Capítulo 11

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*POV LEONARDO*

Estoy sentado leyendo "The Great Gatsby",cuando alguien toca el timbre de mi casa.
Nunca quise tener empleada ,es un desperdicio,pero en estos momentos,no quiero pararme y quisiera una.

Solo llevo unos jeans desgastados y voy descalzo y tengo demasiada pereza como para ponerme un polo.

Me paro con libro en mano y me dirijo a la puerta,¿quién puede ser?
No le comenté a nadie que no iría a trabajar hoy...

Al abrir la puerta me llevo una sorpresa,una muy agradable y sonrío, pero al fijarme en las facciones de mi pequeña sorpresita se me borra la sonrisa.

Sin decir ninguna palabra,dejo el libro en una mesita al lado de la puerta y la jalo hacia mis brazos.

Abrazándola,la hago pasar y cierro la puerta.La guío hasta el sillón y la siento en mi regazo,una vez así la separo y le examino el bello rostro con mis manos en sus mejillas.

_Ariel,¿qué te pasa?-Le comienzo a acariciar la mejilla con mi pulgar.

_Es que...me siento-solloza-me siento mal porque me esfuerzo...esf...-comienza a llorar.

_Shhh...no llores,estoy aquí.-Le acaricio el pelo y la pego a mi pecho fuertemente.

_Es que,hoy es mi aniversario con Ezequiel,y él todos los años se va y trabaja y me trata súper indiferente-solloza-y...pues...no lo amo,si él lo hace me llega,pero...yo me esfuerzo por compensarle el que yo lo use,y él no lo sabe,pero trato de ser buena,y él...es un cabrón.-Rompe en llanto.

La entiendo,se esfuerza y el otro la trata así,fuera de que ella y yo tengamos un romance,ella hace lo mejor que puede y él la premia así.

_Ariel,no te pongas así,sé fuerte,yo...yo...-levanta el rostro y me ve confundida,con el rostro húmedo de llanto.

_¿Tú qué?

_Yo...-Yo estoy aquí para ella,pero no se lo digo,en vez de eso,uno sus labios a los míos.

Son tan suaves y acolchonados al toque y salados por sus lágrimas,envían esa corriente a la que ya estoy tan acostumbrado por todo mi cuerpo.

Enredo nuestras lenguas,apretándola a mi,tratando de enviarle todo el am...apoyo posible.

Cuando nos separamos,yo también tengo el rostro mojado de sus lágrimas,pero ella ya no está llorando.

Me mira fijamente y me abraza,me abraza tan fuerte que me deja sin aire y me cuesta moverme.

Esta chica me vuelve loco,me hace perder los estribos, está loca.
Me trata mal,pero a veces bien,otras esta calmada y de la nada enloquece y me desequilibra,pero vamos,¿quién no está loco?

Su locura es hermosa,su locura...me enloquece.
Se vuelve a separar de mi,y me ve con esos inocentes pero astutos enormes ojos y me derrito,es tan linda.

No sé que me pasa,esto es tan nuevo,pero no lo pararé,no me importa nada.

Solo hubo una cosa que me interesó en toda mi vida,mi hermana.

_¿Quieres quedarte en mi casa?-Le pregunto.

_Quiero quedarme contigo.-Esa respuesta me llega hasta el fondo,me toca y enternece.

_Claro que sí,preciosa, claro que sí.-Digo acariciándole el rostro.

_Me gustaría lavarme el rostro.

_Sí,a mi igual,vamos.

La guío hasta el baño y hacemos lo dicho.
Le doy un poco de helado mientras leemos juntos mi libro, ella acurrucada a mi costado,con mi brazo detrás de su cuello,abrazándola.

As simple as changesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora