Capitulo 17: Conoce a tus rivales.

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POV Marinette.

Entrecerré los ojos intentando ver a través de las luces que emanaban las cámaras de decenas de periodistas.

Puse la mirada al frente y me concentré en ignorarlos intentando no hundirme en mis nervios.

No tenía el coraje de acercarme al bullicio de preguntas al aire, ni al movimiento brusco de los fotógrafos. No estaba preparada para acercarme a ser entrevistada, aún no.

Apreté una mano en mi estomago intentando huir de las náuseas de los nervios.

Alya carcajeó a lado mío distrayéndome de mis pensamientos.

- Si no fuera por ti -me sonrió- Estaría entre esos perdedores.

Giré la cabeza hacia ellos de nuevo, mientras se empujaban y saboteaban para obtener el permiso de los diseñadores y tomarles una foto.
Después de todo muy pocos entrarían para obtener el privilegio de cubrir los desfiles en el interior del edificio...

Entre ellos estaba Alya.

Pero por desgracia ningún tipo de periodista estaba permitido en la fiesta que se realizaría después.

- Perdona por no lograr que tu nombre esté en la lista de la fiesta. - le susurré con una mueca.

Alya bufó moviendo su mano.

- No te disculpes, Mari. Gracias a ti tendré las mejores fotos para restregarle a mi jefe, y el mejor asiento que cualquier paparazzi...

No pudo terminar.

- ¡Si! -exclamó interrumpiendo y sobresaltándonos- Gracias a ti, yo también tendré un gran asiento. -regresó a la vida Allegra.

Alya me miró extrañada y yo me encogí de hombros.

Desde que nos habíamos encontrado con Allegra, ella estuvo distraída y ajena a nuestra conversación.
De vez en cuando recordaba que estaba con nosotras y comentaba algo de forma espontánea para luego volver a perderse en sus pensamientos.

Al igual que ahora.

- Tu compañera es rara. -me susurró Alya acercándose, al comprobar que Allegra ya no nos escuchaba.

- No es rara, sólo es distraída. -expliqué y cruzamos una puerta para encontrarnos frente a una gigantesca pasarela y cientos de sillas.

La gente se acomodaba en las sillas mientras charlaban y alababan sus costosos trajes.

Nos dirigimos hacia nuestros asientos.

- Esto es muy emocionante. -exclamé tomándome las manos- No puedo dejar de ver a varios grandes diseñadores entre esta gente. -los nervios picaron- Todos juzgaran mis diseños.

- Estoy segura de que todo irá magnífico. -Alya puso su brazo por mis hombros- Eres una excelente diseñadora.

Le guiñé un ojo y continuamos con nuestro camino.

- Hablando de diseñadores y competencia... -continuó Alya insegura- ¿Crees que venga?

Levanté una ceja.

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