10 de cada mes

Natalia.

Maldito 10!

Hoy él la verá, su estado de ánimo depende mucho de ella, tendré que aprender a manejar o disimular mis celos. Estaré para él pase lo que pase.

Viviana es una chica cargada de odio y rencor. No quiero que él sufra más de lo que ya ha sufrido, quiero alguien mejor para él, aunque ya me hago la idea de que ese alguien no sea yo.

Ashton siempre me ha visto como una muy buena amiga, casi como su hermana, pero no puedo controlar lo que siento dentro, no puedo pedirle a mi corazón que lo deje de amar, eso es como pedirle a un pez que viva fuera del agua.

Él es como mi complemento, mi todo; Es más, ni siquiera estoy yo, todo mi ser, alma, cuerpo, vida.. todo de mí, le pertenece a él.

Nosotros somos compañeros de trabajo hace mucho. Él conoce todo sobre mí, yo conozco mucho sobre él.

Ashton nunca ha sido un hombre enamoradizo, pero le atrae lo desconocido, lo peligroso, por ello, esa chica le llama tanto la atención, hasta el punto de sentirse enamorado. De sentirse como yo me siento por él, que nada te pertenece a ti, si no a esa persona.

El fuerte sonido proveniente de la bocina de varios autos me hace sobresaltar, miro a todas las direcciones posibles y me doy cuenta que me encuentro en la mitad de la calle. el semáforo está en verde y hombre furiosos me gritan y tocan sus bocinas desesperados.

Cuando mi cuerpo recibe ordenes de mi cerebro, camino hacia el otro extremo de la calle y pongo las manos sobre mi cabeza y masajeo mi sien con lentitud. Estaba tan sumida en mis pensamientos que no me di cuenta en qué momento salí de casa.

Saco los audifonos de mi bolsillo y los conecto al movil, pongo música suave y meto el móvil en mi bolsillo. 

***_***_***

llego a la librería y abro las puertas, limpio los estantes, organizo y prendo el computador, camino hacia la pequeña cafetería ubicada al frente, pido dos café con leche y vuelvo  la librería, pongo el de Ashton sobre la pequeña mesa y me siento con el mío detrás el mostrador.

Las puertas de abren y Ashton tiene expresión de decepción, se le nota decaído y melancólico. Me mira por unos segundos y sonríe, camina hasta llegar a mí, toma el café y besa mi frente.

Deja caer su bolso y se sienta en el suelo. Doy otro sorbo a mi café, respiro profundo, salgo de atras del mostrador y me siento a su lado.

-¿Que pasa Ashton?- le pregunto mientras miro mi café.

Él toma un poco de su café, sonríe de medio lado con tristeza y cierra sus ojos.

Dejo mi café a un lado y tomo su rostro entre mis manos. Él abre sus ojos y me mira fijamente.

Me besa. Mis labios no se mueven y no reciben la orden que les doy, permanecen quietos y no sé el por qué. Sus húmedos labios dejan de hacer presión contra los míos y él se separa rápidamente de mí.

-Lo siento, lo que hice estuvo muy mal, no debí besarte, lo siento- se disculpa y yo me golpeo mentalmente.

Toma su café y sale de la librería. Me levanto y me siento de nuevo detrás del mostrador.