25. Confuso

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Octavian

Estabamos apunto de acabar la cena, todos nos habiamos quedado hablando acerca de la nueva informacion que teníamos. Todos ecepto Rachel, quien se habbia quedado callada ya un largo rato.

-Bueno-dije levantandome de la mesa- Leo ¿te importaria llevarnos con Afrodita?

-No hay problema -respondio el latino parandose tambien

-¿Vienes Rachel?-

-¿Eh?- pregunto ella confundida, al fin saliendo de sus pensamientos

-Vamos a ir a ver a Afrodita ¿vienes?-

-Tal vez todos deberiamos ir- dijo Annabeth repentinamente

-¿Piensas interrogarla cierto?- yo ascentí- En todo caso seria mas facil si fuéramos todos y nos ahorraramos la explicación.

No me esperaba nada menos de una hija de Atenea. Debo admitir que el razonamiento de la rubia era digno de admiracion.

Todos, obviamente, estuvieron de acuerdo, asi que los 10 semidioses más Rachel nos dirigimos a la sala de maquinas donde Leo tenia a Afrodita.

Piper no habia mentido. Afrodita se veia ridicula. Imaginen a la diosa del amor, con el pelo hecho un desastre, una manzana en la boca y forrada casi completamente. Además se encontraba esposada a una columna por la espalda y nos fulminaba con la mirada.

Nadie pudo evitar unas cuantas risas, a pesar de los intentos fallidos de cubrirse la boca o morderse los labios para callar sus carcajadas.

Tosi intentando mantener la conpostura.

-¿Leo, le puedes descubirirle la boca?- diije.

Asi lo hizo, y tan pronto como la manzana fue retirada se pudieron escuchar los fuertes gritoss de la diosa acompañados por una mirada fulminante.

-¿¡PERO COMO SE ATREVEN!? ¿Quienes creen que son, para tratar asi a una diosa?- dijo moviendose freneticamente entre sus vendajes.

-Lo sentimos- dije yo aun riienddo un poco. Pero luego reaccione.

-Sin embargo usted es una diosa-dije- si quisiera abria podido escapaar facilmente de los vendajes.

La diosa rodo los ojos

-¿Cuan lentos pueden ser los semidiosses? - se quejo en voz alta

-¿De que hablas? - pregunto Rachel confundida

- Los dioses dejaron el Olimpo-aclaro Afrodita.

-¿Qué? ¿Por que se irian?- preguntó Annabeth

-Recibimoss un ataque por parte de Gaia. No pudimos recistir y por eso todos se fueron.

-Menos tu- aclaré

-¡Esos malditos Dioses! ¡Me usaron cono cebo para poder escapar!- la diosa se revolvio furiosa entre sus bendajes.

-¡Yo estabaa muy herida! Y gaia se aprovecho dde mi debilidad para controlarmee.

-¿Estas diciendo que todo esto fue una trampa de Gaia?- pregunte esta vez yo.

-Si, lo tenia todo planeado....-

-La verdad- continuo la diosa- pense que no sobrevivirian. Por eso me sorprendio que pudieras resistirte a mi hechizo, Octavian.

Podia sentir las mirada de todos en mi

- Las mentes humanas son debiles ante sus recuerdos dolorosos-

De pronto percibí en la voz de la diosa, una malicia desgarradora. Que me paarecia conocida.

Es más, era inconfundible.

Love can't be predicted (An Octachel Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora