Would You Play With Me? (G!P)

5

Lauren

Alguna vez dije que si iba a salir con alguien, no importaría si no era compatible al 100 conmigo, después de todo, lo que yo quería era a alguien a quien amar mucho, pero con lo que pasó con Camila hace tiempo, esa manera de pensar que tenía se esfumó.

Comencé a poner mis propias reglas en la mesa de juego, si esas reglas no se cumplían, todo el esfuerzo iba a ser lanzado al acantilado por mí, sin piedad alguna.

Las reglas eran simples:

•Ser una persona interesante.

•No mostrar otra clase de interés como dinero y cosas por el estilo.

•Respetar mi pasado.

Pero sobre todo la regla de oro:

•"Jugar cada que Lauren lo deseara..."

De tantas chicas que me restregaban el culo, solo una logró cumplir absolutamente cada regla al pie de la letra. Ariana.

Ella se había convertido en la señorita de Jauregui después de varias citas y noches a solas en casa de sus padres, Ariana había sido la única chica que había logrado llamar mi atención después de mucho tiempo. Saciaba mi sed con ella, descargaba todos mis sentimientos y emociones. Todo lo que tenía guardado dentro de mí era descargado sobre el pequeño y frágil cuerpo de Ariana.

Así es, en cierta parte utilizaba a Ariana para desquitar todo lo que sentía. Realmente no estaba del todo segura si ella estaba consciente de ello, simplemente, éramos novias ante todos los demás. Yo quería tragarme ese cuento de igual manera.

Quería arrancarme todo el dolor que alguna vez sentí por la muerte de la única mujer que había amado con cada maldita fibra de mi jodido ser, y ser una persona normal otra vez, pero no podía, simplemente...no podía.

Los días con Ariana eran sin duda los mejores, en ocasiones solía olvidar lo sucedido con Camila y sin pensarlo, disfrutaba el momento, me reía, hacía bromas, era como si en pequeños lapsos de tiempo Camila se alejara de mi cabeza. Aunque aún existía ese algo que me gritaba que Camila iba a volver y eso...era lo único que me hacía perder la cabeza ante todo.

Ariana: Lauren, ¿te he dicho cuanto te amo?-decía ésta mientras acariciaba mi abdomen desnudo

Lauren: Sí, y me agrada saberlo...-sonreí ante aquel tacto ajeno

Ariana: Eres increíble.-suspiró mientras sus ojos se cerraban lentamente en señal de cansancio.

Lauren: ¿Alguien se cansa rápido después del sexo?-reí

Ariana: Tonta...-hizo una mueca aún con los ojos cerrados

Lauren: Duerme pequeña, mañana será un largo día.

El día siguiente sería el día en el que Ariana y yo veríamos en que universidades nos aceptaron para el intercambio, era una oportunidad que sólo se les daba a estudiantes con un alto promedio en la mayoría de las materias, y en ésta ocasión a mi novia y a mí nos había tocado la oportunidad de ser seleccionadas. Ambas nos habíamos esforzado mucho para esto, aunque Ariana se había esforzado aún más, ya que su sueño era salir del continente a explorar nuevos lugares, eso era algo que ella y yo teníamos en común, así que esperábamos con ansias haber sido seleccionadas en la misma universidad. Al amanecer, me aseguré de tener aún dormida a Ariana, para así yo poder hacer el desayuno, hacerla sentir bien y llena de motivación. Ella era una chica que valía la pena, lo era realmente. Así que ciertas veces me encargaba de hacerla sentir la mujer más feliz de todas, no lo negaré, sí, me gustaba mucho Ariana, pero no estaba enamorada de ella, o al menos no del todo. Todo lo que hacía era para llevar mi vida "normal", tal y como habían dicho mis amigos, mi familia y cientos de psicólogos.