Un regreso inesperado - PAUSADA -

Capítulo 28

La cena fue bien, mejor de lo que pensaba. Después de oir la conversación de John con su padre no podía evitar pensar en lo que Phillip le había preguntado. ¿Por qué me había traído?  Sabía que aún sentía algo por mí, y yo creo que también, pero no quería que sus sentimientos influyeran en mi decisión, a pesar de que claramente lo hacían.

- ¿Y estudias, Katherine? - Preguntó el padre de John mientras cenábamos.

- No. Terminé la carrera este año, soy arquitecta. Trabajo en Lincoln S.L. - Contesté levantando la mirada del plato.

- Vaya, es una empresa muy conocida en América. Debes ser muy buena  ¿Y cómo te va? ¿Te gusta el trabajo? ¿Es lo que esoerabas? - Preguntó sonriendo.

- La verdad es que llevo muy poco tiempo en la empresa, pero me gusta el trabajo, además que la gente es muy amable, me acogieron muy bien.  - Contesté con una gran sonrisa. En aquel momento me acordé de Sam, y recordé que no le había hablado para saber qué tal iba el proyecto.

- Me alegro mucho. Supongo que lo sabrás pero John tiene pensado acabar la carrera de piloto aquí. - Comentó mirando feliz a John. Yo también lo miré y vi como sonreía de felicidad al ver como su padre estaba orgulloso de él.

- Me lo comentó. Estoy muy feliz por él, ha querido acabar la carrera desde hace tiempo. - Miré a John y él posó su mirada en mí y me sonrió con ternura.

- Así mi nieto podrá llevarme de viaje a todos los sitios que aún no he podido visitar. - Dijo Nana riendo. Todos nos reimos.

Una vez acabamos de cenar y recoger todos los platos John me comentó si quería salir con él y unos amigos suyos a tomar unas cervezas. Sinceramente me apetecía salir y visitar Londres, ya que nunca había estado, pero también quería que disfrutara un poco de sus amigos. Por eso le dije que no hacía falta, que fuera él solo, que seguro que querría estar solo con ellos para ponerse al día, pero insistió en que quería presentármelos.

- Venga Kat, vente. Todos quieren conocerte, ya les he dicho que vendrías. Además, ¿qué vas a hacer aquí sola sino? ¿Aburrirte con mi padre y mi abuela?

- Tengo que llamar a Sam y que me cuente como va el proyecto. - Contesté sacando el pijama del armario.

- Ya es muy tarde, llama mañana. El trabajo puede esperar. - Susurró cerca de mi oido. Me cogió por la cintura y pegó su pecho a mi espalda.

- John...

- Kat, quiero pasar todo el tiempo que pueda contigo, aunque tenga que secuestrarte. - Contestó separándose de mi. - Creemé, soy capaz. - Me giré nerviosa y lo vi sonriendo y mirándome.

- Está bien, pero deja que me cambie de ropa, no puedo salir así. - Dije mirándolo. Llevaba unos vaqueros rotos, una camiseta blanca de manga corta, la biker negra y una zapatillas blancas.

- Nena, estás perfecta. Vámonos.

- No me llames nena. - Dije señalándolo. Cogí el bolso y salí por la puerta.

- Vale nena. - Contestó riéndose.