Hace unos días, después del pequeño incidente del sótano, todo iba bien, Liam se preocupo mucho y desde entonces no me deja solo ni un segundo lo cual es agobiante.
Mi madre no deja de reclamar me qué es por mi culpa y aun no comprendo por que que lo piensa.
De camino a la tienda no puedo evitar sentir que alguien me sigue
-¿Rose?- escucho que susurran pero no hay nadie a mi alrededor -ROSE!!
Esta vez grita mi nombre y la sangre se me congela al instante, esa sensación que sentí cuando me desmaye vuelve a mi de un momento a otro
Uno
Dos
Tres...... segundos pasan cuando lo siento de tras de mi
Nada, no hay nadie diestras de mi, que me pasa estoy paranoica.
Camino a toda prisa a la tienda.
-Cómo siempre llegas tarde- me recrimina mi madre como de costumbre-
-lo siento- es todo lo que digo y sigo mi camino a la bodega
-ya es hora de que pienses lo que harás por que no trabajarás para siempre aquí y lo sabes- la escucho decir y volteo a mirarla y me encuentro con su típica cara de odio. No se por que siempre es así conmigo
-Claro que lo se, ya pronto dejare de molestarte- me giro antes de que las lágrimas empiecen a salir.
Camino a toda prisa hacia la pequeña bodega y comienzo a sentir el sabor salado de mis lágrimas en mis labios.
-Rose ¿que te pasa?- pregunta mi abuela preocupada
-no es nada abuela- salgo de la tienda y comienzo a caminar por la calle.
Llego a un parque y me siento en una de las bancas, tenia que pensar en lo que haría ahora, por que ya no quiero depender de ella.
-¿Rose?-otra vez mi nombre.
Escucho que alguien se acerca a mi y cuando descubro de quien se trata no lo puedo creer.
-¿Rose? Eres tu.....
-Zayn- mi voz es casi audible y siento mi cuerpo estremecer
-cuanto tiempo hermana.....
-Angie
