¿Comercio internacional? (Ina)

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El despertador sonó por toda la habitación, más bien no sonó, me taladró la cabeza, puto despertador. Lo apagué con un golpe contra el suelo, al verlo hecho añicos en el suelo me di cuenta que no era culpa del despertador, pero era demasiado tarde, ¿A quién le importaba? A mí no, desde luego.

Me levanté de la cama hacia el armario para coger ropa limpia y de ahí a la ducha, James aún no se había despertado y no entiendo como no, había estampado el despertador contra el suelo.

Me di una ducha rápida, me vestí y me sequé el pelo en tiempo récord. Salí del baño y James ya no estaba en la cama, bajé a la cocina para desayunar y averiguar donde estaba James y ahí estaba, preparándome el desayuno y yo pensaba que estaba enfadado conmigo, y si lo estaba se estaba comportando como un auténtico caballero.

Hice el menor ruido posible acercándome a James por la espalda, rodeé su cintura con mis brazos y le besé sonoramente la mejilla.

-Buenos días madrugador, no tenías porque levantarte.- Susurré en su oído y eso hizo que se estremeciera.

-Buenos días.-Dijo girándose y quedando los dos cara a cara.- Tenía que levantarme a esta hora para ir a ensayar.-¡MENTIRA! Eran solo las 7:30, ellos siempre ensayaban sobre las 16:00, se cree que soy tonta.- ¿No vas muy arreglada?

-Pantalón, jersey y botas, ¿En serio me lo dices James?.- Cogí el desayuno que James había estado preparando, tostadas y café, y me senté en la mesa a tomarlo.

-Ayy, mi guapura.- Dijo imitando mi acción cogiendo otro café.

Me metí una tostada prácticamente entera y le contesté.

-Zi ez que zoy perfecta.- Dije riendo y claro, casi me atraganto, tengo que aprender a no reír mientras como, definitivamente.

Acabé el desayuno lo más rápido que pude sin atragantarme, vamos que tardé un siglo masticando lentamente y claro, James, Marvin y Mickey se reían de mi, me hacen bullying. Subí rápido a lavarme los dientes y cogí mi bandolera, no llevo mochila, soy una malota. Bajé rápido y ví a James vestido y caminando hacia mi mientras yo me calzaba.

-Mr.McVey está usted hoy demasiado guapo, ¿No le parece?

-Mrs. McVey creo que estoy como siempre, y la llevo yo a la universidad.- Me sorprendió que me llamara Mrs. McVey pero era bonito y claro, me sonrojé.- No te sonrojes, es algo normal, si me lo permites algún día serás Mrs. McVey.

- No dudaría la respuesta.-Pensé, en alto, como siempre, y James se rió. Cogí mi chaqueta cuando estuve ya calzada.- ¿Nos vamos?.- Dije intentando quitarle hierro a mi anterior metedura de pata.

-Seeeep.- Cogió las llaves del coche y abrió la puerta de casa dejándome pasar, adorable, cerró la puerta y entrelazó su mano con la mía.

Vimos a una chica ir haciendo footing por la calle e iba con un chico parecido a Connor, espera, era Connor. ¿Connor haciendo deporte? Le paré de golpe cuando estaba pasando por delante nuestro, la chica paró a la vez.

-Ey, estaba siguiendo un ritmo muy bueno. ¿Qué quieres Alice?

-¿Haces deporte?

-Sí, desde hace unos días, ella es Ina, mi personal trainner.- Dijo señalando a la chica que tenía cara de estar perdida.

-Encantada, yo soy Alice, amiga de Connor.- Me presenté.

-Encantada.- Dijo sonriendo ampliamente.- Como bien ha dicho Connor, yo soy su entrenadora personal, Ina.

-Y entre tú y yo, realmente hace ejercicio o se intenta librar.- Ella rió fuertemente y miró a Connor que estaba entre la risa y el enfado.

-Nah.... Trabaja bien jaja.

Fearless (The Vamps)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora