Capítulo 10
Narra Louis
No sabía cómo reaccionar, Harry había llamado con toda la naturalidad del mundo a mi madre por su apodo, es decir, yo nunca la había mencionado en mis conversaciones pero cabía la posibilidad que alguno de los tres otros chicos le hubieran dicho algo. Hasta ahí era todo normal, pero claro, mis amigos le llaman Johanna y no Jay. Jay solo le llamamos en casa, entre la familia y dudaba mucho que mis amigos conocieran ese apodo, y aun así conociéndolo, no se habrían referido a ella de esa forma.
-Y-yo... ¿Podemos hablar mañana de esto? No creo que sea el momento y lugar adecuado - el rizado, ahora nervioso, miro de reojo Niall.
-Creo que he captado la indirecta...- y sí, un deje de dolor había pasado por la cara de Niall, pero este enseguida lo sustituyó con una sonrisa y un grito- ¡Vamos a preparar las camas!
Me estaba matando la curiosidad. ¿Harry me había estado mintiendo? Puede que no nos conociéramos de hace mucho, pero me transmitía una confianza inimaginable, por lo que me costaba creer que me hubiera engañado o escondido algo, o al menos con maldad.
- ¿No podemos hablar ahora? No voy a poder dormir.
-Puedo ir a preparar las camas solo, no os preocupéis. Avisadme cuando acabéis de hablar, estaré en mi habitación.- Niall desapareció por la puerta de la sala de estar, dejándonos a Harry y a mí solos allí, sentados en el sofá. Los dos nerviosos y cada cual con sus propias preocupaciones.
***
Me había quedado pasmado. Tras oír el bastante breve relato del de ojos verdes estaba inmóvil, sentía mi boca secarse, un sollozo me sacó de mi trance.
-Yo no quería engañarte, lo juró Louis, yo solo no sabía cómo decirlo- su llanto cada vez sonaba más desconsolado y aquello me estaba partiendo el corazón.
Así que olvidé todo, olvidé que Harry me había estado mintiendo, olvidé que era un tonto y despistado y qué no me había dado cuenta, olvidé que Harry era el mismo niño con el qué había soñado tantas veces, olvidé el tiempo y el espacio, olvidé todo y me fundí en un abrazo con Harry, sólo Harry. Porque daba igual. Era extrañamente irrelevante todo lo que había pasado, no importaba nada, y es que sentir aquellos brazos me hacían sentir en casa.
Me aparté un poco, y dejé mis manos en la cadera del apuesto chico. Sus lágrimas habían cesado, pero sus ojos seguían llorosos. Subí mi mano derecha hasta su mejilla, quería hacerle saber que todo estaba bien, que ni siquiera tenía que perdonarle nada pues su presencia lo valía todo. Quería transmitirle todos los sentimientos que estaban floreciendo en mí desde que lo vi en clase, sin saber de qué se trataba de mi amor de infancia, por qué era así, él siempre me había hecho sentirme especial, y ahora mirándole a los ojos, me volví a sentir un niño, indefenso pero protegido, sin preocupaciones y sobre todas esas cosas, feliz.
Sentía su respiración muy cerca de mis labios y no pude evitar acercarme un poco más. Cerró sus ojos con tranquilidad, tan lentamente que parecía que todo estaba pasando en cámara lenta, subí mi mano izquierda desde la cadera hasta su otra mejilla y no sé cómo fue que pasó, pero de un momento a otro mis ojos se encontraban cerrados y mis labios fundidos con los suyos. La sensación era indescriptible, era un beso lento y tierno, un simple toque que intentaba transmitir nada más que amor.
Fin.
ESTÁS LEYENDO
Ocurrió inesperadamente- L.S
FanfictionHarry Styles era un niño de 5 años, obsesionado con las coronas de flores, el color rosa y su mejor amigo Louis. Louis Tomlinson, un niño de 6 años al que le encantaban los cochecitos de juguete y pasar tiempo con su mejor amigo Harry. Aunque claro...