Capitulo 27. Te cielo

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ya en los angeles, andrea sentia sus parpados pesado, su cuerpo como si llevara una gran carga encima, notaba sus pies un poco inchados y sentia esas costantes nauseas esteblecidas en su garganta.  el vuelo de regreso y esa semana en australia fue demasiado intensa, lo por era que tendria mañana su exposición para luego al dia siguiente tomar otro avion a casa de samuel en miami, segun samuel ahí durarian una o dos semanas mas para luego entrar de lleno en su trabajo. andrea tendria muchas cosas mas pendiente con el lanzamiento de su escultura, sabia que asi seria y el tenia otro libro en mente que aunque apenas hace menos de un mes publico el primero, sabia que este gustaria mas, mucho mas

andrea: necesito dormir... siento como si un camion lleno de elefantes me paso por encima... estoy tan cansada -se quejo mientras recostaba su caeza sobre el hombro de samuel-

samuel: ya casi llegamos... ya veo que si te cansas -sonrio ante el estado de andrea-

cuando llegaron a casa, esta se arrastro casi todo el camino hasta la cama, samuel saldria porque tenia unos cuanto asunto que resolver, pero de inmediato andrea lo detuvo

andrea: bombón -se escucho con voz cansada- podrias traerme una oreo por favor

samuel: ¿no que ibas a dormir?

andrea: siiii -alargo la i en un tono cansando- pero quiero una oreo.... please... complaceme

samuel: si eso te hace feliz... en un rato regreso, nunca traemos oreos en las compras, tendre que ir a comprarlas, ¿puedo dejarte sola? ¿estaras bien?

andrea: siiiii... ve por mi oreo... trae muchas, muchas, unos 20 paquetes y asi no tienes que volver por un tiempo

samuel: bueno... -dijo, se acerco a ella, beso su frente y salio de la habitacion-

el resto de la tarde transcurrio justo asi, andrea durmio hasta el anochecer, ceno junto a samuel, poco porque sentia que su estomago en cualquier momento lo devolveria, hablo un rato con el de cosas sin sentido. su complicidad era unica, samuel de por si sabia que andrea era perfecta, la indicada, pero el dia de mañana iba presentarla delante de su familia, no sabia como se la fueran a tomar ellos,  prefirio no pensar en ello y mejor seguir disfrutando de esa sensacion que le provocaba tenerla enntre sus brazos, acunando su cabeza sobre su pecho mientras con sus manos rodeaba su vientre estrañamente ya no tan plano

andrea todo sus achaques lo atribuyo al viaje, al insidente que tuvo con la langosta, a lo pesado de ese dia y a los nervios que le producia saber que a lo mejor ya mañana todo el mundo conoceria mas a fondo su talento, entre los brazos de samuel, sintiendo su repiracion pausada detras de su oreja y las pequeñas caricias sobre su abdomen, la hicieron domri nuevamente...

todo el dia siguiente fue intenso, aun mas para andrea... a pesar de que levanto como nueva, durmio como hace varios dias no podia y no hubo nauseas al poner un pie fuera de la cama, se sentia renovada y muy ambrienta. en cuanto desayuno en compañia de samuel, se prepraron para el gran día que tendrian, la exposición empezaban en la noche, pero debian dejar unas cuantas cosas lista para al dia siguiente ir a miami.

todo aquello era sumamente importante para andrea y se lo debia a samuel. en cuanto llego la noche... samuel le entrego un vestido que porto con elegancia, la hacia ver enternecedoramente hermosa, el vestido se ajustaba a su cuerpo como una segunda piel, elegante y sobrio a la vez, el color era de un rosa blush que constrataba increible con su piel tan blanca y su cabello suerto como cascada sobre su espalda

al verla asi samuel tuvo unas ganas inmensa de quitarle el vestido y hacerla suya, hace varios dias no estaban juntos y aunque  la tenia a su lado, cada vez que estaba tan cerca de ella tenia que contenerse porque la pasión que dovordaba esa mujer lo iba a volver completamente loco, pero tenia algo preparado para ella, habia pasado mucho tiempo y no olvidava la forma tan exitadamente horrorosa que lo provoco, esa noche verla tan animada y alegre sabia que seria la indicada para hacerla pagar por lo que habia causado, la haria pagar de la misma forma

cuando llegaron a la galeria de arte, andrea miro su alrededor maravillada, un monton de persona estaba alrededor del lugar donde se estaba exponiendo sus obras, tomando fotos y otros cuchicheando maravillado por lo que estaban viendo, en cuanto estuvieron completamente adentro los aplusos no se hicieron esperar, la vieron entrar de la mano de samuel y de inmediato supieron que ella era la autora de la maravilla que estaban presenciando sus ojos. de inmediato unas personas los escoltaron hasta casi arrastar a andrea hasta un podium y dijera todo lo que significaban aquellas obras para ellas

sus manos temblaban mas que nunca, se sentia , podria ser atrevida, elocuente y parlanchina, pero hablar en frente de tantas persona, ver los flashes de las camaras de los periodistas era algo que la sobrepasaba y la ponia demasiado nerviosa

miro a un lado y ahí encontro esos ojos color miel que tanto la reconfortaban, miro nuevametnte al frente, respiro profundo decidida a empezar hablar

andrea: buenas... noches -dijo un tanto nerviosa- antes de empezar a detallar cada una de las obras que ven aqui.... quiero agrdadecerles a todos por su  presencia... gracias

luego empezó hablar de como se sentía, de que representaba cada obra: sus miedo, emociones, su infancia, su alegria, la forma tan despreocupada de vivir intensamente, la bondad inmensa que habia en su corazon, pero sobre todo, el amor que ponia en cada unas de ella, la entrega en ver como de cualquier tonteria podia sacar cosas que antes sus ojos eran maravillosas

andrea: para terminar, quiero agradecerle a una de las personas mas importante de mi vida, que aparecio de una forma arrazadora controlando cada una de mis emociones... bueno, algunas, suelo ser algo intensa-dijo y todo rieron, samuel al igual rio mientras negaba antes sus palabra- es una persona que jamas pense conocer y permitir entrar a mi vida de esa forma tan fuerte, tan agonica a tal punto de hacerse indispensable y que hoy le debo este logro... samuel -dijo su nombre y el la miro sorprendido- gracias por hacer de mis sueños una realidad incluso mas maravillosa de lo que esperaba

al rededor de las 10 de la noche se encontraban camino a un restaurante, samuel queria celebrar los exitos de andrea, de tener mas de 4 propuestas en menos de una noche. la llevo a un restaurante no elegante, pero si acogedor, mucho, sus parcedes estaban decoradas de un increible estilo mediterraneo con vista al mar sobre unas rocas, era increible el ambiente

andrea: ¿me creerias si te digo que creci aqui y no sabia de este lugar ?

samuel: es que es nuevo, apenas se acaba de inaugurar hace tres semanas, lo descubri una vez que conducia por aca... anda vamos -tomo su mano, entrelazo sus dedos y se los llevo a los labios-

andrea: es increible... eres increible. ¿sabes? -dijo ahora si muy segura de si misma, de el- te cielo -solto sonriendo con dulsura.

samuel: yo mas, mucho mas -sonrio y fue con ella hasta la mesa-

brindaron con champagne por los esa noche  y por una nueva vida a partir de ahí, andrea no supo a que se referia el en cuanto dijo eso, pero sea lo que sea, si era a su lado estaba mas que dispuesta a vivirlo

samuel: ¿que crees que pasara con nosotros mas adelante? -pregunto, queria despejar todas las dudas de andrea antes de hacer lo que venia pensando y planeando desde hace varios dias

andrea: no lo se, y prefiero no saberlo, siempre es mejor que la vida nos sorprenda

samuel: y sempre tienes razon -sonrio antes la respuesta de andrea

andrea: quiero irme a casa ya... quiero -sonrio con picardia mientras se quitaba un zapato- celebrar de otras formas -solto miendras colocaba discretamente su pierna en la entrepierna de samuel viendolo sobresaltarse ante ese acto tan lleno de lujuria

samuel: mesero -levanto su mano ansiado- tengo unas cuantas cosas mas preparada para ti -sonrio con picardía y se obligo a respirar de nuevo ya que andrea no se detenía-

andrea: ¿o-sea que hay mas? ¿dejaras de sorprenderme algun dia?

samuel: espero que eso nunca pase

ahora iban camino a la casa, Samuel sabia que andrea ni siquiera se imaginaba lo que tendria planeado para ella, la haria pagar de la forma mas excitante posible. cuando entraron a la casa, andrea solto sus zapatos por cualquier lado de la sala mientras que samuel detras de ella iba soltando los botones de su saco. se acerco a ella, la tomo de la cintura y sususurro en su oido

samuel: quitate la ropa... tenemos que hablar...

Jugando a Enamorarse Donde viven las historias. Descúbrelo ahora