Facetas ~Jikook~.

De vuelta a casa.

Jimin.

-Estas seguro de que quieres volver a Corea hijo. Estaba una vez más discutiendo lo mismo con mi mamá, no quería dejarme ir tan fácil a Corea y que aquellos recuerdos que tanto me atormentaron durante años ,volvieran a mi memoria. Tuve que asistir la mayor parte de mi infancia y adolescencia a terapia psicológica, para tratar de   aquellos traumas que tuve por la violencia intrafamiliar que sufría a mis ochos años de edad. Con el paso del tiempo pude sanar esa gran herida que tenía, perdone a mis padres biológicos. Ya casi todo estaba en el pasado pero aún hay un motivo en específico que me ata a Corea. el cual tiene nombre y apellido Jeon Jungkook,aquel niño que conocí en el orfanato, el cual hizo que volviera a comunicarme con el mundo exterior ., deseo y anhelo volverlo a ver.

-Mamá, ya lo hemos discutido miles de veces y sabes que mi respuesta sigue siendo la misma.- baje la última de mis maletas que se encontraba en la parte alta de mi ropero, para poder terminar de empacar mis cosas, en unas horas más saldría mi vuelo y con las distracciones de mi madre, seguramente el avión despega sin mí.

-Pero hijo, estaré muy preocupada de que estés tan lejos, entiéndeme Jimin, es la primera vez que te van tan lejos.

-Mamá, sabes que no estaré solo haya, estaré con hyung Hope, además ya no soy un niño pequeño.

-Tu siempre serás mi bebé, aunque yo no te haya traído el mundo, sabes que eres mi adoración Jimin.

-Sabes que siempre estaré agradecido de que tú seas mi madre, yo también de adoro mamá, pero mi decisión no cambiara iré a Corea. Además puedes irme a visitar o yo vengo, todos los días podemos hablar, así que no piense en la distancia que nos separa mamá.

-No será lo mismo hijo.- se acercó y me envolvió en caluroso abrazo maternal, al cual obviamente recibí gustoso, aun no me iba y ya la estaba extrañando.

Desde el día que tuve que dejar el orfanato y venir a Estados Unidos a vivir con mis nueva familia y con mi nuevo hermano, mi madre fue la que siempre me cuido, protegió, consoló en todo momento al igual que me consintió en algunos que otro de mis caprichos. Dice que desde que me vio, quedo encantada conmigo, por eso decidió adoptarme junto con Hope mi hermano mayor.

Después de ese abrazo y una que otra lágrimas de melancolía por lo que pasaría en unas horas, termine de empacar mis pertenencias. Baje las escaleras mientras examinaba toda la casa recordado cada momento que viví aquí, un sentimiento de nostalgia invadió mi corazón, el cual se apretujo por un momento. Sin embargo recordar el motivo de mi regreso me hacía inmensamente feliz, porque tengo esa pequeña esperanza de volverlo a ver. Me despedí de mis padres antes de salir de la casa y dirigirnos al aeropuerto.

Vuelos con destinos a Corea, por favor acercarse a la línea de abordaje.

-Ahora si ya me tengo que ir.

-Adelante Jimin, no quieres que te deje el avión o si hijo.

-Claro que no, por favor papá cuida de mi mamá., manténganse saludables.

-Tú no te preocupes de nada cuidare de tu madre, en cuanto llegues y estés instalado en Corea nos avisa hijo.

-Por supuesto que si padre.

-Adiós mamá.- me acerque y con mi dedo pulgar le limpie las lágrimas que comenzaban a brotar de sus hermosos ojos marrones.

-Mi Jimin adiós mi bebé, vete antes de que me arrepienta de dejarte irte con Hoseok.

-Les prometo que vendré en las vacaciones a visitarlos.

-Tu madre y yo confiamos de que cumplirás tu palabra.

 Aborde el avión y me quede dormido casi desde que el avión despejo, sería un largo viaje, trataría de descansar lo más posible que se pueda. Me preguntaba y me imagina una y otra vez si Jungkook habrá cambiado mucho desde la última vez que lo vi, espero que aún me pueda reconocer.

Después de alrededor de diecisiete horas de viaje, estaba pisado tierra Coreana después de 12 años de haber alejado de mi lugar de origen.

Tome mis gafas de sol y me las puse antes de salir del aeropuerto, iría a tomar un taxi para dirigiré al que desde hoy sería mi nuevo hogar.

Pare un taxi que estaba escasamente a dos metro de distancia de donde yo estaba, agarre mis maletas, para meterlas en la cajuela del automóvil. El taxista se bajó a auxiliarme. Cuando iba a tomar la manija para abrir la puerta trasera de carro, alguien me toco el hombro y me voltee inmediatamente, era un hombre más alto que yo, ojos color negro, los cuales estaban inmensamente tristes y perdido, sus facciones estaban muy pronunciadas a kilómetros se le nota que debajo de toda esa ropa había un cuerpo escultural y bien trabajado.

-Disculpa este es mi taxi, puedes esperar a que otro venga.

-Cómo es que ni siquiera me reconociste mochi.

-Tu como sabes que ese es uno de mis tantos apodos.

-Sera porque yo te lo puse.- no podía creerlo estaba justamente enfrente de Jungkook, como es que no pude reconocerlo.

-Jungkook... en verdad eres tú.