Facetas ~Jikook~.

Encuentro inesperado.

Pare un taxi que estaba escasamente a dos metro de distancia de donde yo estaba, agarre mis maletas, para meterlas en la cajuela del automóvil. El taxista se bajó a auxiliarme. Cuando iba a tomar la manija para abrir la puerta trasera de carro, alguien me toco el hombro y me voltee inmediatamente, era un hombre más alto que yo, ojos color negro, los cuales estaban inmensamente tristes y perdidos, sus facciones estaban muy pronunciadas a kilómetros se le nota que debajo de toda esa ropa había un cuerpo escultural y bien trabajado.

-Disculpa este es mi taxi, puedes esperar a que otro venga.

-Cómo es que ni siquiera me reconociste mochi.

-Tu como sabes que ese es uno de mis tantos apodos.

-Sera porque yo te lo puse.- no podía creerlo estaba justamente enfrente de Jungkook, como es que no pude reconocerlo.

-Jungkook... ¿en verdad eres tú?

-Hoy desperté siendo Jungkook, entonces, si soy yo.- dijo mientras se reía, yo solo me limite a golpear su hombre y a reír con él. Era contadas las ocasiones en las cual yo escuche a Jungkook reírse y esas pocas veces que lo llegaba hacer, me sentía sumamente feliz.

-Lo siento nochu, yo te recordaba un poco más bajo, bueno ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nos vimos, lo siento por no reconocerte.

-Me dueles Jimin, en verdad.- dijo mientras lleva su mano derecha a su pecho.

-Dije que lo sentía.-

-¿Ya decidieron quien va abordar el taxi?.- una tercera voz hablo llamando la atención, haciendo que ambos saliéremos por unos segundos de nuestra pequeña burbuja en la cual ambos estábamos sumergidos.

-Si claro ambos iremos.-

-Espera Jungkook, nunca me lo consultaste, hay alguien que me está esperando, tengo que ir allá primero.-

-Súbete al taxi Jimin.- vi como sus facciones se habían enrudecido un poco, lo cual provoco que mi piel se pusiera como de gallina.

-Si claro.-

-Solo vamos a comer y después yo te llevo a donde necesites.-

Jungkook le indico al conductor que nos llevara a un restaurante, gran parte del camino no hablamos, solo nos limitamos a mirarnos de reojo de vez en cuando. Ambos éramos orgullosos desde niños y sabía que iba a ser difícil que alguno de los dos cediera tan fácilmente. Saque mi celular y le mande un mensaje a Hope.

Hey men!

Llegare un poco después, lo siento hermano. Si llama mamá no le digas nada por favor.

OK, yo no diré nada. No tardes...

Apague mi celular y lo volví a guardar en mi mochila. Después de ver la forma en que Jungkook me hablo, una parte de mí me decía que huyera, pero sin embargo la otra no le importaba lo que podría suceder...

-Jimin yo lo siento, no debí de haberte hablado de esa manera.-

-No te preocupes.- por un momento tuve un recuerdo de nosotros cuando estábamos en el orfanato.

Flash back.

-Déjame en paz Jimin, no quiero verte.-

-Pero, pero yo no te hice nada.- mis ojitos se empezaron a humedad y mi voz a romperse.

-Odio a todos, también te odio a ti.- me aventó una de las almohadas de su cama la cual fue directamente a mi rostro.

-Yo no puedo odiarte Jungkook.- solo termine de decir su nombre y un segundo después yo estaba llorando. Ambos sabíamos a la perfección que era sentirse odiados, nunca me importo que los demás niños del orfanato me digieran que me odiaran ya me había acostumbrado a sus malos tratos, pero que lo dijera Jungkook era diferente, porque yo en verdad lo quiero.

Salí corriendo de los dormitorios y me fui a esconder atrás de las bodegas que tenía el orfanato. Me hinque y abrace mis piernitas y hundí mi cabeza entre ellas y comencé a llorar.

Las palabras hieren solo cuando te importa la persona quien te las dice.

Ya se estaba oscureciendo, tenía un poco de miedo de estar solo, cuando ya está tomando un poco de valor para irme Jungkook apareció con una taza de chocolate.

-Ten tomate el chocolate, ya está un poco frió, porque pase un buen rato buscándote.

-No quiero nada.- en verdad quería tomarlo, mi cuerpo tenia frió y comenzaba a temblar por lo mismo.

-Tómalo estas muriendo de frió.- 

-¿Ya no me odias?-

-Yo no te puedo odiar Jimin.-

--Jimin yo lo siento, no debí de decirte esa mentira, solo que ya estoy cansado de lo mismo.-

-No te preocupes Jungkook, tú no les debes de hacerles caso a ellos. Yo te quiero nochu.-

-Nochu quiere a Mochi.- se sentó junto a mí y me dio un beso en la mejilla.

Fin del flash back.

-Ya llegamos Jimin.- tome mi mochila y baje del auto, Jungkook me ayudo con mis maletas y entramos al restaurante, no tenía ánimos de estar ahí pero solo por él permanecía ahí.

-Ya vivirás de nuevo en Seúl?.- dijo mientras yo leía la carta para poder ordenar.

-Mmm si ya viviré aquí con Hope, mi hermano.-

-Me alegra saberlo Jimin.-

-¿Tú habías salido de viaje?-

-Si tuve que ir a Nueva York a cerrar un contrato.-

-Woow me alegro por ti Jungkook.-

-Gracias supongo Jimin. Nuestros encuentros siempre son inesperados Mochi.-

-Supongo que por algo pasan las cosas.Te eché de menos todo este tiempo.-

-Yo también Jimin no te imaginas cuanto lo hice.- con esa oración mi corazón se aceleró, Jungkook me había extraño al igual que yo y eso me hacía feliz.

-Lo siento por haberme tardado tanto en regresar Jungkook.-

-Prométeme que esta vez no te iras de mi lado.- tomo mi mano izquierda y la entrelazo con la suya.

"Es arriesgado" decía mi razón.

"inténtalo" susurraba mi corazón.

-Nunca más lo haré lo prometo...

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Hola, primero que  nada quiero disculparme por estar tanto tiempo ausente, la universidad en verdad me esta absorbiendo mucho. Pero pronto volveré actualizar un poco mas seguido.

Muchas gracias a todas las personas que están leyendo  y votando en verdad se los agradezco.

Perdón si el  capitulo no es nada interesante, pero ya no podía estar mas tiempo sin actualizar la historia. 

Hasta luego