He tenido que volver a poner este capi por que los capítulos se han puesto en distinto orden, este es el último de momento no el otro ;)
-¡¡Chicos!!-grité intentando seguirlos.
-¡¡Que!!-respondieron a la vez.
-¿Tengo que entrar al jardín ?- pregunté triste.
-No puedes esconderte de por vida de él, venimos aquí todos los veranos- aconsejó Blas.
Sabía que tenía razón así que los seguí en sillencio hasta llegar a la casa de Carlota. Dani tocó el timbre y esperamos a que Tomás abriera, yo estaba al borde de un ataque de nervios. Pasaron segundos, y no abría hasta que cuando nos íbamos a ir abrió la puerta. Mi alivio desvaneció.
-Perdonad, no os había oído con la música- dijo entre risas
Me quedé bastante sorprendida, Tomás había cambiado mucho. Voz más maruda, pelo más rubio, sonrisa más bonita, miradas más dulces y ropa más decente. Me alegraba verlo así.
-Si tío, tienes buen gusto -respondió David
Además cambió sus gustos musicales, recuerdo cuantas veces le decía que algún día se daría cuenta de que mis canciones no eran tan cursis e idotas como él pensaba, Y por lo que veía se cumplió mi predicción.
-Entrad chicos-dijo Tomás dándole un pescozón a David.
Dani, David y Blas entraron pero yo me quedé en la puerta de brazos cruzados clavándole una de mis peores miradas.
-¿No quieres entrar?- me preguntó entre risas.
-No, yo solo he venido por la recompensa por venir, me voy ya.
-Sé que los chicos son pesados con lo de hacer las paces.
-¿Cómo lo sabes?- pregunté sorpendida.
-Me he imaginado que sería por eso. tú no vendrías a verme por propia voluntad.
-No, no quiero volver a verte.
-Pues eres la misma que estuvo en el hospital preocupadisima por mi.
-Eso fue pasado, después de todo lo que me hiciste pasar me das igual- respondí con odio.
-Pero ese era mi ''yo'' del pasado, ahora he cambiado, y todo por ti.
-¿Por mi?- pregunté incredula.
-Sí, tú me hiciste cambiar, y empecé a pensar que así quizás pudieramos volver a ser amigos, pero desapareciste.
-Si bueno...Que no quiero verte, me voy- contesté distraída
-¿Qué te pasa?- me preguntó precupado.
-Nada, no llevo una buena noche,
-Si entras, los chicos y yo te la alegraremos lo que queda.
-No sé...-dije indecisa.
-Vamos, confia en mi, podemos volver a ser amigos.
-Bueno entraré, pero lo último no te lo confirmo.
Fuimos hasta el salón donde los chicos tenía preparado una especie de ''juego''
-Veo que has echo que entre- le dijo Dani a Tomás alegre.
Él solo se limitó a sonreír y a mirar lo que habían preprado los chicos.
-Podemos jugar a esto, solo faltan las botellas- dijo David.
-¿Botellas?- preguntamos sorprendidos Tomás y yo a la vez.
-¿Nunca habéis jugado a esto?, pues verás que divertido-aseguró Dani.
-O ses que en este juego hay que meter alcohol- respondió Tomás inseguro.
-Aunque no bebas por una noche no pasa nada, además seguro que tienes una botella por ahí- dijo David con voz pillina.
Entonces ya tampoco bebía, me empezó a gustar ese chico que creía conocer. En la mesa había 5 vasos repartidos, supuse que cada uno tenía el suyo. Y al lado unos cubiletes de parchis con sus correspondientes dados.
-Bueno una noche es una noche además habrá que celebrar que al fin veo a Alicia- respondió Tomás feliz.
-Alicia...- dije en voz baja entre risas.
-Ali para los amigos- añadió Blas,
-Pues Ali- respondió Tomás.
-Tú aún no eres mi amigo- dije molesta.