.

He pasado un rato ya pensando en lo que Cath me dijo hace rato; desde que llegue no he bajado del auto, no puedo. El miedo entra en mi de sólo pensar que dentro de casa estarán mis padres, las dos personas que siempre me han dado todo, y que estoy apuntó de decepcionar, después de todo.

Cuando al fin consigo el valor para bajar y decirles todo, salgo del auto y camino lentamente a la puerta de entrada. No sé cómo hacer esto. Estoy nerviosa; los nervios me comen en este momento. El camino parece más corto de lo que realmente es.

Abro la puerta y agradezco que no haya nadie en la sala, subo y entro a mi cuarto rápido para que no se den cuenta de que ya he llegado, y aunque me propuse decírselos hoy, mientras más tarde se los diga es mejor para mí. Pero para mí mala suerte no logro permanecer escondida por mucho, una hora después entra mí papá avisándome que es hora de comer.

- Vamos a comer Clari.

- No tengo hambre hoy, papá.

- Tienes que comer hija -sin más opción bajo junto a él.

Trato de comer lo más rápido posible, y evitando cualquier tema que pueda tener alguna relación con eso.

- ¿Te pasa algo Clari? -pregunta mí mamá.

- No, nada.

- No te ves bien cariño, ¿quieres hablar?

- No, sólo estoy cansada, es todo.

Ya no puedo seguir aquí, viéndolos, sabiendo que los estoy engañando. No puedo seguir aquí mintiendo.

Harry.

Han pasado dos días desde que escribí la última carta, no me quedan más ganas de escribir. Siempre trato de escribir algo de mi vida, y la verdad es que no tengo mucho que escribir. Me gustaría ser como todo, salir por las noches y tomar un poco: divertirme como un chico normal de dieciocho cortos años; pero claro, yo no puedo, no desde que mi padre murió. Desde que el murió toda mi vida se convirtió en responsabilidades y trabajo, que antes pertenecían a papá.

Aunque para ser sincero, de todo eso se encarga Dana, la secretaría, o Gemma que es mi hermanastra. Realmente nunca la veo, ella dice que papá le dejo a cargo, y que lo había hecho únicamente para que no me sintiera tan solo y tuviera algo cercano a una verdadera hermana. Pero Gemma no lo es, es más bien una chiquilla enfadosa, que no hace más que molestar.

Mi teléfono suena y leo el mensaje de mí amigo.

Harry, vamos a ir a comer con los chicos ¿vienes?

Claro, dime dónde están.

Te paso la dirección. Vente solo por favor.

«¿Vente solo? No tengo con quien ir»

Segundos después recibo otro mensaje con la dirección de lugar, nunca había escuchado del lugar, espero que al menos sea bueno. No tardo más que unos minutos al tomar mi chamarra para luego salir de casa e ir al lugar.

Las ganas de ser un chico normal y sin el peso de una empresa encima de mis hombros me entran otra vez, ahora más que antes. Todos dicen que cuando estas en este tipo de situaciones, donde quieres liberarte, lo mejor que puedes hacer es tener sexo con alguien. Una noche de sexo no me vendría mal, pero claro soy virgen.

Al menos voy a salir a cenar y no me quedare como siempre, buscando algo para ver el Tv, mientras como cualquier comida basura que he encargado o me encuentro en la cocina.

«Por algo se empieza»