Había transcurrido algunos meses desde que dejé Beacon Hills y muchas cosas habían sucedido después de eso.
La cacería con mis hermanos comenzó, sobretodo la búsqueda de la Primera Espada que nos permitiría derrotar a Abbadon, la última Caballero del Infierno. El problema es que la espada es inútil sin la Marca de Caín, la cual Dean portaba ahora en el brazo; la Marca era una maldición: tu instinto asesino salía a la luz, matabas a todo lo que se te cruzaba hasta que finalmente te convertías en un demonio.
Tal como le sucedió a Caín, el primer hijo de Adán y Eva.
Dejando todo esto de lado un caso nos había llevado de vuelta a Beacon Hills; el Nemeton recuperó su poder atrayendo toda clase de criaturas incluyendo el rugurú al que perseguimos quien había vivido en Beacon durante su juventud.
Al llegar lo primero que hice fue llamar a Scott y Lydia para avisarles de mi presencia, ambos se emocionaron y dijeron que me verían en la escuela al día siguiente.
- ¿Estas preparada?- preguntó Dean frente al Instituto.
- Siempre- el amagó con salir del auto pero lo detuve antes de que pudiera abrir la puerta-Dean...
- ¿Qué?
- Trata de no matar a mis amigos sobrenaturales
El cerró los ojos mientras soltaba un suspiro. Luego me miró fijamente.
- Hermanita, ya te lo he dicho, nosotros no nos relacionamos con personas sobrenaturales
- Tu mejor amigo es un ángel, creo que eso cuenta como sobrenatural
- Cass es diferente.
- ¿Cómo Benny?
- Esta bien. Tienes un punto. No dispararé a menos que me den una razón.
Viniendo de mi hermano era mejor que nada. Me baje del auto y camine por los pasillos con Dean a unos pasos detrás de mí. Él había conseguido trabajo en el colegio por lo que sé iría a presentar en la oficina del director y nos separamos de camino. Al llegar a mi antiguo casillero vi a dos siluetas esperándome.
- ¡Lydia, Scott!- grité y corrí hacia ellos. Ambos me abrazaron fuertemente.
- Que bueno que estas aquí. Te extrañe tanto.- dijo la rubio fresa cuando nos separamos.
- Yo igual.
- Sé que pasaron pocos meses pero igual pareció una eternidad.- dijo Scott- bueno chicas debo dejarlas, tengo entrenamiento de Lacrosse.
Ambas nos despedimos de él.
- Bueno. Cuéntame todo lo que estuviste haciendo este tiempo.
Nos salteamos una clase para ponernos al día, yo le conté de mis cacerías y Lydia me puso al tanto de todo lo que había sucedido durante mi ausencia.ISAAC POV
Estaba en los vestuarios charlando con Danny y preparándome para el entrenamiento de Lacrosse cuando en eso llegan Scott y Stiles hablando animadamente
-...debía haber estado allí para recibirla- le estaba diciendo Stiles a su mejor amigo.
- Lo sé. Lamentó no haberte avisado antes pero es que ella me llamo a las 2 de la madrugada
- Descuida. La veré en el almuerzo.
- ¿Ver a quién?- pregunto Danny
- ____- contestó Stiles y luego se tapó la boca al ver que yo había escuchado.
Levante la cabeza para mirarlos cuando el pelo negro dijo su nombre. Las manos me temblaban ligeramente.
- ¿Ella está aquí?-pregunté con un hilo de voz. Scott me miró y luego habló.
- Llegó anoche. La dejé hablando con Lydia en los casillero antes de venir hacia aquí
- Que bien- fue todo lo que pude pronunciar. A partir de ese momento me mantuve en silencio hasta llegar al campo de juego y es que saber que ella estaba aquí me trajo varios recuerdos.
Después de que ____ se fuera Scott y el padre de Allison confirmaron la historia de sus amigos aunque a todos nos quedó la sensación de que Scott sabía más de lo que decía.
Allison y yo fuimos de mal a peor; ambos nos sentíamos culpables de la traición que hicimos además de que Allison aún seguía enamorada del Alfa verdadero, de hecho, lo dijo frente de todos. Tal vez pensó que podía arreglar las cosas un poco pero la verdad era que McCall ya salía con Kira.
Saber lo que Allison sentía me rompió el corazón. Ahora sé cómo ____ debió sentirse y eso me hacía sentir más culpable.
- Isaac- me sacudió Scott- ya llegamos al campo
Era cierto. Todo el equipo estaba aquí entrenado. Sólo faltaba el entrenador lo cual era extraño ya que él nunca llegaba tarde.
- Oh. Dios. Mío- habló uno de los chicos- ¿Qué es lo que trae puesto ese hombre?
Todos nos giramos a ver...y aguantamos las ganas de reír aunque si soltamos algunas carcajadas.
El entrenador venía con su acostumbrado semblante serio pero lo realmente gracioso era el hombre rubio de unos treinta que venía al lado de él. Traía puesto remera blanca, shorts rojos y una banda de hacer gimnasia en la cabeza. Era un espectáculo muy gracioso
- ATENCIÓN PERDEDORES. TODOS ESCUCHEN- gritó el entrenador. - este es mi nuevo asistente el profesor Lupin- más risas de parte de todos a lo que el hombre ignoró- ha pasado todos mis exámenes de exigencia asique muéstrenle respeto.
Los exámenes para asistentes del entrenador eran muy difíciles de pasar por no decir imposibles. De hecho Lupin era el primero que lo hacía.
- Profesor déjeme presentarle a alguno de mis jugadores. Él es McCall
- Un placer-le tendió la mano a lo que el hombre la tomó con cierta rigidez
- Danny- lo señalo-Stilinki y Lahey
Le extendí la pero el sólo me miró con desaprobación- ¿Lahey? ¿Isaac Lahey? - creo detectar cierto tono de odio en su voz. Yo sólo asentí repentinamente preocupado- Es un placer- cuando tomó mi mano apretó más fuerte de lo debido fue ahí cuando noté que el tatuaje rojo en su brazo resaltaba. Me miró a los ojos. Era obvio que el tipo me odiaba nada más verme. - Creo que nos llevaremos bien tu y yo.
- Claro- mi voz salió temblorosa debido al dolor inmenso en mi mano.
Me soltó con brusquedad y se fue a ver a los demás chicos. Mire mi mano y descubrí que casi me rompe los huesos a pesar de que ya estaba sanando.
- Hombre, el tipo de odia- dijo Stiles
- Si- dije abriendo y cerrando mi mano. Ya no dolía tanto y los huesos se habían acomodado. - ¿Qué le sucede a ese tipo?
- No lo sé- habló Scott- creo que deberías andar con cuidado con él.
- ¿Qué podrá hacer? ¿matarnos de risa con su vestimenta?- se burló Stiles
- Oye Dean-gritó el entrenador y todos volteamos a ver de quien se trataba
- ¿Si?- respondió el nuevo maestro.
La cara de Scott fue todo un poema. Sus ojos se abrieron con sorpresa y su mandíbula cayó al suelo. Observó al hombre de pies a cabeza una y otra vez
- ¿Qué miras chico?- dijo Lupin mientras interrumpía su conversación y se acercaba
- Nada- dijo mientras lo seguía mirando.
- ¿Eres gay chico? Porque sé que soy muy guapo pero soy heterosexual y como quince años mayor que tú.
Dios. El ego de este hombre estaba por los cielos. Scott parpadeo saliendo de su ensoñación.
- Disculpe profesor ¿Cómo dice que se llama?
- No lo dije. Y mi nombre es Dean, por cierto.
Se dio la vuelta y volvió a su trabajo mientras que el chico se quedó con cara de sorpresa y me volteó a ver
- Debes tener MUCHO cuidado Issac
- ¿Por qué? Es sólo un profesor al que parece que no le grado mucho ¿Que puede hacerme?
- Él no es un profesor- dijo Scott algo alterado- Su verdadero nombre es Dean Winchester y es un cazador.
Mierda.