Por siempre Ladybug

Día 0

¿Qué es lo que hace que una persona sea quién es? ¿Qué hace que una persona sea valiente? ¿Qué hace que una persona sea cobarde? ¿Qué hace una persona sea débil? ¿Qué hace que una persona sea fuerte? ¿Qué hace que una persona sea asombrosa? ¿Qué hace que una persona sea común? ¿Qué lo hace?

Esta vez no había akuma, esta vez no había un villano, esta vez era la naturaleza a la que tenían que enfrentar, ningún objetivo excepto salvar la mayor cantidad de vidas posibles. El Sena nuevamente había sobrepasado su límite, el río se desbordaba arrastrando todo a su paso, bicicletas, carros y también personas. De un lado a otro, los héroes de París se movían de un lado a otro ayudando a las personas que habían quedado atrapadas por el agua del río de París. Las personas estaban nadando entre objetos que dificultaban mantenerse a flote. Chat noir saltaba entre los edificios buscando personas, observando cada rincón en el que hubiera una persona que pudiera haber alguien que necesitara ayuda. Al ver a unos pequeños gatos flotando en una cubeta por la corriente, saltó para tomarlos entre sus manos y los llevó al balcón del Grand Paris y los dejó junto a otras víctimas del desastre, seguido se dirigió a compañera de batallas.

-¿Falta alguien?- Le preguntó al gato la heroína de rojo -No vi a nadie más de camino- -Seguro- La heroína se dirigió a la orilla del mirador y observó la dirección que estaba tomando la corriente del Sena -Pronto el agua llegará hasta aquí, tenemos que bloquearle el paso- -¿Y cómo sugieres hacerlo?- Tenemos que construir una presa al rededor, ¡Andando!- Le gritó a su compañero a la vez que saltaba hacia las calles. El rubio no tardo en seguirla y juntos movían los vehículos que estaban en la cercanía y los apilaban entre las calles para bloquear el paso del agua. El rubio aprovechaba cada instante que tenía para admirar la valentía y el ingenio con que actuaba su compañera. Cada vez que la veía en acción, no podía enamorarse más y más de ella; sólo quería luchar a su lado por toda la eternidad -¡Aquí ya está listo!- Gritó Chat noir cuando vio que todas las calles estaban bloqueadas. La heroína utilizó su yoyo para subir al techo de un edificio y observar el rumbo que estaba tomando el agua.

La corriente era detenida por los bloqueos que los dos jóvenes habían puesto, protegiendo a las personas en el hotel. Eso tranquilizó a la heroína pelinegra, hasta que presencio una imagen que no le agradó. Al no poder seguir su rumbo original, el Sena tomó un nuevo camino hacia la escuela Francoise Dupon, donde también se encontraban varias personas refugiándose del río. Sin esperar un sólo segundo la chica saltó en la dirección de la escuela sin decirle nada a su compañero que no comprendió la repentina acción. Confundido, el rubio trató de seguir a la chica que se había ido. La chica formó lo más rápido que pudo una barrera para proteger la escuela; al ver que no le quedaba tiempo, utilizó su yoyo para sujetar las cosas que había reunido. Al llegar al lugar, el gato vio a su amada usando su arma y su propio cuerpo para detener el paso del agua -¡No te quedes ahí! ¡¡Saca a las personas!!- Sin esperar a que le volvieran a repetir la orden, Chat noir fue a sacar a los refugiados para llevarlos al Grand Paris.

Ladybug resistía sobre su cuerpo la fuerza de la corriente del río desbordado hasta que la última persona en la escuela estuvo a salvo con el gato, después no pudo soportar el peso y se soltó, siendo arrastrada por el agua junto a todo lo que había apilado tras ella.