Se dice que lo que está bien visto es lo que hace la mayoría; se dice que lo que es apropiado es seguir las reglas sin pensar de dónde vienen; se dice que hay que aceptar nuestra posición y que no hay manera de cambiarla. ¿Sos niño? Jugá. ¿No lo sos? Dejá de hacerlo, tendrías que haberlo hecho en su momento. ¿Sos mujer? Ocupate de criar hijos y limpiar la casa. ¿Sos soltera? Pobre... ¿Sos hombre? Andá a trabajar, y no llores, porque los chicos nos lloran. ¿Sos pobre? No tenés manera de salvarte de eso. ¿Sos rico? Seguro sos un garca, ¿a quién le robaste la plata? ¿Sos artista? Seguro sos un vago hippie...¿De qué vas a vivir? Te vas a morir de hambre. ¿Soñás en grande? Sos un loco.
¡Cuántos arquetipos! ¡Cuántas injusticias! ¡Cuántas mentiras! Crecemos creyendo que están bien, y que la vida es así y hay que aceptarlo. Muchos no se fijan en lo importante que es cambiar este pensamiento ortodoxo que nos ciega, y pensar que las diferencias no nos deberían dividir, sino unirnos, mediante la empatía hacia el otro. Pensar que el que decide tomar su propio camino, completamente distinto al resto, no es un ''rarito'' sino un genio que se atreve a ir en contra de la corriente de esta sociedad que finge ser homogénea, cuando en realidad nadie es igual a nadie. Seguimos una moda, queremos una manera de vida como la que nos muestran en las revistas, en la tele, en Internet, mientras nuestros días pasan sin ser realmente aprovechados por nosotros; porque miramos al otro, queremos siempre lo del otro, y no vemos todo lo hermoso que nos rodea, y lo afortunados que somos. Debemos tratar de ser la mejor versión de nosotros mismos en vez de tratar de ser una copia, sea barata o cara, de otro. Es uno de los primeros pasos que nos llevan a la felicidad y plenitud en la vida: ser nosotros mismos sin importar lo que digan o hagan los demás.
También, debemos analizar lo que creemos pensar, si es realmente nuestra opinión o simplemente una construcción social que nos impusieron desde chicos. Tenemos que razonar lo que es ''común'' para el ojo de todos, y fijarnos de qué otra manera podría llegar a llevarse a cabo, buscar nuestro propio camino, ya que no hay un solo método para alcanzar la felicidad por hacer bien las cosas.
Que no te digan qué ser; cómo ni por qué; tampoco cuándo ni dónde. Hacé oídos sordos a las críticas negativas, pero tomá en cuenta las constructivas. No te dejés llevar por lo que la mayoría crea que te haría quedar bien, es ''cool'', está a la moda, o todas esas estupideces. Muchas veces el ''nerd'' termina siendo el jefe de los que lo burlaban; el ''rarito'' una persona exitosa que presentó algo diferente al resto y se destacó; el ''trolo''/la ''torta'', consigue a alguien con quien compartir felizmente su vida. Y todo eso se logra siguiendo un objetivo claro y poder cumplirlo sin influenciarse con la mierda de los demás.
Que las voces que tratan de tirarte para abajo sean las que te enseñen a ir a contracorriente y ganarles; que los que te golpean se den cuenta de que no te duele; que los que te critiquen se enteren de que eso solo te genera fama y satisfacción; que siempre sigas tus sueños por más que se burlen de vos... Ese es mi consejo.
Un consejo que cuesta llevarse a cabo, pero con el tiempo crecemos y nos damos cuenta de lo que realmente importa y lo que nos fortalece y nos hace ser mejores personas cada día.
Seamos quienes somos, no quienes quieran que seamos.
Seamos ''alguien'' y no uno más del montón.
Seamos ''especiales'' por ser los únicos que tenemos la valentía de mostrarnos al mundo tal cuál queremos.
Mailén Latorre
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✨Verdades verdaderas ✨
Novela Juvenil✨Yo, Mailén Latorre, volqué sensaciones, experiencias, sueños, aprendizajes, consejos, emociones, fracasos, recuerdos, personas... mi vida, en éste, que es mi primer libro, "Verdades Verdaderas", y espero que sea el desencadenante de muchos libros m...