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Necesito con desesperación lo que resta de mi ropa, la mayoría me queda algo grande o demasiado ajustada. Me he dado cuenta que Newen es algo distraído, se le olvidan las cosas con facilidad pero es simpático. Ha decidido enseñarme a estar en mi estado puro ya que el fue el primero que lo logro, llega a mi con una caja de madera y la deja en el pasto.

- ¿Lista? - tiene una sonrisa grande y con los dientes perfectos, sus ojos son un poco menos grises que los de su hermana, su piel es blanca aunque su pelo rubio no combina con todo eso.

- Supongo que si... - sonríe y toma la caja de madera y la abre enfrente de mi, en ella hay una pulsera de broche con un diamante tanzanita, con una cadena que lleva hasta un anillo con el mismo diamante de la pulsera en el medio, toda de plata. Newen la toma y deja la caja en una banca.

- Supongo que ya te explicaron lo que es estar en estado puro - toma mi mano y coloca la pulsera con delicadeza en mi mano derecha, sus manos son frías. Asiento con la cabeza -  tienes alguna idea de como podrías hacerlo.

- No tengo ni idea de como subirme a mi cama cuando esta flotando, menos tendré idea de como convertirme en aire. - Newen ríe.

- Tu me recuerdas cuando vi por primera vez mi cama de agua... bueno en realidad es como un estanque pequeño pero... bueno aquí el punto es que debes como que aflojar todo tu cuerpo.

- ¿Y para que es esto? En realidad es muy bonito pero para que es - veo el brazalete y el diamante azul brilla con el sol.

- Es para que, en caso de que llegas a ser aire, puedas controlarte. Hay veces en el que tu misma parte lisa, y que en este caso la has desarrollado bastante, puede volverse en contra del elemento.

- Pensé que yo era el elemento...

- Y lo eres, pero también eres lisa, tu decides si dejas entrar el aire y tu decides si lo alejas. Tu eres tu propia arma y decides como usarte, el brazalete ayuda a que ni te alejes tanto ni entres demasiado, con el tiempo aprenderás a controlarlo sin el. Ahora el aire es ligero, libre y si no empiezas a ser eso en tu interior jamas lo seras en el exterior.

- Que pasa si me alejo mucho - mi boca esta seca por alguna razón.

- El aire se saldría de ti y serias completamente lisa.

- Y si me adentro demasiado...

- Entonces no habría nada mas que aire al cual controlar y tu propósito es serlo y controlarlo - mi cabeza se revuelve aun mas y Newen lo nota en mi mirada - se que es complicado de entenderlo y lo es. Pero con el tiempo puedes llegar a entenderlo. Pero basta de platica que si no avanzas algo Ian es capaz de hacerme dormir en el rió y a decir verdad ese lugar es muy frío. - sonrió al pensar en como lo habrá descubierto.

Me muestra una serie de movimientos y muy notablemente tiene mas paciencia conmigo de la que Ian puede contar y me ayuda a levantar cada que caigo. En ocasiones puedo ver como sus manos se convierten en agua y el me asegura que por instantes mis pies desaparecen.
Los movimientos son lentos pero mis brazos ya se entumen.

- Y cuanto tiempo tardare en lograrlo - Newen ve como una mariposa pasa frente a el mientras me estiro un poco.

- Mmm pues yo tarde 5 meses desde que empezamos a centrarnos en eso, el ultimo fue Andrew y le costo un año entero. Pero descuida yo se que puedes lograrlo -  asiento un poco y me dice que ya es suficiente por hoy,  le devuelvo la pulsera y la vuelve a guardar en su caja. Esta por decirme algo mas cuando su mirada se posa en el pasillo de atrás - Aileen espera - y corre hacia ella dejándome ahí parada. Me suelto el cabello y me quedo sentada hasta que Aarden llegue para ir de nuevo a los libros. Melina va por el pasillo de enfrente y ahora soy yo la que corre hacia ella.

Con El AireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora