Capitulo 1

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Entre a mi habitación con las lágrimas corriendo por mis mejillas, maldito amor, ¿porque tuve que caer?, ¡¿porqué tuve que ser tan tonta?! Tomé mi maleta color negra con estampados floreados del closet, ¡me voy! Si, se que no es muy valiente de mi parte pero, a la mierda. aventé la maleta a mi cama, abrí los cajones y empecé lanzar ropa a la maleta. Cerré con intrepidez el cajón y por estupidez de mi parte me golpee el dedo indice -mierda- grite y lleve mi dedo a la boca, ¿esto no podría estar mejor? Mire mi laptop en el escritorio y suspire.

Me senté frente al escritorio y la encendí, suspire y mordí mi labio inferior, moví mis brazos y mi cabeza, empece a golpear las teclas con rapidez:

El amor querida amiga es una completa y total mierda, ¿porque? Pues no es una pregunta difícil de responder, el amor es una mierda porque te vuelve dependiente, débil, ciega y sobre todo estupida. debes saber que esta científicamente comprobado que el amor es innecesario y una perdida de tiempo y cuando digo científicamente comprobado me refiero a mi, quien mas que yo para advertirte, si ya soy toda una experta en este campo, pero ¡hey! Si no me crees, te contare mi hermosa y maravillosa historia de amor, así que acomodate y ve por una malteada, y disfruta de mi desgracia amorosa...

Empecemos:

Todo comenzó en un hermoso día de primavera, los arboles verdes, los pajaros cantando, el aire fresco y la hermosa vista de Los Angeles California todo un poema, ¿cierto?

Hoy era un día importante, un día que iba a significar mucho para mi y que iba a ser pieza clave para mi futuro, había viajado hasta aquí desde Nueva York para aplicar en la universidad de mis sueños: La universidad de arte de Los Angeles California, UALA, desde siempre había soñado con estudiar literatura en UALA, graduarme, tener una carrera de escritora y ser feliz, claro, los chicos no entraban en esa lista de metas, no quería tener distracciones y sobre todo no ilucionarmé, mi abuela decía con su voz débil y ochentona "confía en tu intuición Dan, piensa primero en ti y sobre todo, se feliz, no cometas mis errores, mi niña" y claro eso iba a hacer.

Camine por las calles de esta hermosa ciudad, ¡esto es un sueño!, llego a la entrada de la universidad y no puedo evitar hiperventilarme

-mierda- dije saltando de emoción, al fin había llegado, ¡no puedo creerlo!, corrí emocionada hasta la entrada, este lugar era hermoso, la forma elegante del edificio la puerta de entrada y el living, miré el lugar con la boca abierta, mis pies me temblaban ¿y si no logro entrar?, ¿y si entro pero me va mal?, ¿Y SI NO LOGRO MI OBJETIVO?. No, vamos, has llegado hasta aquí, eres asombrosa, ahora sube ese animo, levanta los hombros, levanta el trasero y camina como modelo de revista; obedecí a esa voz interior, caminé por los pasillos como toda una ganadora, y ahora que ya tenía la actitud, ¿donde mierda esta la dirección?

Miré hacia todos lados evitando verme como una perdida, aunque si lo estaba, solo necesitaba a alguien que me ayudará a encontrarla.

-vamos, no seas así eres un imbécil, pobre chica- escuché una voz masculina, ronca y con acento ingles caminar detrás de mi y una sonrisa se formó en mi rostro, ¡¡aleluya!!

Me di la vuelta con una sonrisa para encontrarme con esa persona, suspire al verlo, era un chico alto, de tez pálida, cabello rubio con toques castaños y largo que recorría todo su cuello cubierto por lunares, labios rosados y ojos verdes -valla eres mi salvación- sonrío ampliamente. Ouh que chico tan lindo, tal vez mejor pueda ayudarme a encontrar un lugar para conocernos mejor, si saben a lo que me refiero; que rayos, ¡no pienses eso!

-ya veo- dijo riendo macabro, ¿macabro? -¿que necesitas?- dijo con su elegante voz, parece muy amable pero tenía una mirada arrogante que inmediatamente me hacía odiarlo.

-¿sabes donde esta la dirección?, digo ya debes saber porque estudias aquí- balbuceé divertida

El rió y wao, ¡que hermosos y blancos dientes! -eso es fácil- señaló a su izquierda -¿vez ese pasillo?- me miró y asentí -solo siguelo hasta el final, no dobles, veras una puerta color verde, es esa, gritas ¡recepcionisto!, y el te ayudara

-¿recepcionisto?- dije riendo -¿porque no recepcionista?- pregunto divertida

-porque la "a" es femenina lo que suena muy sexista, y pues quien está en la recepción es un hombre, ¿entiendes? -los chicos a su lado reían- Es complicado, el director esta en contra de ese tipo de cosas- me guiña un ojo -ya sabrás porque- rió y se fue ¿Solo así? que extraño yo pensaba que iría conmigo.

Suspire y seguí las instrucciones de el chico guapo y con brillante sonrisa, caminé y caminé por el largo pasillo con las miradas de todos los estudiantes en mi, claro los que estaban en ese pasillo.

Llegue a la puerta verde, muy desgastada y pequeña para ser una dirección, esperaba algo mas grande y con cristales transparentes como los de mi antigua escuela. Entre como me había dicho el chico y grite -¡¡recepcionisto!!- a todo pulmón, ¿exagerada? Si, suelo serlo.

Abrí mi boca al ver el lugar, ¿que mierda? ¡Esta era la habitación del conserje!, diablos, el hombre me mira preguntándose si estaba loca o algo por el estilo -¿puedo ayudarla señorita?- me pregunta el conserje

Tragé saliva y reí como tonta -¿usted no es el recepcionisto?, lo siento- sonrío tontamente y me despido con mi mano, salí rápido de ahí, maldito chico británico ¡Te matare!

Suspiré y caminé lentamente alejandome de la supuesta dirección, hasta que -espera- escuché al conserje detrás de mi -ven te llevare a la dirección- dije y caminó delante de mi

¡Al fin un poco de humanidad!

(...)(...)

-cree usted que tiene lo necesario- decía el hombre mayor con su expresion madura, sus abundantes cejas castañas y su gran bigote me hacen sentir intimidada, el hombre se sentó frente a mi en su sillón negro.

-pues, ya estoy algo preparada en el campo de literatura- dije tratando de parecer interesante, el señor me miró como si analizara mi alma, quería más , ¿estar 'preparado' no es suficiente?, moví mis dedos nerviosa buscando algo que sea interesante para contar -estuve en un grupo de escritura, una vez hicimos el libreto de una obra...- ¿más? -gané el tercer lugar en un concurso de cuentos a los 13 años- ¡esperen! Si digo esto el no pensara que... que hay mejores

-¿eso es todo?- dijo como si no he dicho nada que sea de valor. Tragé saliva aún muy nerviosa, ¡ya la he cagado! -es que no veo que lo sientas, vienes y me dices todo lo que has hecho, que no es mucho; y me pregunto si de verdad lo deseas, si tienes la disposición- auch -siento que no tienes presencia, que no te harías notar, hay personas que están esperando un solo descuido de tu parte- dijo señalando la puerta.

-dejeme demostrarle que puedo hacerlo- lo miré sincera, el suspiró y se levantó de su asiento para después mirar por la gran ventana de la dirección dándome la espalda.

-no lo se, los jóvenes aquí....- dice y lo interrumpí

-vine desde Nueva York, para aplicar aquí, he ahorrado casi toda mi vida para viajar aquí- dije con intensidad y desesperación -tener una beca, comprar útiles y libros escolares, leer todos los libros de esta universidad, así que ponga su elegante trasero en ese suave sillón, deme un consejo muy practico y una oportunidad- dije aumentando cada vez más mi tono de voz y cuando caí en cuenta de que estaba gritándole al director tapé mi boca, el director volteo de golpe y me miró asombrado.

Mierda.........

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Evitando Al AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora