Pendientes de lo que dirán, nos olvidamos de vivir. Pensando en cómo vestirnos, nos olvidamos de vivir. Atados a una rutina, nos olvidamos de vivir. Fijándonos qué hora es, nos olvidamos de vivir. Tratando de ser perfectos, nos olvidamos de vivir. Discutiendo con otro, nos olvidamos de vivir. Criticando al que piensa distinto a nosotros, nos olvidamos de vivir. Esperando con ansiedad que llegue algún momento, nos olvidamos de vivir. Quejándonos de la vida que tenemos, nos olvidamos de darnos cuenta de que eso no es vida.
Creemos que la vida es el tiempo que pasa por al lado nuestro sin darnos cuenta, si total el tiempo sobra. Y no es así. Uno nunca sabe cuándo terminará su vida, por lo que deberíamos aprovecharla al máximo. Muchas veces perdemos horas y horas haciendo nada, si total al día siguiente lo podemos hacer, pero, ¿quién te asegura ese mañana? ¿cómo sabés que vas a estar ahí para hacer eso que no estas haciendo ahora? Muchas veces posponemos actividades u obligaciones porque no le damos el valor al tiempo que pasa, pero deberíamos hacer como dice la frase ''no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy''. Muchas veces nos faltan ganas para hacer algo, mientras que otro puede estar muriendo de las ganas de poder llevarlo a cabo, nosotros desperdiciamos esa posibilidad que tenemos, pero que no la valoramos por el simple hecho de que sea nuestra. Cuando a uno le falta algo, recién ahí se da cuenta de lo importante que es; cuando lo tenemos en nuestro poder, ya no nos importa tanto; y cuando lo perdemos, lo añoramos. Sí, todo se pierde en algún momento porque nada es para siempre. A veces no le damos para adelante con relaciones o sueños porque le tenemos miedo a perderlo una vez después de haber llegado a eso. Lo que no entendemos es que si no damos ese paso adelante, nada ni nadie lo podrá hacer por nosotros. Si no damos ese paso adelante, nunca sabremos qué podría haber pasado.
Y acá estoy yo, sintiéndome una hipócrita escribiendo estas palabras. Porque en algunos momentos también siento miedo; porque tengo días en los que me sentí insegura; porque muchos pasos no los di porque estaba en mi zona de comfort. Nadie es perfecto, ni nadie es invencible, pero lo que sí sé es que de esos momentos de debilidad aprendí y mucho, y me marcaron, sino no estaría dedicándole este espacio en estas hojas.
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✨Verdades verdaderas ✨
Ficção Adolescente✨Yo, Mailén Latorre, volqué sensaciones, experiencias, sueños, aprendizajes, consejos, emociones, fracasos, recuerdos, personas... mi vida, en éste, que es mi primer libro, "Verdades Verdaderas", y espero que sea el desencadenante de muchos libros m...