Cameron es el tipo de persona que:
A, es expulsado luego de intentar "defender sus derechos".
B, no deja de comer y aún así no engorda.
C, está perdidamente enamorado de alguien a quien no puede querer.
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Estar en la misma clase que Danielle con Will a mi lado es todavía más tedioso desde que la vi sentada codo a codo con Celeste y Karen. No me hace falta hacer demasiadas cuentas como para poder ver que nada bueno va a salir de ahí para mí. Por otro lado quiero pensar que, si Cassie de verdad está siendo sincera por primera vez en su vida, de alguna manera u otra conseguirá que ellas se calmen. Al final del día si el odio hacia mi persona existía era por ella, porque lo promovía inventando mentiras que me dejaban mal parado. Pero ahora se supone que eso acabó, que sus estrategias ya no tienen razón de ser. El problema es que se trata de Cassie, la persona menos confiable que ha pisado alguna vez la tierra. La clase de Literatura es lo que menos podría importarme ahora mismo, claro está. Sin embargo, tengo que darle un punto a mi ex mejor amiga, me gusta o no. Y es que tuvo razón, demasiada, al pensar en que seguía muy enfadado con ella. También la tenía al suponer en que no tengo intenciones de escucharla. Todavía siento que podría engañarme en cualquier momento, utilizarme para volver a reírse de mí como ya lo hizo antes. Puede incluso estar planeando devolvérselo a Will en esta oportunidad. No lo sé, pero desde lo que pasó solo soy capaz de desconfiar de ella.
Tomo un lápiz, dubitativo, para fingir que juego con él. Espero al momento indicado hasta que el profesor parece terminar sus explicaciones y volver a distraerse en sus libros, casi como en todas las clases. Desde aquella vez en la que nos humilló no ha vuelto a dirigirnos la palabra ni a mí ni a Will más que para lo necesario. Aprovecho entonces su despiste para escribir algo en el margen de mi hoja de trabajo, el cual termino inclinándolo hacia Will.
¿No crees que deberíamos intentar hablar de esto?
Will se inclina sobre mí como si estuviese explicándome algo, mientras escribe la respuesta. El profesor apenas se inmuta ante esto.
¿No crees que deberías intentar concentrarte un poco más?
Bufo por lo bajo al mismo tiempo en el que me echo hacia atrás en mi silla. Parece imposible hacerle cambiar de opinión cuando algo se le mete en la cabeza, pero tampoco estoy dispuesto a permitirle deshacerse de mí sin hablar primero. Quiero mostrarle las notas de Cassie. Hacerle saber que esta vez puede ser diferente, pero para ello necesito que hablemos. Antes de poder contestarle, el profesor alza la mirada y se dedica a analizarme como si me hubiese pillado haciendo algo bastante malo, lo suficiente como para ser castigado. Sin embargo no hace ni dice nada, casi como siempre hace. Ron ya me lo dijo una vez, y es que a los profesores les encanta que les tengamos miedo. Hacen de todo para que así sea. Este es profesional en eso, o al menos conmigo. Luego de un par de segundos, vuelve a prestarle toda su atención a sus cosas, pasando de mí. Me apresuro a sacarle provecho a ese pequeño acto, borrando lo que había escrito Will para agregar esta vez un nuevo mensaje.
Después de clases podríamos volver juntos.
Will, al leerlo, me devuelve una mirada seria.
—No lo sé, Cam—masculla en apenas un susurro—. Ya veremos.
¿Ya veremos?
¿Y se supone que tengo que concentrarme cuando él parece pasar de mí tan olímpicamente?
