Déjame trabajar |Xiuhan/LuMin| ChenHun |

Capitulo VII

Había pasado exactamente una semana desde el ingreso del chino a la compañía y cada día le ponía distintas cosas que hacer, desde ordenar una gran pila de documentos hasta limpiar el baño, lo peor de la situación era que el castaño no se negaba aunque ciertas veces se le notaba completamente irritado ya que los trabajos que le asignaban no tenían total lógica con el empleo.

—Chanyeol, dile a Luhan que lo quiero aquí en mi oficina, ya mismo— demandó Minseok con su típico semblante serio para la hora laboral, no sabía ni porque había llamado al chico pero sí tenía en cuenta de que quería fastidiarlo.

—Entendido Señor Kim— Asintió con una leve voz grave mientras se inclinaba y abandonaba la sala. Justo en ese momento el pelirrojo decidió voltear su asiento para mirar por el gran ventanal, mirando hacía la clínica veterinaria de su novio, justo en este momento, el de sonrisa gatuna salió de dicho lugar para encontrarse con un hombre casi tan alto como Yeol que tenía al parecer un perro esponjoso y blanco en sus brazos. Los vio saludarse de abrazo y Min sólo les regaló una mirada desinteresada, ya que lo que tenía en mente era que simplemente era un cliente frecuente.

—Disculpe señor Kim, ¿me quería ver?— Preguntó una voz detrás del mayor, haciendo que éste se volteara lentamente para hacerle un ademán de que se sentara en la silla frente a él.

—Te cambiaré de posición, quiero que antes de que vayas a una rango más alto, seas mi asistente por determinado tiempo— Musitó sin más el más bajo de ambos, en su rostro se encontraba una expresión un tanto fría pero se creó una sonrisa ladina al ver la expresión del castaño. Éste lucía algo irritado.

—Está bien señor, yo...

—Empiezas...— Minseok hizo una pausa mirando su reloj de mano que marcaba perfectamente las 10 am —Ya mismo, ve por unos papeles al vestíbulo, Park Chanyeol, mi secretario será quien te los dé, dile que yo ya tiré la cuerda.

Luhan asintió algo desconcertado mientras se levantaba y dejaba aquella habitación. Se dirigió al primer piso por el elevador y cuando llegó a éste decidió buscar al alto de grandes orejas.

—Chanyeol.— lo llamó para atraer su atención que al parecer estaba puesta en un chico más bajo que ambos.

—Baek, te lo he dicho muchas veces, Kyungsoo es sólo un compañero de trabajo.— Hizo una pausa mientras tomaba su puente de la nariz —¿Sabes? Vuelve al instituto ya mismo, estoy trabajando, esto lo hablaremos más tarde. Te amo, ¿sí? — El más alto le acarició el cabello al rubio que se encontraba allí y ese antes de irse, le dio una rápida mirada a Luhan para luego sonreirle.

—Ah, chanyeol...

—Lo siento, era mi novio. ¿Necesitas algo?

— Dice el Señor Kim, que ya tiró la cuerda... — Una mueca se formó en el rostro del chino esperando la reacción ajena, vio como el pelirrojo sonreía ladinamente y empezaba a buscar unos papeles. Lu se sorprendió porque eran demasiados y subirlos a su cubículo le tomaría al menos tres viajes, por ello bufó molesto.

Yeol le dijo que le ayudaría ya que sentía pena y mientras el castaño llevaba la un poco menos de la mitad de papeles, el más alto llevaba la mayoría fácilmente.

Al llegar al cubículo de Han, el de orejas grandes dejó los papeles en el suelo con miedo a que se cayeran del escritorio y le dedicó una sonrisa junto a un "buena suerte".

🐩🐶

Jongdae se encontraba como siempre trabajando en la veterinaria y ese día todo estaba raramente calmado, llegaban clientes sólo a comprar comida para su mascota, juguetes o accesorios, lo normal, no como la noche anterior, había sido la noche más turbia que había tenido que atender. Un chico muy alto, de hecho a Chen la estatura le recordaba a la de Chanyeol, lucía un sedoso cabello negro y su semblante era muy serio, había llegado casi a media noche, en su rostro se podía ver como había llorado y aún tenía lágrimas en este mismo pero en sus brazos se encontraba un pequeño perro de pelaje blanco esponjoso, un Bichon Frisé pero había algo que le espantó cuando lo miró mejor, el pequeño animalito estaba ensangrentado y emitía sonidos de molestia.

Chen logró detener el sangrado, le hizo un puntadas y tuvo que inyectarlo dos veces, con un analgésico y un sedante, el perrito se durmió después de unos segundos haciendo que el de sonrisa gatuna sonriera y suspirara.

—¿Cómo está él?— Aquel chico cuyo nombre desconocía habló, Jongdae se levantó de su asiento rápidamente.

—Él está bien, sí tuvo un corte, bueno una mordida diría yo, en la parte de su lomo, muy fea pero no es tan grave. Ya le hice la sutura y está durmiendo.— Al terminar sus palabras el chico alto lo había rodeado con sus brazos en un abrazo y parecía no querer soltarlo nunca. —U-Uh... ¿Acaso tu mascota peleó con otra? 

—Sí, el perro del vecino es un Pitbull y se escapó, todas las noches saco a Vivi al patio y al parecer el perro ajeno se escondía allí y corrió a morderlo.— musitó el azabache alto mientras temblaba levemente ya que decirlo le recordó a la sangrienta escena que había presenciado.

Después del abrazo y varios medicamentos recomendados, el chico alto se fue con una sonrisa y aquel semblante serio se había desaparecido por unos minutos, para luego irse.

Los pensamientos de Jongdae fueron interrumpidos cuando llegó otro cliente al local, luego de que éste se fuera, él decidió salir de igual manera para tomar un poco de aire.

—Doctor, ¿que tal?— Chen escuchó una voz familiar atrás de su espalda y se volteó, encontrándose con el chico de la noche anterior.

—Estoy bien, qué tal está...

—¿Vivi?— preguntó el azabache con una sonrisa y miró al perrito en sus brazos. — Mejor pero algo le ha estado molestando, por eso lo traje nuevamente.

—Claro, pasemos...

—Doctor, uhhh... Anoche olvidé decir mi nombre, me llamo Oh Sehun.

—No hacía falta ya que — sus palabras fueron interrumpidas por aquel contacto que habían tenido la noche pasada, ese abrazo tan reconfortante.

—Gracias por salvar a mi bebé, Doctor Kim...

Eran pasadas de las 23:00 ( 11:00 pm ) y Luhan aún se encontraba trabajando en aquellos papeles, se encontraba enojado e irritado, ¿por qué él? Se preguntó varias veces y pensó en renunciar pero debía tener ese trabajo, el presidente le había prometido que después de ese trabajo tendría un papel mejor en esa empresa. Debía aguantar.

—¿Aún trabajando Han?— El chino volteó su mirada hacia donde venía la voz, encontrándose al presidente. Joder, se ve bien con la corbata suelta, pensó el castaño.

—Aún no he terminado Señor Kim.— Musitó Lu volteandose para proseguir su trabajo. Éste mismo sintió como su jefe colocaba una silla al lado de él, mientras colocaba una mano sobre su hombro y se pegaba más a él.

—Sugerencias económicas para la producción de nuevos productos con agencias chinas.— Habló suavemente Minseok y volteó a mirar a Luhan, que aún encontraba su rostro en los papeles. —¿Crees que esa sea una buena idea teniendo en cuenta los problemas políticos de Corea Del Sur y China?— Musitó nuevamente Xiumin mientras ladeaba su cabeza para mirar mejor al chino, el castaño se abstenía a mirarlo de vuelta entonces su mirada se encontraba únicamente en los papeles.

—No, señor, no lo creo...

—Exacto Luhan, no es así.— Min realizó una pausa para acercarse al oído ajeno y susurrar. —Estás lleno de errores, como en la secundaria.

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¡AL FIN ESTÁ EL CAPÍTULO 7! No había estado teniendo motivación pero ya la tengo, ahhhh 💕💕💕

¿Vieron que las últimas escenas están basadas en el primer gif? Hay que sacarle imaginación a todo. 🌸

Quería dejarles mi Instagram; @Huskyeol