-Ya veo el caso que le haces a tu madre..En fín, tú sabrás- me gritó algo borde.
-No te preocupes tanto por Carlos, mamá por favor, no está enfadado.
-Lo conozco ya bastante y te puedo asegurar que sí.
-Más que yo seguro que no.
Eso dejó a mi madre callada por unos segundos.
-Haz lo que quieras- replicó siguiendo andando.
-Genial- dije con una risa triunfadora.
Caminamos hasta la salida del edificio donde nos esperaban todos...Bueno no, faltaba alguien, faltaba Carlos.
-¿Dónde te habías metido?- preguntó Manu con una sonrisa abrazando a mi madre.
-Qué bonito todo- dije para mi misma.
-Bueno luego te explico, ya podemos irnos.
-Espera, falta Carlos-dijo Dani con tono alarmante.
-¡Alicia podías ir a buscarlo!- exclamó mi madre algo enfadada- te dije que se había enfadado- me susurró al oído seguidamente.
No contesté y con una falsa sonrisa me di la vuelta caminando como si no me pasara nada, pero cuando estaba lo suficientemente lejos para que no me vieran, eché a correr por los pasillos alarmada pensando donde podría estar ahora Carlos. ¿Cómo podía desaparecer todo el mundo así por que sí?
Iba yo tan asustada que me choqué con alguien, y la chica y yo acabamos en el suelo.
-¡¡Carlota!!- exclamé sorprendida mientras me tendía la mano para levantarme.
-¿Tú sabes donde está Carlos?- preguntó asustada.
-¿Le ha pasado algo?- pregunté yo más asustada aún.
-No, pero no sé si hago bien en decírtelo...
-¿Dónde está?-volví a preguntar sorprendida.
-Vale, eemm...voy... está en la calle, pasando esa puerta- dijo señalando una gran puerta entreabierta.
-¿Qué hace allí?- pregunté algo más calmada.
-No quieras saberlo- contestó con cara de asco.
-Ahora iré...
-Adiós me tengo que marchar- dijo siguiendo caminando con una falsa sonrisa.
-Adiós...- susurré en voz baja.
No podría ser tan malo, estaba en la calle nada más, estará triste por que hemos peleado, si seguro que es eso, estaba segura. Bueno iría y en cuanto me mirara lo abrazaría y le diría que no ha pasado nada, que ya está todo arreglado, pero que no le diría el secreto que me confió Carlota... Iba pensando en esto mientras me dirijia hacia la puerta, pero cuando la abrí no me encontré la escena que yo esperaba...
-¡¡¿Carlos?!!- exclamé con la boca abierta.
-Alicia...- dijo sin mirarme a los ojos.
-¡¡Te odio!!- le grité fuertemente.
-¡¿Pero tú no estabas enfadada?!- preguntó de manera borde.
-¡¡Y lo voy a seguir estando!!
Con esto cerré la puerta y llorando fui hasta donde estaban los chicos, que me vieron llorando desconsoladamente.
-¡¿Qué te pasa?!- me preguntaron todos alarmados.
-Nada- dije firmemente intentando sonreír.
-¿No has visto a Carlos?- preguntó Manu.
-Sí-afirmé enfadada.
-Eeey chica- dijo una tipa alta de pelo negro y ojos verdes.
-¡¿Qué?! ¡¡Fuera de mi vista!!- le grité.
