11.

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Lu Han.

Habían pasado unas cuantas semanas de que habían trasladado a Minseok al hospital.

Hoy teníamos la mayoría exámenes finales y nadie, a excepción de Baek que era un súper cerebro y estaba eximido de la mayoría de las materias, podía quedarse con él. Fue un lío conseguir que el castaño se quedara con Minseok. Puesto que, su relación no era muy buena.

¿Estarían bien los dos en una sola habitación?

Sólo esperaba que no terminaran matándose. Me preocupaba más Baek que Minseok. Éste último le tenía un resentimiento horrible al menor por quitarle por completo su mejor amigo.

Mordí la goma de mi lápiz. Sólo me faltaba la respuesta de la pregunta número cinco, pero ésta no se dignaba a aparecer en mi mente. Maldita.

Miré a JongDae. Éste miraba a su alrededor desesperado. Sin BaekHyun ahí no tenía de quién copiarse. Su miraba de cruzó con la mía y pasó su mano por su cuello simulando que lo cortaba. Tenía ganas de reír, pero eso haría que me sacaran del salón. Volví a mi examen.

Necesitaba concentrarme.

¿Cómo le irá a SeHun en sus exámenes? ¿Habrá estudiado lo suficiente? El día anterior se había quedado vagando todo el rato. Simplemente se quedaba mirando un punto fijo como por tres horas. Y no hablaba casi nada.

«LuHan, concéntrate.» Me dije a mi mismo.

El timbre anunció el final del examen y las líneas de la pregunta cinco seguían vacías. Todos comenzamos a pasar las hojas con nuestro destino hacía delante. Me fije en la respuesta de la chica detrás de mí.

Era China. Menuda broma. Y se supone que yo soy de allá.

Me pegué en la frente con la palma de mi mano. Idiota.

Bueno, diez puntos menos no eran nada. ¿Cierto?

JongDae se acercó a mi asiento, saldríamos los dos directo al hospital.

— ¿Cómo sales en la prueba?— pregunté. Tenía alrededor de cuarenta puntos asegurados pero aun así me preocupaba.

—Sé que tengo cinco puntos. —me dio una sonrisa de pasta dental.

—JongDae, la prueba valía sesenta. —El sólo se encogió de hombros. Susurrando un "para la próxima estudio".

Dejé los libros que no necesitaba en mi casillero. Los demás llevaban los apuntes que le tenía que pasar a Minseok Hyung.

Junto con JongDae pasé a una cafetería y un emparedado con batido de durazno fue mi cena. Mi amigo se había comprado algo más consistente.

Pero a mí el dinero me comenzaba a escasear. No quería que mis padres se sobre esforzaran por mí. No lo merecía.

Debía hacer más turnos en el Lucky One si quería comer las semanas que venían.

Cuando llegamos al hospital ya había terminado con mi cena rápida. Entramos directamente a donde sabíamos Minseok se encontraría.

Sabía que no se llevaban bien pero lo que había cuando llegamos a la habitación era una completa algarabía.

BaekHyun le gritaba a un doctor que tenía a Minseok detrás de él. Y el doctor, no podía definir su expresión. Pero, parecía querer echarse a llorar como bebé. Minseok le hacía muecas y le sacaba el dedo medio a BaekHyun a espaldas del médico. Alborotando a la bestia.

El carraspeo de JongDae hizo a Baek darse cuenta de nuestra presencia soltó un suspiro

— ¡Al fin!—Le gritó al cielo.

¿Por qué Lu Han?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora