Jugando a amarnos -KidLaw x ZoSan-

Capítulo 7 "Entre las sombras"

De la tormenta provengo yo, madure sin mas decir, sobreviví...
Lo que no tuve es lo que quiero hoy, como él amor brillando en mi, tenía envidia de sentirla, sin embargo sobreviví...
Me dirigí hacía donde todos los demonios van.

La habitación era pintada con los rayos del sol que entraban por las ventanas del cuarto.
- Ya estas despierto- dijo él pelirrojo oliendo él suave cabello oscuro de su compañero.
- Hay que levantarnos, tenemos muchas cosas que hacer- dijo él ojeroso levantándose aun con bastante sueño.
Él pelirrojo quería pasar mas tiempo con él cirujano de la muerte, así que rodeo con sus brazos todo lo que su musculoso cuepo pudiera cubrir.
- ¿Que tanto le ves a ese zapato?- dijo Kid notando que su compañero tenia la mirada fija en un zapato tirado en él suelo.
- Solo me quede en trance por que tengo sueño-.
- Entonces por que no te quedas un poco mas en la cama conmigo- tumbando a Law devuelta a la cama sin dejar de abrazarlo.
- ¿Por que haces esto?- pregunto él ojeroso recargando su cabeza en él pecho de Kid cubierto por una camisa azul marino de tirantes.
- Por que aún quiero seguir dormido-.
- Eso no idiota- respondió él ojeroso con una pequeña risita.
- ¿Entonces que?- pregunto él pelirrojo besando la frente del moreno.
No entendía por que se sentía así, nadie le había brindado este tipo de cariño antes. Entonces si era así ¿por que demonios se sentía de esta manera? Las caricias que él pelirrojo le brindaba tenían sentimientos, en cuanto cruzó mirada con él sintió él mismo deseo en sus ojos. Poseerlo todo, aun que apenas lo conocía, sabia que estarían atados para toda la eternidad.
- ¿Por que me tratas así?-.
- Te molesta que haga esto- dijo Kid dejando pequeños besos por todo él cuello del moreno.
- No, pero ¿por que lo haces?- Kid no entendía exactamente a que se refería Law, tratarlo ¿como? Como si lo deseara, como si fuera la única persona en este mundo.
- Por que te deseo Trafalgar- él pelirrojo dejo las caricias, pues pensó que había echado todo a perder al decirle que lo deseaba de esa manera o más bien en todas las hermosas maneras que se le venían a la mente.
- Entonces si me deseas tendré que arrastrar te hasta nuestra propia muerte Eustass-ya-.
- No me importa-.
No le importaba  si moría en él intento de apoderarse del moreno por que es lo único que anhelaba para seguir con vida.
- Por favor Law se solo mio, acabare con todo y con todos para tenerte yo no...-.
- Eustass-ya- sintió como si su voz se le cortara por las palabras de Kid.
- Yo no te dejare solo-.
Aún cuando todo él mundo le había tratado mal, cuando se le había arrebatado todo lo que quería y anhelaba, sueños y deseos que jamás se cumplieron. Entonces fue cuando apareció él, llenando su mente de palabras que jamás pensó que se le volverían a decir. Dios perdoname por esto.

Cuando ya todos se vistieron, y estaban completamente despiertos era hora de actuar.
- Bien, para derrotar a Donquixote Doflamingo y sus subordinados tenemos que infiltrarnos en él mas grande casino de Arcadia, no importa si hacemos una masacre- dijo él rubio tomando una taza de café con cierta expresión de rencor combinado extrañamente con asco.
- Entonces me parece bien, Kid y yo patearemos culos hasta saciarnos- exclamó él peliverde con una sonrisa que muy pronto se borro al notar las miradas caídas de sus dos compañeros, pero la que mas le importó fue la del rubio, que se notaba triste y enojado a la vez.
- ¿Que pasa?- Zoro se atrevió a preguntar, sabía que no recibiría una respuesta a la primera pero por algo sabía ser insistente.
- No es nada Zoro-ya- contesto serio y frío él ojeroso que se notaba disgustado por todo y cierto pelirrojo notó todo esto.
- Parecemos idiotas pero no lo somos, exactamente queremos saber todo lo que paso con ustedes- dijo Kid sentándose aun lado de Zoro.
- Eso no importa-.
- ¡Claro que importa!- exclamaron fuertemente él de cabello carmín y él de cabello verde al mismo tiempo.
- Solo queremos que escucuchen y mantengan la boca cerrada con lo que vamos a decir, en especial tu Eustass-ya- dijo Law guiñándole él ojo para indicarle que era una broma.
Sin más que decir él par de idiotas asintieron la cabeza apretando los músculos de la boca como si estuvieran guardándose las palabrotas que después saldrían de sus bocas.
- Empieza tu Kuroashi-ya-.
- Deja de llamarme así repudiador del pan- fruncio él ceño y dio un largo suspiro pues estaba a punto de contar lo que le generaba tanta rabia, dolor y llenaba su cabeza de sucios recuerdos...
- Todo comenzó hace aproximadamente cuatro años...