Atlántida

427 28 16
                                    


Estaba ahí de pie frente al anciano; sorprendido por sus palabras de "Bienvenido a Atlántida", ¿qué hay dentro; una ciudad? Dirijo mi mirada hacia el interior, aprecio la iluminación de la caverna, no me lo creo, hasta me olvide de que estaba lleno de sangre, que tenía hambre, que hace unos pocos segundos le estaba cortando la cabeza a alguien, una sonrisa involuntaria se dibujaba en mi rostro, verdaderamente me sentía ¿feliz? tal vez era eso; Tobías se nota que está cansado, es que en realidad fue un día muy agitado. Comenzamos a ingresar; era notorio que conforme nos adentrábamos la temperatura empezaba a descender, era una entrada sumamente ancha, avanzo lentamente apreciando con cuidado las paredes de piedra que gotean el agua que se filtra; sin bien es cierto, la caverna esta iluminada tiene rincones sumamente oscuros y uno que otro murciélago revolotea mientras vamos pasando, cada palabra que uno dice genera un eco un tanto macabro..., hasta que por fin después de adentrarnos unos 100 metros llegamos a una gran bóveda central; es como un domo natural dentro de la cueva.

Iba divisando lo que había dentro, mi mirada pérdida en este paisaje subterráneo, admirando detenidamente; cuando de pronto una joven corrió hacia nosotros y se lanza a los brazos de Tobías, fundiéndose en un largo abrazo

- Que dicha que llegaste abuelo...Me tenías muy preocupada.

- Tranquila; todo está bien, ¿tu hermano Tomás ya llegó?

- Aún no llega...

- Mira Mérida este es nuestro nuevo amigo... Wil ella es mi nieta Mérida.

Mérida me observa fijamente, como examinándome, no me dice nada y vuelve a ver a su abuelo..

- Abuelo, ¿se puede confiar en él?

- Pues se ha portado muy bien hasta ahora, y hace días que lo vengo observando, parece buena persona.

Le extiendo mi mano a Mérida: -Mucho gusto joven, en realidad no tiene por qué temer, estoy muy agradecido con su abuelo; él me salvó la vida. Así que ahora soy uno de ustedes; ella cambia un poco el semblante y parece cambiar su cara a una expresión de aprobación.

Tobías le ordena a su nieta que me muestre el lugar, y ella pues de no buena gana me indica con un movimiento de cabeza que la siga.

Esta chica no es nada tierna, es de baja estatura, ojos pequeños y negros, un poco morena, cabello largo todo en una sola trenza que le llega a media espalda.

-Pues bien.. ¿ Qué es este nombre de Atlantida?

- mi abuelo le gustaban mucho las historias de civilizaciones pérdidas; y pues la Atlántida era su preferida, pero como ya ves, esto no es una gran ciudad; somos unas pocas personas, éramos más pero algunos han muerto a manos de "la Ley" otros han muerto de enfermedades; actualmente solo quedamos mi abuelo, mi hermano gemelo Tomás, 7 personas más y yo, ya las iras conociendo poco a poco. Pues bien; esta cueva está dividida en tres sectores, comida- descanso- y estar. La parte principal es como una especie de Sala de estar, a mano derecho están los dormitorios, y a mano izquierda es el área de comidas y allá es donde nos dirigimos ahora.

Iba impresionado, los dormitorios pues eran en el suelo pero tenían muchas sabanas, habían hecho camas de piedras, y habían conseguido colchones, el área de comidas, tenían unas cuantas gallinas, en un encierro, no me acordaba como eran las gallinas, también habían muchas plantas sembradas en hidroponía que por cierto solamente lo había visto en mis libros de ciencias de la escuela.

- ¿Así que esto es lo que comen?

- Pues ya ves comemos verduras, carne de pollo y de vez en cuando logramos encontrar en el bosque una que otra cosa comestible, al fondo de esta caverna pasa un río subterráneo, el agua no nos hace falta hay unas escalera hechas de cuerda por ahí bajamos y la recolectamos.

APOCALIPSIS #PGP2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora