Dos Corazones Rotos - 3ra Temporada/Jos Canela {TERMINADA}

Capitulo Extra.

Hoy era un lindo sábado, el dia que más disfrutaba de la semana. Jos y yo descansábamos del trabajo, mis hijos no iban a la escuela, así que estabamos todo el día juntos y Jos de vez en cuando despertaba con la idea de ir a algún lugar a divertirnos. Y hoy no fue la excepción, quería llevarnos a un parque de diversiones que era la sensación aquí en Wisconsin desde hace dos años que lo inauguraron, pero aún no habíamos tenido la oportunidad de ir, por eso los cinco estábamos muy emocionados.

—¡A desayunar!— Grité por las escaleras una vez que me había encargado de dejar todo listo en el comedor.

El primero en aparecer fue mi pequeño Alex, espere a que bajara las escaleras para recibirlo con un abrazó.

—Como siempre, el primero en hacerme caso— Dije divertida.

Me dirigí junto con él al comedor para esperar a que aparecieran los demás.

—¿Puedo agarrar uno de estos?— Me pregunto refiriendose a los brownies que había hecho como postre.

—Claro, pero no le digas a nadie— Susurré y el felizmente tomo un brownie.

—¡Mamá!— Lleve mi vista a las escaleras, Lizzy bajaba corriendo.

—Lizzy no..

—"No corras en las escaleras"— Rodó sus ojos, supongo que ya estaba cansada de escuchar lo mismo desde que tiene memoria.

—¿Por que sigues en pijama? En cuanto terminemos de desayunar nos iremos— Dije cansada.

—No ire, tengo una crisis— Dijo desesperada mientras se dirigía a los sillones de la sala y hacía un desastre.

—¿Pero que haces?— Reclamé.

—No encuentro a mi señor conejo— Respondió.

—Luego lo buscamos— Le pedí.

—Buenos días familia— Mi vista se enfoco en mi querido esposo quien cargaba a Abby en sus brazos.

—¡¿Pero que haces con eso?!— Gritó Lizzy furiosa mientras se acercaba a Jos y Abby, entendí su reacción cuando me percate de que Abby tenía a su señor conejo el cual le arrebató bruscamente haciéndola llorar.

—¡Oye!— Le grité molesta.

—Lizzy ten más cuidado— Le dijo Jos.

—¿Por que lo tenías Abby? ¡Sabes que es mío y no lo puedes tocar!— Mi pequeña Abby lloro mas fuerte escondiendo su rostro en el hombro de Jos.

—¡Elizabeth basta! No le hables así a tu hermana es una..

—"Es una niña"— Parece que le encantaba imitarme —No tiene porque tocar mis cosas y menos esto.

—Es que me gusta ese conejo— Se defendió Abby entre lágrimas.

—Te voy a comprar uno mi amor, pero ya no llores— Jos limpió sus lágrimas.

—¿Que? Tu no puede hacer eso— Se apresuro a decir Lizzy.

—¿Cual es tu problema Liz?— Le pregunté.

—No quiero que nadie más tenga uno.

—No seas egoísta.

—Mamá no soy egoísta, es solo que ustedes no entienden lo que esto significa para mi— Sus ojos se aguaron.

—Abby ve con Alex, esta en el comedor— Le pedi dulcemente a mi pequeña, Jos la bajo y ella rápidamente se fue —¿Quieres hablar con nosotros?— Lizzy asintió mientras comenzaba a llorar.