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Su mirada, era completamente distinta, sus ojos estaban resplandecientes y tenia una sonrisa calida.

-El amor, el dulce y agrio amor, no hay nada en el mundo que te altere mas el sistema que el amor, es como drogarse, pues tiene efectos similares, todo lo que las personas te pueden ofrecer es hermoso

-¿Alguna vez te enamoraste y fuiste correspondida?

-Y otra vez, me amaron con locura y no pude corresponder, antes solía visitarlo a pedirle disculpas, sabes con el tiempo te das cuenta que estar muerto no es malo, asesinar es como un acto mal visto de bondad, lo peor que te puede pasar en esta vida despues de nacer, es crecer

-¿A que te refieres?

-Tenian un hijo, un chico de 17 años, que despues de un tiempo sufrio de Estocolmo

-¿Como sabes eso?- hice una pausa para reflexionar -Eso significa... ¿que tu?

-Si, asi es, aunque un secuestro en mi historial no es la gran cosa, lo sorprendente es que a esta persona no la mate, es mas, me ayudo, tanto en los asesinatos, como en el sexo, asi como a mi misma, un excelente chico, lastima lo que se tubo que pasar.

-¿que hiciste?- esta completamente aterrrada y por primera vez sentía asco de ella y sus acciones -¿que demonios hiciste?

-Nacer, eso hice

-Eres la persona mas repulsiva aue conozco, eres un ser despreciable, finges ser la victima, pero no es así, eres un moustro, ¡es mentira! Si lo hubieras querido serias alguien, solo eres una loca mas en un sanatorio mas, ojala te mueras aqui adentro- sali lo mas rápido posible, pero antes ella me hablo -lo se, se que el solia pensar igual, pero bueno, al final todos estamos igual de enfermos, la humanidad esta enferma- siguio hablando, termine de escucharla cuando subi al elevador, vomite.

Encontré de nuevo al chico que se masturbaba afuera de la puerta de Lizbeth, haciéndolo nuevamente, cuando me vio, me rogó que lo dejara pasar, claro yo me negué, le dije que estaba enfermo y que fuéramos a hablar a la cafetería o afuera, el acepto.

Nos encontrábamos sentados en unas jardineras, estar a su lado me causaba repulsión, no puedo creer que existan personas así.

-Muero de ganas por tocarla- dijo por fin y me quede asombrada por su sinceridad -podrías ayudar y te podría dar un buen dinero- lo sé, iba a decir mas, pero para mi eso era suficiente, me levanté y me dirigí a él fuerte y claro -son personas, escogí está carrera por que los pienso ayudar, si tu no quieres hacerlo, está bien, pero para eso estamos- me calló por que comenzó a reír burlándose de mi - y yo creyendo que era por tu depresión, ella dice que a eso hueles y no sólo por trabajar aquí, hueles a antidepresivos señorita - pronunció mi nombre completo, y cada sílaba resonaba en mi cabeza, sobretodo mi apellido, mi apellido siempre me afectó tanto, lo último que recuerdo es su nariz sangrando, su cara de pánico y la puerta del elevador.

Confesé lo que hizo, dije que esa era el motivo por el cuál había pasado lo que paso, los altos mandos me miraron con tristeza y recuerdo lo que dijieron  "otro más que tenemos que despedir" estaba un poco desorientada, que ella lo supiera no me sorprendía, es lista, demasiado, pero, ¿cuántas personas más sabían mi secreto? Si se entera mi família... todo termina.

Fui a su habitación y ahí estaba ella, lo supuse, ella ya sabía por que estaba ahí, me sonrío, una fina línea, sus ojos se achinaron y su ceja derecha se levantó.

-¿Por qué lo hiciste? ¿cuántos más lo saben? - dije enojada

-Quería que se fuera- las piernas me temblaban.

-¿y no había otra forma que ponerme en riesgo a mi y mi carrera?- estaba por derrumbarme, pero tenía que llegar al final de todo esto.

- No - seco, como siempre.

-Sabes que me agrada que seas como yo, me agrada que te tiemblen las piernas, que te asuste mi presencia, tus emociones son reales, como las de Esmeralda y Fernando, sobre todo Fernando, por eso, quiero que sigan siendo las personas que me cuidan, por que me ven como él solia hacerlo, como un ser humano.

-¿Quién?

- El mejor amigo del detective Nicolás

Autora:
Solo es para advertirles que a partir de este punto el formato de lectura sera diferente, ya no sabremos nada de Brittany, ni del hospital, por que la verdad es que ya no pasará nada importante en ese lugar.

Tesis Sobre La LocuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora