-Capitulo 6 (Maratón 2/3)

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- ¿Y?- pregunte cuando nos encontrábamos camino a los casilleros-. ¿Que tal te fue con Mark?

- ¡Fue genial!- contestó entusiasmada-, pensé que no podría dirigirle la palabra pero me equivoque.

- Parecían bastante entretenidos. ¿De que hablaban?

... - Nada interesante, el me contaba sobre su familia... me dijo que tenía una banda con Lucas, Nicolas y Victor

- ¿No quedaron en salir, ni nada?

- No, todavía no. Y tu, que tal te ha ido con Cristian?

- ¡Horrible!- comenté-, es un completo estúpido. Todavía no he podido terminar el trabajo de Lengua porque el no ha querido contestar mis preguntas.

- Pues inventa.

- ¡Es lo que hice, pero nada de lo que escribo me parece convincente!

- ¿Tienes su número? Tal vez puedas llamarlo y hacerlo responder.

No quería decirle a Carolina que tenía el número de Cristian ya que me llenaría de preguntas, no quería que haya algún malentendido y ella piense que ahora estamos en algo o yo siento cosas por el.

- No, pero ya veré como arreglármelas.

Al parecer Catalina se había retirado del colegio por la mañana ya que tenía un fuerte dolor de estomago. En las clases de la tarde en ninguna coincidía con Caro, otro motivo más por el cual odiar los martes. 

Esta tarde tendría que ir a casa sola, Carolina tenía que ir a lo de su madre ya que su abuela había ido de visita. No tenía problema en ir caminando a casa pero la idea de comprarme un auto cada vez se hacía más fuerte. Hoy se lo propondría a mi madre... aunque tenía bastante clara la idea de que me diría que estaba loca y que no tenía edad.

- Llegué- avisé cuando entre a casa. Apoyé el bolso en la mesa y me quite el buso.

Solo había una cosa que me haría odiar aún más este día, que mi mamá este en la oficina arreglando cosas para ese tipo. Su trabajo comenzaba en una semana así que no tenía que hacer nada. La obligaría a estar en casa si era necesario pero no iba a dejar que pasara más tiempo del que tenía que pasar con ese tipo.

- Aquí estoy- mamá salió de la cocina, estaba hablando por teléfono. Me senté en la mesada de la cocina y agarré una manzana. Estaba buscando las palabras precisas para preguntarle a mi madre si me compraba un auto. ¿Sonaba un poco loco, no? pedir un auto... era un regalo bastante costoso-. ¿Qué tal te ha ido en tu día?- pregunto entrando a la cocina.

- Bastante bien.

- ¿Y ya has hecho amigas?

- ¡Sí, Caro y Cata!

- Puedes invitarlas a casa algún día de estos. ¿Las clases cómo van?

- Bien, sí bien...- sin contar que no entregaré el primer trabajo con nota del bimestre-. Ma... yo quería pedirte algo.

- ¿Qué cosa?

- Como verás...- ¿cómo se lo pido? ¡ayuda!- este... la escuela no queda tan cerca de casa como habías dicho, y todas las chicas del instituto tienen su propio auto- mi mamá soltó una carcajada y se giró para mirarme.

- ¿Estas loca, cierto? ¿Quieres un auto?

- ¡No aguantaré caminar 40 calles diarias!

- Y yo no me sentiré bien sabiendo que andas sola con un auto, además tampoco estamos bien económicamente como para poder mantenerlo.

Bueno, ya tenía una idea de que esto pasaría pero con intentarlo no perdía nada. Mi única opción para conseguir un auto era conseguir un empleo de medio tiempo pero... ¿valdría la pena? no lo sé.

- Tengo tarea, estaré en la habitación- dije lo más cortante posible. Subí a mi cuarto y saqué las carpetas. Tenía tarea de biología, matemática y... bueno, terminar el trabajo de Lengua. Lo había pensado bastante bien y si no se me ocurrían respuestas lo suficientemente reales tendría que llamar a Cristian, no sé para que me había dado su número pero ya que lo tenía lo utilizaría.

¡Tres horas, tres largas horas tratando de hacer los problemas de matemática! Sabía que no era buena en esa materia... ¿pero tener que recurrir a mi madre para que me ayude a resolverlos? Eso era caer bastante bajo. Por suerte la tarea de biología la tenía casi terminada.

- ¡_____ baja a cenar, la comida esta lista!

Y sí, así se había pasado mi tarde, haciendo tarea. Me la pasé sentada sumando, restando y dividiendo números decir que todavía me queda el trabajo de Lengua por terminar. Llamaría a Cristian cuando termine de cenar... ¿o el ya estaría durmiendo? no, no creo. Jamás imaginaría a Cristian durmiéndose a horario. Mamá cocino carne con ensalada, trate de comer lo más rápido posible ya que me ponía un tanto nerviosa estar sentada con ella y no hablar de nada... eso era raro ya que ella siempre tenía algún que otro tema de conversación.

- ¿Hola?- contestó una voz, de fondo se escuchaban las voces de unos chicos gritando.

- ¿Cristian, eres tu?

- Sí, ¿quién habla?

- Soy _____.

- Esperen, ustedes sigan su juego no muevan el mío- se escucho que el le decía a los demás chicos-. ¿Que quieres? Cuando te dí mi número jamás pensé que lo usarías.

- Necesito que contestes mis preguntas.

- Ah claro, ya veo el motivo. Aquí van mis respuestas, sí, sí, no, tal vez y no.

- ¡Esas no son respuestas validas!

Estúpido, ¿quién se cree? me corto la llamada. Ahora sí, no dejaría este trabajo sin hacer. Inventaré las respuestas... lo que tendría que haber hecho desde un principio, si el profesor se daba cuenta que yo había inventado todo le diría la verdad; que Cristian no había hecho nada. Obviamente el 'Frío, calculador e ignorante' quedaría anotado, no lo borraría si lo que buscaba el profe era una descripción sincera no había nada más sincero que eso. Y si no le gustaba... bueno que me repruebe ya no puedo hacer nada.

~Blind Love (Xoda y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora