Dos Corazones Rotos - 3ra Temporada/Jos Canela {TERMINADA}

Capitulo •21•

–Buenos días jefe– Entré a su oficina dejando un café sobre el escritorio.

–Buen día _____– Sonrío– Y vamos, no me llames "jefe"– Hizo comillas con los dedos.

–Es que todos te dicen así, supuse que yo también debería.

–No, tu llámame Jos– Aclaró y asentí –¿Y Lizzy?– Preguntó al no verla conmigo.

–Hoy es el día de descanso de Freddy y se quedo con él– Explique.

–Que mal, quería verla– Dijo haciendo una mueca.

–Créeme que cuando despierte y vea que me vine sin ella, estará muy enojada– Comenté riendo, pero después me torne sería cuando note que Jos se dedicaba a observarme –¿Que?– Pregunté.

–Nada, solo me sigue encantando verte reír– Me sonroje por completo –Por dios, no puedo creer que te sigas sonrojando tan fácilmente– Dijo burlón.

–Sigo odiándome por eso– Dije y esta vez él rió –Creo que iré a empezar con los asuntos de hoy– Asintió y salí de su oficina.

En mi escritorio estaban ya algunos papeles, eran informes y debía colocar cada paquete dentro de un folder. Antes de hacer eso, entre a un correo electrónico que me había dado Jos, donde algunas personas se comunicarían conmigo para hacer alguna cita con Jos. En una semana estaba programada una junta con varios empresarios, supuse que para eso serían los folders.

La puerta del lugar fue abierta y rápidamente escuché el ruido de unos tacones, era una chica, quien estaba por entrar a la oficina de Jos.

–Ah, disculpe ¿tiene alguna cita con el señor Canela?– Le pregunté revisando la agenda, pero no había nada programado para hoy.

–¿Disculpa?– Elevé mi vista para verla, soltó la perilla de la puerta de la oficina de Jos y se acerco a mi –¿Tú? ¿Que haces aquí?– Me preguntó con desagrado la famosa prometida de Jos.

–Soy la nueva asistente de Jo.. de el señor Canela– Contesté.

–Vaya, que novedad– Sonrío hipócritamente –Escucha, la única regla que debes saber es que soy la prometida de Jos, y yo puedo venir cuando se me pegue la gana sin necesidad de una estupida cita, que no se te olvide– Dijo amenazadora, y para ser sincera, me había intimidado.

–Perdón, es que no había visto que eras tú– Me disculpe algo apenada.

–Pues mira bien mi cara y grábatela, que me veras aquí muy seguido, y no quiero que se vuelva a repetir una humillación así– Se dio la vuelta y entro a la oficina de Jos cerrando de inmediato la puerta.

¿Pero que clase de chica se había conseguido Jos?

» Jos:

La puerta de mi oficina se abrió, creí que sería _____, pero en realidad era Alyssa.

–Hola Aly– La saludé sonriente.

–¿Desde cuándo tienes asistente?– Preguntó cruzada de brazos.

–Desde ayer– Respondí.

–¿Y por qué tiene que ser ella?– Levantó una ceja.

–Porque es mi amiga, ya lo sabes.

–Pues no me agrada mucho la idea de saber que ella estará aquí contigo todos los días– Dijo con su tono serio.

En verdad trataba de no estallar, pero a veces Alyssa acababa con mi paciencia.

–¿Y que te trae por aquí?– Pregunté intentando cambiar de tema.

–Es un asunto de la boda, mi madre ya ha apartado el salón– Dijo emocionada, era tan bipolar.

–¿Cuando será?– Pregunté.

–El quince de Marzo ¿Que te parece?

Me quede pensando, eso era en menos de dos meses.

Estuve a punto de asentir, cuando una duda se presenció en mi mente.

¿De verdad quería pasar el resto de mi vida con Alyssa?

Jamás había sentido esa duda hasta hoy, hoy que sabía que cruzando la puerta, estaba el verdadero amor de mi vida.

–Jos..¿entonces?– Preguntó al ver que no tenía respuesta de mi.

–Si, si, esta perfecto– Forcé una sonrisa.

–¡Genial!– Aplaudió para después acercarse a mi y besarme profundamente –Te amo tanto– Me dio un beso más.

–Te veo en casa ¿si?– Asintió.

–Te estaré esperando en la cama– Me guiño un ojo y después salió de la oficina.

Así que me casaría el quince de marzo.

Pase una mano por mi cabello y me recargue en mi asiento cerrando los ojos. Hace tan solo unas semanas, me emocionada el hecho de casarme con Alyssa, pero hoy no sabía lo que sentía. Quería a esa mujer, en verdad lo hacía, pero quería más a.. ____.

El único problema aquí, era que ella tenía a Freddy y a Lizzy, y yo jamás podría tener una oportunidad de nuevo en su vida.

Traté de no pensar más en eso y me enfoqué en terminar mis asuntos pendientes. Había mucho trabajo para estos días.

Me puse de pie para llevarle unos folletos a _____, salí de mi oficina, pero ella estaba hablando por teléfono.

–Si, gracias, en un rato estaré allá– Colgó la llamada.

–No se permiten los teléfonos durante horas de trabajo– Dije en modo de broma.

–Eso no decía en el contrato– Me desafió y reí.

–¿Era Freddy?– Pregunté por alguna extraña razón.

–No, era de un estudio de revelación de fotografías, me avisaban que unas fotos que había mandado a revelar ya estaban listas– Explicó.

–¿Sigues tomando fotos?– Pregunté.

–Si, Freddy me regaló una cámara desde hace años para que no dejara de hacer algo que me apasionaba tanto.

–Me da gusto saber eso, sería una lastima que lo hubieras dejado, siempre me pareciste la mejor fotógrafa– Me sonrió algo apenada.

–Gracias..supongo.

–Y bueno, necesito que estos folletos los pongas dentro de los folders– Indiqué.

–Claro– Los tomó, y pude sentir su mano rozar con la mía, algo que causo un escalofrío por todo mi cuerpo.

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