El juguetero |•YoonMin•|

Que se enamoró.

Yoongi tiene una pequeña tienda en la estación de trenes, casi escondida entre una tienda de accesorios para celulares y una tienda de ropa. Es en ese pequeño y llamativo lugar, que Jimin ve a la gente pasar y pasar durante el día y la noche.

En la vidriera de exhibición, se encuentran varios juguetes junto él, incluyendo al payaso, su nuevo y mejor amigo Taehyung. También hay un pequeño príncipe llamado Seokjin, pero todavía no logró que hablase, si sabía su nombre, era porque Yoongi se lo había contado cuando llegó a ese lugar.

Jimin todavía no entiende porqué está ahí, Taehyung quiere hacérselo entender.

—Yoongi nos venderá.— Dijo de la manera más seria posible.

—Ay, TaeTae, eres tan gracioso.— Se rió él.

—No es un chiste, Yoongi nos venderá, Jimin. ¿Por qué crees que estamos aquí?— Pero Jimin volvió a reír sin querer creerle a su amigo.

—No digas que no te lo advertí.

Tal vez Jimin debió hacerle caso a Taehyung, así tendría sentido el porqué algunos juguetes desaparecían y jamás volvían, así tendría sentido que Taehyung se haya marchado en manos de un niño pequeño con una enorme sonrisa, tan parecida a la de J-Hope, el caballito de madera.

Jimin estaba asustado ¿Eso pasaría con él? ¿Por qué Yoongi era tan cruel? ¿Por qué Taehyung sólo le dedicó una pequeña mueca antes de ser llevado?

Y es en la noche, donde ya no puede oír los chistes malos de su amigo el payaso, o verlo hacer cosas estúpidas para sacarle una sonrisa, que Seokjin se sienta a su lado, toma su mano y le da una sonrisa.

—Seré tu amigo.— Musita suavemente, casi con timidez al ser sus primeras palabras.

Y es que Jimin es un muñeco lleno de vida, tanta que hasta puede compartirla con el resto. Jimin es como el sol radiante en primavera, el chocolate caliente en invierno, las ojas secas de otoño y la playa en verano.

Si Yoongi lo supiera.

Seokjin es muy alegre y siempre lo hace reír con sus bailes raros y chistes del año donde nació la Legrand.

Pero su alegría no dura demasiado y su sonrisa día a día se va apagando, cada vez se mueve menos y sus palabras comienzan a desvanecerse.

No sabe bien cuando comenzó a ser así ¿Tal vez desde que ese chico visitaba la tienda de Yoongi y le traía una flor rosa cada día? O puede que sea desde que Seokjin encontró un nuevo amigo con quien compartir risas y anhelos.

Jimin lo escucha todos los días, ese "Me gustas mucho, Yoongi-hyung" que suelta aquel hombre de buen parecer.

Aunque pensadolo mejor, Jimin está seguro que su estado empeoró cuando escucho a Yoongi decirle "Jeongguk" al hombre de las flores. Jeongguk, su pequeño Jeongguk, ni siquiera lo miraba. Jimin quería creer que era porque Yoongi había pintado su pelo de plateado y le había hecho un traje parecido al de Seokjin.

—Me gusta mucho, Yoongi-hyung. Por favor, salga conmigo. — Jimin vuelve a escuchar.

—Han pasado cinco meses y aún no te rindes, todavía me traes estas estúpidas flores. — Y a pesar de que Yoongi finja que no le gustan, Jimin sabe que las tiene a todas guardadas en una cajonera.— ¿No te cansas, Jeongguk?

—No, porque realmente estoy enamorado de usted, hyung.

Jimin quiere gritar, suplicar y patalear para que no se besen, quiere romper todo, pero no puede moverse, su boca está sellada, sus brazos y piernas tiesas, se siente pesado y no puede dejar de mirar como los labios se funden y Yoongi se vuelve uno con su antiguo dueño.

Ahora Jimin vuelve a ser un simple muñeco a cuerda y no importa cuánto Seokjin y NamJoon, un rey, lo intenten, él permanece quieto, con sus ojos fijos en un único lugar.

Jimin está roto, pero no es algo que se pueda arreglar con madera y pintura, como cuando Jeongguk lo abandonó. No. Está vacío, no piensa, no siente.

No puede reprochar cuando un hombre lo toma de la vidriera y lo muestra ante Yoongi. Las manos del hombre son cálidas, grandes y suaves.

—Soy Chanyeol, hola Jimin, a partir de ahora nos divertiremos mucho juntos. ¿Está lloviendo?— Pregunta al aire cuando siente una gota en su mano.

Chanyeol no debe saber que en realidad era Jimin llorando.

Ese día Jimin pudo sonreír aún mirando a Yoongi a medida que se alejaba.

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Esto en realidad tiene un mensaje ¿Quién lo sabe? 😂

Esto fue todo, aunque en realidad al principio pensaba hacer que Jimin se volviera una persona de verdad (A lo pinocho) 😂 pero Belén sad, escribe sad😂

No miento del mensaje, hay uno 😂

ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO Y SINO VVV PORQUE VINO DE MI CORAZÓN DE HADITA 😂💕

Bye~