El abrazo más largo que he tenido, ha sido con Asael, y también el más hermoso.
Tal vez mi vida nunca fue aburrida, sólo necesitaba encontrar la parte interesante y cautivadora que se escondía muy en el fondo de mis pensamientos.
Y de ese lugar saliste tú, Asael...
[...]
Abro los ojos y me percató que ya es de día.
No puedo evitar sonreír todas las mañanas, recordando el tiempo que paso con Asael en mis sueños.
Mi razón de vivir ahora consiste en ver como pasa las clases, el hermoso cielo y llegar a casa para tomar una siesta.
—¡Sophi! —Me llama mi madre antes de que entre a mi habitación.
—¿Necesitas algo mamá?
—Estas aburrida de estar todo el día aquí, ¿Verdad? —pregunta mi mamá segura de lo que dice.
Sonrío.
—Amo estar en casa.
Dicho eso, entró a mi habitación y me acuesto en la cama.
Ya voy a verte Asael.
Ya no necesito un vaso de leche para conciliar el sueño, la verdad, ahora intentó cansarme más en la escuela, y así llegar a casa con el sueño suficiente para dormir rápido.
Y pensar que todo mi mejoramiento físico se debe por el objetivo de soñar lo más pronto posible.
Si las personas escucharán esto, pensarían que estoy loca, pero ¿saben?, la locura es atractiva para mi.
[...]
Ahora me encuentro en un bosque desconocido, se supone que sólo tengo sueños en el bosque de los manzanos.
¿Por qué estoy aquí? ¿Qué le pasó a Asael?
Curiosa de lo desconocido, y algo miedosa, comienzo a recorrer el bosque sigilosamente.
No quiero pisar mal y lastimarme, suelo ser muy torpe.
El bosque es asombroso, sus árboles tienen esas hojas naranjas que sólo en otoño aparecen.
Un aire tan puro, que me relaja con solo respirarlo, es tan cautivador.
Me pregunto cual es la razón de este cambio tan drástico de lugar.
¿Encontraré a Asael?
Sigo caminando y no encuentro rastro alguno de Asael.
Tengo miedo de no volverlo a ver.
—¡Lisa! —Llama la voz de Asael.
¡Asael! ¿Quién es Lisa?
Comienzo a correr por el lugar donde se escucha la voz de Asael.
Y encuentro el peor escenario que mis ojos pueden ver.
Asael abraza con fuerza a otra chica.
Mis ojos se cristalizan, y tapó mi boca con mis manos.
Puedo sentir como se rompe mi corazón, el dolor es abrumador, duele, ¡Duele mucho!
Mi cuerpo está inmóvil presenciando el doloroso momento desde lejos.
Asael solo mira ha esa chica y no sé da cuenta de mi presencia.
Sólo la abraza y acaricia sus mejillas con dulzura. Tengo miedo de que pase algo más.
Asael mira fijamente a la chica que no conozco y se acerca lentamente a ella.
¿La va a besar? ¡No, no lo hagas!
¡No, por favor!
Y justo cuando están a unos centímetros de rozar sus labios, yo...
—¡No! —grito con todas mis fuerzas —¡No lo hagas Asael, yo te amo! —vuelvo a gritar mientras las lágrimas salen de mis ojos recorriendo mis mejillas.
Asael se aparta rápidamente de la chica por el susto y mira hacia mí, para encontrarse con mis ojos.
—¿Quién eres? —pregunta desconcertado.
Abro los ojos como platos y me quedo sin palabras las cuales decir.
¿Asael no sabe quién soy?
Continuará :3...
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Sweet Dreams
KurzgeschichtenEn lo profundo de los sueños, donde la realidad se distorsiona y aquello que parece tangible resulta ser una simple ilusión, dará lugar al verdadero significado de lo indeleble.