-Charles, por favor no te enfades que te estoy diciendo la verdad...-dije acercandome a él.
-Recordemos lo que ha pasado-contestó volviendo conmigo.
-Vale-acepté
"Todo era simplemente genial, estaba con vosotros escuchandoos cantar cuando me dijeron lo de la sorpresa. Después de mucho tiempo ví a mi padre que creía que ya se había olvidado de mi. Pero no, y eso me alegraba. Pero cuando empezó a decir que el romance de tu padre y mi madre era una falsa, yo salí corriendo y vosotros fuisteis detrás a consolarme. Fuimos a ver a tu padre, y nadie había visto a mi madre. Fuimos a buscarla pero no la encontramos hasta que vimos a Carlota. Luego volvió y nos dijo que no habían visto a mi madre por ningún lado...fin"-Dije con una sonrisa.
-¿Pero Carlota sabe toda la historia?-preguntó algo extrañado.
-Ha visto a los chicos bobo.
-Sí, pero a escondidas cuando te vió te habrá dicho algo.
-Eso, que no encuentran a mi madre.
-Mira Ali, aquí pasa algo que no me quieres contar, te conozco y ya por última vez...¿Que pasa?
-Lo que te he contado...
-Cuando me lo quieras decir búscame.
Con esto Carlos se dió media vuelta dejándome allí sola. Lo sentía muchísimo por él pero no podía enterarse de lo que había pasado entre mi padre y el suyo...Su padre no quería y eso conduciría a otro lío. Aunque ya peor del que había echo yo...Carlos estaba enfadado conmigo, no encontraba a mi madre, y a mi padre le ha dado un patatús por culpa del de Carlos. No sabía por donde empezar a intentar solucionar cosas pero pensé que lo primordial era buscar a mi madre, pero ya había mirado en todos sitios y nada. Así que me senté en el suelo poniendome las manos en la cabeza por simple desesperación.
-Tss tss-oí derepente.
-¿Hay alguien ahí?-pregunté asustada mirando a los servicios.
-Ali ven aqui-dijo una voz que me resultaba familiar pero difícil de reconocer por ser bastante baja de tono.
-Sí..contesté levantandome despacio.
Entré a los servicios y vi la sombra de una figura en el de las chicas, así que entré algo temblorosa.
-¡¡Ali!!-exclamó una feliz voz.
-¿Pero que haces aquí mama? ¡me tenias muy preocupada!
-Lo siento pero no estaba en condiciones para hablar con nadie...
-Pero la mejor solución no es encerrarse en el baño a llorar. Por Dios, levantate y vamos. arreglar esto. ¡Te hemos buscado por todas partes!
-Lo siento pero contestame a una cosa-dijo con voz siniestra.
-Sí-respondí con miedo.
-Os he oído gritar a Carlos y a ti, ¿A pasado algo?
-No, discusiones tontas, y ahora solo me interesa como estás tú.
-Bien no te preocupes-contestó mi madre con su habitual sonrisa.
-Manu sabe de sobra que todo es mentira, así que no tienes por que preocuparte.
-Me han echo quedar mal delante de todo el mundo...
-Tranquila no pasa nada, vamos a decirle a todos que estás bien-dije llevándola hacia fuera.
-Pero...¿Carlos está bien?-preguntó preocupada frenándose en seco.
-Pues supongo que sí
-Parecia bastante enfadado contigo-volvió a advertirme.
-Ya se le pasará
-Mira hija...Te aconsejo que vayas a calmarlo y luego vamos a ver a Manu.
-¡¡No exageres!!-exclamé algo borde.
-Tu novio se ha ido muy muy enfadado y te da igual...Te arrepentirás.
-Pero tú...
-¡¡Yo sé cuidarme sola!! arreglemos cada una nuestros asuntos-me interrumpió.
-Solo me preocupo por ti...
-También deberías preocuparte por Carlos yo ya estoy bien, él no...
-¡¡Al cuerno Carlos!! vamos a hablar con Manu y si aparece y sigue enfadado, aunque lo dudo, lo calmaré.
