Doctora Steele

¿Me ha rechazado?

- Andrea cancela todas mis citas para esta tarde. No tengo la intención de desocuparme  temprano hoy. Has una reserva para dos en Canlis. Llama a Smith e infórmale que mañana es su último plazo.  Ni un día más. ¿Ya has programado todas mis citas con la doctora Steele?

- Si señor Grey. Todos los miércoles a las 15.30 horas – responde eficiente.

- Quizá añada un día más en la semana – tocó mi mentón – Lo confirmaré durante esta tarde – si todo sale como lo tengo previsto podría ver más de un día a la semana que tendré para verme con la exquisita doctora Steele.

- Muy bien señor – escribe eficientemente en su libreta – La señora Lincoln ha dejado un mensaje está mañana. Solicito que la llame durante el día.

Mierda. Esta semana tenía una cena con Elena y lo he olvidado por completo.

- Bien. Si vuelve a llamar infórmale que he estado algo ocupado. No puedo hablar con ella en este momento – Andrea abre sus ojos sorprendida – ¿Algo más?

- No señor Grey – sale de mi despacho, cerrando la puerta al salir.

No cabe duda que la señorita Steele me ha hecho perder la cabeza estos últimos días. Y es algo que me agrada. Si bien mantener el control absoluto de mi vida es algo que me me obsesiona, de pensar en otra persona durante el día es algo completamente para mí. Ninguna sumisa, ni siquiera Elena cuando empezamos nuestra relación sub fue así. La señorita Steele es un nuevo ejemplar en mi vida... y me gusta.

Veo la hora en mi reloj y siento un segundo fuera eterno. Ya quiero caer en la consulta de mi nueva psicóloga. Absolutamente todo de ella me llama la atención. El saber cómo ha decorado su consulta o como estará vestida el día de hoy, es una enigma una simple, pero para mí resulta gratificante averiguar.

¿Podría comprar un ramo de flores?

No seas idiota Grey. Tu no haces eso de las flores y demostraciones de galantería batatas.

No.

Que estoy pensando.

Debo presentarme y follarla hasta morir.

Sin embargo, por muy extraño que suene esto, con ella no me nace hacer eso. Bueno si me gustaría coger con ella, pero me resulta mucho más excitante conocerla. Saber que secretos guarda la pequeña doctora Steele.

Optó por dejar de seguir pensando en ella aunque sea difícil y me concentro en los próximos asuntos que debo tratar, hasta que lleguen las 5 de la tarde e ir con ella. Ya de solo imaginar estar sentado solo a unos pocos metros de ella mientas mantenemos una conversación sobre toda mi mierda me aterra, pero sabiendo que será ella, la idea se me hace cada vez menos desagradable.

¿Que tendrá la señorita Steele que me hace sentir tan expuesto?

Basta Grey. Control. Eso es lo que necesitas. Control.

Quizá deba pedirle a Elena una sumisa y olvidar toda esa mierda de estar absteniéndome de sexo durante un tiempo. Si. Soy un dominante y mi vida es eso. Si hablare con Elena, podría buscarme una mujer como me gustan o podría...

Anastasia Steele.

Su nombre en letras cursivas aparece solo en mi cabeza. Podría presentarle mi mundo, enseñarle todo lo que soy. No debo preocuparme por enseñarle sobre todo lo que hago en esa habitación. Ella es sexóloga, debe tener una vasta experiencia sexual para compartir conmigo. Juntos seriamos la perfección en la cama.

Si. La quiero hacer mía. Llevar al borde todos sus límites.

Decido por seguir trabajando y alejar todos esos pensamientos que últimamente han aflorado en mente.