Jugando a amarnos -KidLaw x ZoSan-

Capítulo 5 "Nuestra vida en juego"

Amamos como humanos y follamos como demonios. Es la ley de nuestra vida que nos tiene atados para siempre.

Las dos máquinas de asesinar y los dos pecados se encontraban rodeados de cuerpos de los ya fallecidos policías, lo habían logrado.
- Salgamos de aquí- dijo cierto pelinegro caminando sobre los cuerpos sin vida.
- ¿Ustedes a donde irán?- pregunto él rubio encendiendo un cerillo, molestando a su compañero con él humo que salia de sus finos labios.
- Iremos con ustedes, no importa a donde se dirijan nosotros los seguiremos- dijo él peliverde volviendo con su compañero pelirrojo que solo lo miraba fijamente.
- En ese caso...- él rubio hizo una pausa para inhalar mas fuerte él sabor que le provocaba fumar, era en parte para él, una especie de liberación después de un momento algo estresante.
- ¿Incluso si nos dirijimos al infierno?- término de decir.
- Hasta fundirnos en las terribles llamas- contesto él pelirrojo mirando al ojeroso que se sorprendió un poco por la respuesta. Era verdad lo que decían ¿Hasta ser juzgados? ¿Hasta ser sentenciados al inframundo? ¿Hasta ser consumidos por las abrazadoras llamas? Incluso quemarse junto a ellos.
- Hay algo que tenemos en mente y ustedes pueden ayudarnos- hablo él ojeroso moviendo la cabeza de un lado a otro, ese choque contra él bote de basura no había sido para nada suave y había causado que su cuello se torciera un poco, pero aun recordó cómo él pelirrojo lo tomo por la fuerza y lo aventó al vacío junto a él.
- ¿Que tienen en mente?-.
- Nosotros tenemos la misión de acabar con él magnate mas grande de esta ciudad- ese sujeto era en verdad afortunado, demasiado a decir verdad. (Notece él sarcasmo)
- Donquixote Doflamingo y sus subordinados- termino de decir él rubio, que parecía que lo nombraba con cierto odio y asco.
- Me parece bien- dijo él peliverde.
- Solo hay tres cosas- dijo él ojeroso mostrando tres de sus dedos tatuades con diferentes letras que si las juntabas junto con sus otros dos dedos restantes decía "death" una clara señal de que no debían meterse con él.
- Y cuales son esas tres cosas Mr. Seven- dijo Kid observando detalladamente cada movimiento que hacia él cirujano de la muerte. Observarlo era como estar paralizado viendo a un fantasma. Un fantasma del que te enamorarías profundamente hasta morir.
- Número uno: Si aceptan venir con nosotros eso quiere decir que están de nuestro lado y que somos un equipo. Número dos: Al aceptar su vida queda en juego a partir de ahora, ya no habrá vuelta atrás y posiblemente moriremos.
Y por ultimo la número tres: Cuando todo esto acabe, al llegar al final de la ronda todos nosotros quedaremos atados y sentenciados de por vida. Esto significa que si logramos acabar con la mafia de la familia Donquixote ni si quiera él mismo SPØ49 podrá protegernos-.
Hubo un momento de silencio entre ellos, solo era audible él sonido de la ciudad y los dos chicos trataban de procesar toda la información ¿que mas daba si morían en él intento? O si terminaban siendo ejecutados al final, si morirían habrían vivido lo suficiente para poder amar.
- Aceptamos- tras escuchar estas palabras provenir de sus "captores" los cuatro sonrieron a la par.
Él rubio y él ojeroso se acercaron lentamente y extendieron las manos en forma casi de saludo.
- Es un trato, acabaremos con esa familia aun que nos cueste la vida- así es como los cuatro asesinos sellaron un pacto que iba más allá de la vida.

Ese silencio se hacia cada vez mas incómodo en si, era él silencio de la ciudad después de un asesinato. Nadie sabe quien fue, y quien lo sabe jamás dirá nada.
- ¿A donde tienen planeado ir?- pregunto él rubio apagando su cigarro.
- Bien yo tengo un buen lugar para relajarnos, pero necesitamos un lugar para pasar la noche- dijo Kid guiñando un ojo.
- Nosotros nos encargamos de eso Mr. Skeleton-ya- haciendo él mismo gesto que él pelirrojo.

En él sur de Arcadia:

- ¿Los tienes identificados?-.
- Claro que si joven amo-.
- Bien, por que no dejare que esos dos acaben con esto tan fácil, les haré él honor de tener la muerte más gloriosa que existe-.
¿Quien eres?